viernes, 5 de agosto de 2011

LA IDEOLOGÍA DEL PODER

Al escribir en la entrada de ayer la expresión, 'la ideología del poder', me di cuenta enseguida de que esas cuatro palabras me iban a exigir un esfuerzo adicional, porque su sola enunciación me pareció de un potencial enorme, que seguramente excede mi pobre capacidad de razonar y la menguada aportación de mi vieja enciclopedia Espasa, de origen pre democrático, no parece que pueda ser de mucha ayuda.

Para empezar, la página 512 del tomo 7, que tengo abierta delante de mi, define la ideología como el 'conjunto de ideas fundamentales que caracterizan el pensamiento de una persona, colectividad, época, movimiento cultural, religioso o político'. Que al citar ideologías concretas se limite a tres, tomista, tridentina, liberal, es una clara demostración de que esta edición no es solo pre democrática, sino antediluviana, pues citar a Tomás de Aquino y Trento, junto a los liberales, y desconocer los grandes movimientos ideológicos que sacudieron el siglo XX, es una clara expresión del pánico de las dictaduras
a un pueblo pensante.

(...)
Un tanto descorazonado por el miedo de los editores del Espasa de entonces a la expresión ideología, me adentro con cautela en la página 202 del tomo 10 y, al primer vistazo, obtengo la primera conclusión en mi búsqueda, pues el hecho de que se dediquen dos columnas a explicar lo que es el poder, desde el punto de vista filológico, frente a unas pocas lineas a la expresión ideología, junto con el dato de la fecha de edición del texto consultado, indica claramente que el poder se percibía en las dictaduras como algo mas importante que la ideología.

Entre las muchas acepciones que contienen esas dos columnas, elijo las que me parecen mas adecuadas al poder político. Dominio, imperio, facultad y jurisdicción que uno tiene para mandar o ejecutar una cosa. Gobierno de un Estado...Grupo de lideres económicos,sociales y políticos, que forman la clase dirigente de un país. ..Ejecutivo, judicial, legislativo.

Creo que ya vale con esto, para profundizar un poco mas en 'La ideología del poder' y aplicar este concepto a nuestras realidades sociales y políticas actuales, que es, en el fondo, de lo que se trata.

Comencemos por la diferencia fundamental entre gobierno y Estado. En los sistemas democráticos, esa diferencia es temporal. Mientras el Estado es una institución permanente, los gobiernos solo ostentan de modo temporal el dominio? del Estado.

Porqué pongo al final de dominio una interrogación?. Pues porque, aunque en teoría, el poder democrático, el de los gobiernos, tiene el dominio temporal del Estado, ese supuesto dominio está sometido a una serie de tensiones y fuerzas que determinan que la relación entre gobierno y Estado se pueda reconocer mas como una interacción, que como una relación de dominio.

Para empezar, el Estado, como una institución permanente que es, ofrece resistencias a la voluntad política reformadora de los gobiernos temporales, por lo que las acciones de gobierno terminan siendo el resultado de transacciones entre las fuerzas permanentes con resistencias al cambio de los Estados y los representantes elegidos.

Hasta ahora estamos hablando de poderes políticos, Estados, gobiernos, legisladores, jueces, pero si introducimos la definición de poder político, que incluye lideres económicos,financieros,además de los políticos, la cosa se complica.

Enseguida se ve que el poder político, elegido, es un poder compartido, condicionado, sujeto a una serie de fuerzas y tensiones que limitan enormemente su dominio, no solo sobre el aparato del Estado, sino sobre la naturaleza de las políticas que aplican, o que no consiguen aplicar.

Definido así el poder, como un fenómeno compartido y sujeto a tensiones, parece evidente que la expresión 'ideología del poder' no tiene aplicación al conjunto de los sujetos políticos y económicos que configuran ese conglomerado sujeto a fuerzas y tensiones.

En tanto los sujetos con poder que están fuera del aparato político, dirigentes económicos y financieros, suelen permanecer en la escena del poder de manera muy permanente, a veces a través de sagas, pues no tienen tantas limitaciones como los políticos, sujetos a nombramientos temporales,el carácter de ese poder, en lo temporal, tiene semejanzas con el poder del Estado.

Es concebible una alianza entre los poderes del Estado y los líderes permanentes de la
sociedad económica y financiera, que incluiría acuerdos de largo alcance blindados contra los cambios de gobierno, una muestra de esta alianza es, por ejemplo, el trato a las eléctricas, las nucleares y otras empresas energéticas.

En un contexto como este, ya se ve que el poder político elegido está muy condicionado por la presencia permanente de otros influyentes poderes. Si se puede aplicar, o no, la noción de ideología del poder a ese conglomerado dominante, es algo que no me queda claro, dada la complejidad de las relaciones de poder.

Asumo que mi modo de razonar viene casi del mundo antiguo, sin que ningún trabajo de campo, investigación, recogida de evidencias, encuestas, cuestionarios y otras herramientas
profesionales me haya permitido acercarme, ni de lejos, a la complejidad del concepto enunciado.

Lo que si tengo claro es que toda esa complejidad se iría a la mierda, con perdón, si cada uno de nosotros tomamos conciencia de que somos el pueblo, de que la soberanía del pueblo está por encima de intereses, fuerzas, tensiones y alianzas de poder.De que nuestra libertad personal nos permite, llegado el caso, dejar de trabajar, dejar de pagar impuestos, negarnos a ir a la guerra, ocupar las plazas, y poner en su sitio, de una vez, a quienes no ejercen su poder, sea político, social, económico o financiero, con el mínimo sentido de la responsabilidad social, que es la única condición que lo justifica.

En fin. La Ideología del Poder. (Tal vez debería haberse titulado, los límites de la democracia).

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM)5-08-11.

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