domingo, 19 de enero de 2020

FUENCISLA

"La mañana de hoy, domingo, hemos desoído el consejo público de adoptar todas las precauciones posibles frente a la amenaza de la borrasca Gloria, un tremendo temporal de invierno que azotará Valencia y sus alrededores desde hoy hasta el próximo martes/miércoles, y hemos salido a la calle, eso sí, provistos de ropa de abrigo y paraguas, para visitar el Centro del Carmen y conocer la exposición de Fuencisla Francés, 'Vanishing Point' (Punto de fuga), que ha resultado ser una magna obra de arte contemporáneo que llena, en particular, la mejor sala del Cármen, la conocida con el nombre de un arquitecto de por aquí, de cuyo nombre no me acuerdo, aunque lo intento.

La lluvia blanda nos ha aompañado en nuestro trayecto hasta el museo, en cuya recepción nos han facilitado sendas bolsas de plástico para depositar nuestros paraguas mojados antes de iniciar la visita.

Antes de proceder a la crónica de la exposición, comentaré que, si bien hemos vuelto a casa sanos y salvos, y hemos comido el contenido de un bote de fabada asturiana, mi mujer, al consultar los veintiséis wassats, o como se diga, que ha recibido durante esta mañana en su móvil, ha podido contemplar la nieve cayendo en la aldea de Estenas, donde tenemos una casa desde hace unos veinte años, por medio de un vídeo de autor desconocido que ha recibido de nuestro hijo Jordi. Una pasada de vídeo que se ha apresurado a remitir a familia y amigos.

A lo que iba. La exposición de Fuencisla tiene una dimensión artística y un volúmen espacial acojonantes, pues llena casi todas las paredes del museo, en especial las de su sala principal, con su peculiar estilo, basado en una proyección visual de papeles pegados en la pared, pequeños trozos fragmentados que componen distintos motivos, además de figuras geométricas de gran volúmen que componen fantásticas esculturas abstractas, toda una demostración de puro arte contemporáneo como hace tiemnpo no contemplaba en otras exposiciones visitadas en los últimos tiempos.

Tengo sobre la mesa el folleto de la exposición, pero, ay.., está en inglés, el ejemplar que he cogido en castellano en la recepción, que no me cabía en el bolsillo, lo he  perdido durante la visita y el que he traído a casa, que estaba en el interior de la sala, pues eso, que se titula Vanishing Point, pero, aparte de eso, como todo lo demás está en inglés, y no tengo ni puta idea de ese idioma, ni siquiera de algún insulto para dirigirlo en su lengua al estulto señor Trump, pues no puedo añadir nada sobre la literalidad de esta magna obra, según el comisariado que la ha preparado.

Hemos dedicado más de una hora a visitar la obra de Fuencisla, aunque, un par de veces, he interrumpido la visita para salir al claustro del Carmen, un antiguo convento, y fumar de tapadillo un par de cigarrillos, contraviniendo la norma que prohibe fumar en el museo, aunque, por suerte, no he sido descubierto por los numerosos ujieres que pululan por sus instalaciones, elegantemente vestidos de azul y amarillo.

Terminada la visita, nos hemos dirigido, bajo la lluvia no tan blanda, protegidos por nuestros paraguas, hasta la parada del bus 6 y, una vez en casa, mientras la fabada de bote se calentaba en un puchero, hemos tomado un aperitivo de queso curado de oveja, jamón serrano de Castilla la Mancha y cerveza sin alcohol que nos ha sabido a Gloria, ja, ja, el nombre de la borrasca que azota nuestras costas.

Pido disculpas a los usuarios por no ofrecerles,por mi torpeza, el texto original en castellano del folleto de la exposición, para dar una visión más profesional del arte de Fuencisla. Les recomiendo que vayan a verlo, para cubrir esta laguna, esta falta de información."

Un saludo cibernauta.

En fin. Fuencisla.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 19 01 20.

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