"Después de haber dedicado tres páginas del Blog al Agua, el Aire y el Fuego, renuncio, a pesar de haberlo sugerido en una de ellas, a dedicar otra a la Tierra. No soy Geólogo, solo puedo citar las morrenas, estratos de rocas estalladas que conocí cerca de Bronchales, he oído hablar de las dolinas, huecos bajo el subsuelo de los que los profesionales advirtieron con ocasión de un proyecto de trazado ferroviario en Aragón, y hoy, la 39 de 'Levante' publica
una foto en la que una tormenta de arena engulle una ciudad iraní, pero no soy geólogo, nada sé de placas tectónicas,
actividad volcánica ni aludes de tierra.
En realidad, tampoco en esas páginas dedicadas a los elementos básicos de la vida había una intención descriptiva de la naturaleza de esos elementos, sino, más bien, de las contradicciones humanas, en general, y en particular, de las relativas al poder judicial, que nació con afán de independencia de sus poderes y en los últimos años, en España, se está excediendo en sus doctrinas, en favor de determinadas opciones políticas, aunque no siempre.
Por consiguiente, (como diría González), para no reiterarme en lo ya dicho, renuncio a publicar nada sobre Tierra, el cuarto elemento de los que me han ocupado estos días.
Sucede, además, que hemos ido al mercado, a comprar un montón de cosas, una raya, una docena de boquerones, una pierna de cordero picada, para las hamburguesas, además de otro poco de ternera y magro, costillas de cerdo para el arroz del sábado, huesos para caldo, loganizas de Millares y otras que no lo son, morcillas de cebolla, total 40 euros y, por el camino de vuelta, se me ha evaporado la inspiración para escribir algo sobre Tierra, el suelo del lugar donde habitamos
desde tiempo inmemorial.
Si acaso, evocar aquel tiempo, cuando aún no habíamos habitado la Sabana, y vivíamos de la caza y la recolección, cuando
el nomadismo, no el sedentarismo, era la forma de vida más extendida.
No sé porqué, sedentario como soy, siento una rara nostalgia por un nomadismo que nunca practiqué. Sospecho que todas las contradicciones que nos habitan en este tiempo nuestro, son consecuencia del sedentarismo, de una presencia simultánea en el mismo medio de seres con intereses y realidades tan distintas, que esa coincidencia hace que quienes comparten ideología, intereses, destinos, terminen poniendo por delante de otras tribus sus intereses cómplices.
Algo que en el nomadismo, por definición, no estaba presente."
No sabría decir porque esta página, pensada en principio para hablar de Tierra, ha tomado este rumbo. No tengo ni idea,
la verdad.
En fin. Tierra.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 19 04 18.
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