LA ERA DIGITAL

"¿Se imaginan lo que sucedería si, de un día para otro, desaparecieran de la faz de la tierra todos los ordenadores y demás dispositivos digitales?. Tendemos a interpretar la expresión 'la era digital', como algo lejano y desconocido, por la influencia de los viejos relatos que la anunciaban cuando aún no había llegado, pero lo cierto es que si tal cosa sucediera, la interrupción súbita de la tecnología digital, los aviones comerciales se estrellarían, los puertos y aeropuertos se colapsarían, la vida, pública y privada, cambiaria para siempre, porque lo digital hace tiempo que dejó de ser una entelequia, para convertirse en un hito en la actividad industrial y de servicios, como lo fué en su tiempo la máquina de vapor, que terminó con la tracción animal, en medio de los temores de quienes apreciaban que viajar en ferrocarril era jugarse la vida.

Yo mismo pensaba que la era digital estaba sobre todo orientada a la comunicación por Internet, hasta que uno de mis hijos, cuyo 42 cumpleaños vamos a celebrar hoy, se juntó con un empresario argentino y desde entonces su vida laboral transcurre por España y China, en un enclave de tecnología digital y de láser.

Es decir, que así como la robótica se expande en las fábricas de automóviles, nuestros polígonos industriales están llenos de emprendedores que viven, ya, en la era digital.

Sin embargo, yo, antiguo como soy, de la quinta del cuarenta y tres, escribo en el blog con la misma sensación que cuando lo hice en la máquina de escribir, y solo tengo conciencia de estar en la era digital cuando, en contra de mi voluntad, pierdo el texto en su integridad y velvo a escribirlo, aunque nunca es igual, maldiciendo a la madre que parió a la tecnología digital.

Quienes deben estar muy satisfechos con la tecnología digital, deben ser los muchos escuchadores, no solo de las organizaciones de espionaje al servicio de los Estados, también los de las muchas páginas Webs que buscan adictos para sus productos y servicios, o los simples curiosos que, vacíos de intereses propios, buscan el interés en las vidas ajenas.

Nada podemos hacer para escapar de la influencia de la era digital en nuestras vidas, del mismo modo que nadie quedó al margen de la invención de la máquina de vapor por James Watt, pero hay algo que todavía está en nuestro albedrio en la era digital.

Identificar a los políticos más estúpidos que demandan nuestra adhesión, y negarles nuestro voto. Hasta aquí no llega, de momento, la influencia de la era digital."

Un saludo cibernauta.

En fin. La Era Digital.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 6 04 19.