LE MONDE DIPLOMATIQUE (2)

Llevo unos días envuelto en un ambiente pre navideño. Primero acompañé a mis nietos a Nuevo Centro, porque sus padres los habían traído a casa por sus compromisos laborales y no era cosa de dejarlos que se aburrieran. Me sorprendió el alarde de luces, atracciones y símbolos navideños, incluidos un Belén espectacular, una pista de hielo para patinar y un sin fín de estímulos mas, dispuestos para que el público que iba a consumir no se aburriera. No me parece mal, ya que vivimos en una sociedad de consumo, ahora de subconsumo, tan denostada a veces, por lo menos que no sea aburrida.

Después asistí a una comida con mis compañeros del Aula de Medios, a la que no asisto desde que la profesora causó baja temporal. Por azar, María de la Soledad, una compañera con la que me encontré en la calle, me avisó de que la profesora se ha incorporado de nuevo, las clases se han reanudado y me dijo lo de la comida. Estuvo bien, el día ocho seguirán las clases. Asistiré.

Ayer tarde se celebró un acto lúdico en al Aula de Teatro, una merienda amenizada con toda clase de músicas, en la que me reencontré con antiguas compañeras que ahora tienen otro horario. Gracias Luísa, por dejarte ver otra vez. A ver si consigo que me cambien al horario de las cinco, aunque, a estas alturas, no sé. El acto resultó ser un guateque como los de los primeros sesenta y me lo pasé en grande. No faltó ni el regalo absurdo al profesor. Una figura de madera que sostiene una vela en la mano. Absolutamente surrealista, si.

Andaba yo esta mañana, cuando iba al mercado a por una sepia y media docena de bacaladitos, reflexionando sobre lo raro que es esto del espíritu navideño cuando, mientras tomaba un café en Valiente, he abierto Le Monde Diplomatique por la página 3, y he encontrado una entrevista a Teresa Forcades, promotora de Procés Constituent de Catalunya, Doctora en medicina, monja y teóloga, supongo que por ese orden, que me ha liado todavía mas este raro asunto de lo que es la Navidad.
(...)
Forcades no habla para nada de lo que es la Navidad, pero si se refiere a los evangelios, a la falta de ética del capitalismo y hasta, si no lo he entendido mal, a la revolución permanente, de Trotski.

Forcades, a una pregunta sobre su experiencia religiosa, responde,...Intento situarme en un plano que sea válido para todo el mundo .En cambio lo que llamamos vocación religiosa no es para todo el mundo, surge de una experiencia, y por eso la comparación mas cercana sería la del enamoramiento que no se puede programar ni elegir.. 

Entra en materia Forcadas sobre la falta de ética del capitalismo, con esta argumentación tan clara...'Es obvio que a un Estado, a un poder político democrático que representa a la mayoría social...le interesa recaudar de todo el mundo para poder dar servicios, pero evidentemente de quien mas tiene le interesa recaudar más. Si no lo hace.. es porque el poder económico tiene control sobre el poder político. Esta es la falsedad del capitalismo, que pretende presentarse a si mismo como la independencia del poder político respecto del económico.

En otro momento de la entrevista, Forcades cita a Simone Weil, 'La revolución se puede convertir en el opio del pueblo', luego se explica.. 'yo considero que la única manera de avanzar hacia eso que llamamos revolución es que en la dinámica misma del proceso, en este caso, del Procés Constituent, ya se pongan en práctica relaciones que no sean de abuso de poder; que no sean de que unos piensan y otros trabajan; que no sean de que unas están en casa cocinando y los otros están de reunión..' ¿Trotski, no?. Mejorado, claro. 

Después de leer la entrevista completa, me han venido dos o tres ideas. Que el guisado catalán no lo está cocinando solo Mas, sino que hay otras fuerzas sociales, además de las que vemos por la tele, inmersas en la faena. 

Que la idea que uno tenía de lo religioso, seres piadosos montando belenes y organizando conciertos de Villancicos, es decir, la imágen popular de la Navidad religiosa, compitiendo, con desventaja, con la consumista, es una visión excluyente pues, leyendo la entrevista a Forcades, se ve que la Teología de la Liberación está de plena vigencia, que los discursos de Weil o Trotski aún son objeto de consulta y que la falta de ética del capitalismo es una evidencia universal, a la que nadie se puede sustraer en tanto se hace preguntas sobre como es el mundo actual. 

Si quieren leer la entrevista completa, ya saben, Le Monde Diplomatique está en los quioscos, a 4 pavos. Edición mensual, claro. 

En fin. Le Monde Diplomatique.

 LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 18-12-13.