martes, 26 de abril de 2016

EL EJEMPLO

He bajado a La Fuente, después de visitar La Caixa, para ingresar la cuota de la comunidad. He tomado un cortado y he sacado de la máquina un paquete de West, antes he pasado po el quiosco y he comprado Levante, que he ojeado mientras tomaba café.

En las páginas de opinión he encontrado una columna de Alejandro Mañes,'El tiempo de los acuerdos'que, como la de Villacañas, 'Ex Universitate Salus',me ha parecido entender que trata de filosofía, de ética, y de la conducta pública de los políticos, en general.

Me ha interesado una cita de Mañes, 'Too many laws, too few examples', 'demasiadas leyes, demasiados pocos ejemplos' que, según Mañes, se puede leer en la pared de una de las calles, Davis, de Londres.

Una sentencia que parece aludir a la ausencia de ética aplicada, en algunos políticos en particular. En alguna página anterior del blog aludí a que los filósofos piensan, y los políticos actuan, aunque no veía yo la incompatibilidad en que los políticos, además de actuar, pensaran, es decir que una sana combinación de ética y pragmatismo sería deseable en la acción política.

Al parecer los londinenses que han pintado esa sentencia, demasiadas leyes, pocos ejemplos, reclaman también una mayor presencia de la ética en la política.

En la primera, el titular gordo se refiere a que 'La agricultura valenciana se juega 400 millones en exportaciones si el Reino Unido abandona la UE'. Cameron, un tipo que no se caracteriza por su ética, después de haber aparecido en los papeles de Panamá, no quiere dimitir, se refugia en su caracter de defensor de la permanencia de su país en la UE, amenazando a los partidarios de la separación con la inestabilidad económica, lo mismo que hace aquí Rajoy con la economía a quienes buscan el cambio.

El conflicto entre ética y pragmatismo aparece aquí muy claro, desde el punto de vista de nuestra agricultura, conviene que Cameron siga, desde el punto de vista de la ética, estaría mejor que se marchara.

Y que pasa con nuestros agricultores. No lo sé. No los conozco. Aunque hace años, con ocasión de una visita al casino de Monte Picayo, acompañado de un ejecutivo vasco, ademáas de jugar unas pelas al Black Jack --ganamos-- pude observar una mesa de Bacarrá, ocupada por agricultores de aquí, que jugaban con fichas de 500.000 pelas, por lo que jugarse ahora 400 millones, no me parece tan dramático, acostumbrados como están a los juegos de azar.

El equilibrio entre ética y pragmatissmo, anda desde hace unos años mas desequilibrado que nunca, no lo digo yo, lo dice la pintada de Londres, demasiadas leyes, pocos ejemplos. El ejemplo fue un concepto de la educación tradicional, basado en una conducta ética que reclamaba ser imitada para obtener un equilibrio en la conducta social, para impedir que se inclinara únicamente hacia el pragmatismo, pero, claro, no podemos pretender que la sociedad se base, sobre todo, en la innovación tecnológica, y que los valores continuen como en la escuela tradicional en la que no había ordenadores.

Este es un dilema moral, claro, y a ver quien es el guapo que pone una solución en la mesa. El relativismo moral, tiene raices confesionales, con la famosa sentencia, `quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra'.

En los últimos años, unos por otros, no la ha tirado nadie, y así estamos, como reconoce la pintada de Londres, con pocos ejemplos.

En fin. El Ejemplo.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 26 04 16.

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