HÁGASE LA LUZ...

"....Y la luz se hizo. El doctor me quitó el apósito que cubría mi ojo derecho, la enfermera depositó en el una gota de colirio,a continuación me acomodó frente al visor que exploraba mi ojo y el facultativo me dedicó una frase convencional. --Todo ha salido bien.

Y aquí me tienen, reinaugurando el blog después de unos días de relativa obscuridad, en los que no he leído los periódicos, no he visto la tele, me he desconectado un tanto de las noticias sobre la realidad, no confundir con la realidad misma, Urdangarín y todo eso, aunque la entrada de hoy va a ser corta, ya que la lente intraocular que me han instalado todavía no funciona a pleno rendimiento.

Sobre Urdangarín solo diré que el otro día un columnista de 'Levante', antes de mi operación de cataratas, decía que aunque la etimología de ese apellido no había sido del todo estudiada, es un hecho que Urdano, del euskera, significa cerdo, puerco, cochino, y la portada del Jueves, que he visto por Internet en un teléfono, cuando solo disponía del ojo izquierdo, lleva un obsceno dibujo de Urdangarín 'atacando' a su mujer por detrás, que parece inspirado en la genealogía de su apellido.

Después de la revolución habida entre los fiscales españoles, con declaraciones de haber sido presionados, obligados a cambiar sus peticiones, el reo Urdangarín ha quedado suelto y sin condiciones. Todo lo que cuentan que ha sucedido estos días en los tribunales españoles parece indicar, sin margen para la duda, que la justicia no es igual para todos, algo que sospechábamos, pero ahora consideramos su certeza.

No quiero extenderme demasiado, es el primer día que vuelvo a ver la luz y no quiero forzar mis capacidades visuales. Termino con una breve crónica de mi estancia en el hospital.

Al llegar, la sala de espera estaba abarrotada de personas. Luego resultó que eran acompañantes de los pacientes, que eran muchos menos que los allí presentes. No obstante, permanecí allí, en la sala de espera, una hora sin que ninguna enfermera o facultativo apareciera por allí. Me pregunto porqué me citaron una hora antes, si no pensaban aparecer por allí hasta las tres.

Cuando la enfermera comenzó a nombrar a los operables, entre ellos a mí, tuve la esperanza de que la cosa iba a ser corta. Me llevaron a un vestidor, dejé allí mi ropa, me puse una bata, un gorro en la cabeza y una funda en los zapatos salí al pasillo y esperé un rato.

Luego, la enfermerá me acomodó en una camilla y me abandonó en un pasillo, durante media hora. Empecé a sentir frío, me incorporé, dije en voz alta, --Creo que me voy a ir a mi casa, ya me operaré otro día, me habéis dejado aquí tirado y creo que voy a pillar una neumonía..

 La enfermera me ofreció una segunda sábana para cubrirme y al poco, me condujo hasta el quirófano. Cuando la enfermera se disponía a aplicarme un gotero con la anestesia, dije, --No hace falta que me pongas nada...ya estoy dormido de aburrimiento por la espera...luego lo pensé mejor..--Bueno, ponme lo que tengas que ponerme..es que tengo un mal día, sabes..

Me cubrieron por completo en la mesa de operaciones, solo dejaron un hueco, justo, el que se correspondía con mi ojo derecho, y luego solo recuerdo unas luces muy intensas aplicadas sobre mi ojo --me están aplicando láser, pensé-- hasta que escuché, --hay que aplicar adrenalina intraocular, y noté una vibración, como de un taladro médico, no sé.

Al despedirme, dije al personal médico, gracias por todo, habéis sido muy amables, pero no pienso volver por aquí en mi puta vida. --De momento, tendrá que volver mañana, para que verifiquemos el resultado de la intervención."

 Y eso fué todo. Le llaman, creo, una intervención sin ingreso. O sea. Tenemos una magnífica sanidad pública, mis quejas obedecen a que hoy tengo un día puñetero, solo eso.

En fin. Hágase la luz.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 23 02 17.