EMISIONES

El día ha salido ligeramente lluvioso, así que, al salir del Maravillas no tenía claro si acudir al Aula de Comunicación o quedarme en casa. Mi mujer me ha aconsejado ir, --así pasas la mañana distraído, y estoy contento de haberle hecho caso porque, después de la exposición y debate que hemos tenido sobre los llamados 'productos de proximidad' aquellos que se producen en lugares cercanos a los núcleos de consumo, ahora tengo un argumento para ocuparme hasta la hora de comer.

La profesora ha destacado que aquellos productos del sector alimentario con origen en lugares lejanos, digamos 6.000 kilómetros, generan, por el transporte,  una gran cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero, que contribuyen a degradar el medio ambiente.

Ha dado varios ejemplos, el 80% de los garbanzos que se consumen aquí proceden de México. Vale. ¿Debemos concluir de ese argumento que solo debemos comprar productos próximos y prescindir de los muy lejanos? Aquí, no parece que sirvan un sí o un no absolutos, probaré con un sí, pero.

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Es decir, si te gusta el café. y aquí no se produce, no tienes mas remedio que comprar ese brebaje, producido en tierras lejanas. O sea, que existen determinados productos, que tienen un carácter complementario, y en ausencia de transacciones internacionales, no podrías acceder a su consumo. 

Por eso, entre otras cosas, se abandonó el proteccionismoa y la autarquía y estamos metidos de lleno en un mundo donde las transacciones internacionales permiten que ciertos productos, producidos a gran distancia, lleguen a centros de consumo muy lejanos. 

Ahora bien, ¿tiene sentido que los garbanzos, un producto típicamente castellano, se reciba ahora de México?, yo, la verdad, no lo sé, pero sospecho que se trata de un exceso del libre comercio y que las emisiones generadas por su transporte, serían evitables. 

Si existiera una especialización de los cultivos, en la que determinados países produjeran lo que no producen otros, hay que reconocer que el argumento en favor de los productos de proximidad, tendría una debilidad, se centra en el consumo, no en la producción, cuya organización a nivel global, con criterios complementarios, evitaría la generación de emisiones por el transporte de productos que serían producidos en los lugares de consumo, sin por ello caer en un proteccionismo que hubo que abandonar hace siglos. 

Otro aspecto de los productos de proximidad es que se les atribuye mayor salud alimentaria, pues en teoría, requieren menos productos para su conservación, pero, curiosamente, un colega del Aula, ha intervenido para asegurar que el compra productos agrícolas en El Puig, y en Ayora, y que habla con los vendedores para conocer que productos químicos les han puesto y cuanto tiempo estimado duran sus efectos, luego, salvo si se trata de cultivos ecológicos, los productos de proximidad, en general, no parecen estar libres de productos químicos. 

A ver, uno está a favor de los productos de proximidad, y no está en contra de que se importen café, mangos y cosas así, es decir que el mix de productos que encontramos en los mercados sea una mezcla lógica de producciones especializadas, pero no soy muy partidario de tener ahora uva de Chile en los mercados, de comer garbanzos mexicanos, aunque solo sea porque habrá muchos vecinos de México a quienes les convenga mas ese producto.

Lo que no comparto es el discurso que se nos ha presentado para favorecer el consumo de los productos de proximidad, porque se parece demasiado a los proteccionismos y autarquías de tiempos pasados, no se si me explico. 

En fin. Emisiones.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGTRIN) 15 04 15.