domingo, 21 de marzo de 2021

LA PRIMA VERA

"Hoy quiero recordar la primera vez que vinieron mis dos primos nacidos en México. Ella, a quien llamaré la prima Vera, su hermano, cuyo nombre no recuerdo, ambos, hijos de Helenio, hermano de Sigfrido. Sigfrido tras la derrota en la guerra civil se quedó en España y siguió peleando, de incógnito, por la instauración de la demo-acracia, un sueño nunca cumplido.

Helenio, tras la derrota, embarcó con su esposa, que fué la secretaria del último alcalde democrático en el Ayuntamiento de Valencia, con destino a México, donde, con el tiempo, nacieron sus dos hijos quienes, ya adultos, regresaron a España.

Todavía recuerdo a la prima Vera cuando nos visitó por primera vez, el baño que nos dimos en el Mediterráneo, las cosas que contaba de sus padres, de sus veraneos en Veracruz, esas cosas, y el mensaje que recibimos, años más tarde, cuando se despidió de nosotros al conocer un diagnóstico médico que le anunciaba su próxima muerte.

De su hermano, recuerdo que vino a España, por vez primera, con una cesta punta en su equipaje, que, listo como era, se buscó una compañera influyente que lo enchufó de funcionario público por aquí, su afición a los deportes y sus dolencias cardíacas que nos lo arrebataron hace años.

Pero lo que hoy quiero resaltar es que la prima Vera vuelve, hoy, a visitarnos, en esta mañana soleada, ya en modo primavera, sin nubes, lluvia, nieve, ni todos esos fenómenos meteorológicos presentes en nuestra realidad, aunque por aquí, solo un par de días.

Vuelve el buen tiempo y solo estoy aquí, escribiendo chorradas, para pasar el rato hasta que Encarna, la mujer de mi vida, me avise para salir a la calle después de dos días demasiado caseros, aunque, ayer, sábado tarde, vino nuestra hija Mónica, con sus dos hijos, Raimon y Joan, porque Joan cumplió doce años y trajeron una docena de buñuelos que tomamos con unas tazas de chocolate, de modo que la tarde casera no estuvo tan mal....

Lo dejo, suena el teléfono fijo que está aquí, en el cuarto del ordenador, lo coge Encarna y, por lo que oigo, al parecer es Angelines, madrileña, que nos llama desde Granada, donde reside ahora..ella proviene de otra rama familiar, aquella cuyo uno de sus componentes, acojonado cuando un guardia civil le dió una bofetada, denunció a Sigfrido, quien, como consecuencia de aquella cobardía ajena tuvo que permanecer quince años en prisión, por defender el sueño de la demo-acracia.."

Un saludo cordial a los internautas que aún se acercan por aquí, hoy más de setenta, sean demo-ácratas, simples demócratas, apolíticos, rojos, verdes, morados, o de cualquier color...

Chao, pibes.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 21 03 2021


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios