NO ESCARMENTAMOS

Hoy he asistido a la tertulia de los viernes, muy concurrida. He preguntado a Ricardo, que fue cirujano jefe de La Fé durante mas de diez años, por las máculas en el rostro de Rouco Varela.Me ha contestado que a el siempre le ha parecido ese rostro muy tenebroso, pero sin dar ninguna explicación clínica.

José María, ex comandante de Iberia, que prepara una ascensión en globo desde Fontanares para noviembre, se ha entretenido llamando a un amigo bodeguero y pasando al teléfono a los presentes para que hicieran sus pedidos. Cuatro cajas de crianza.

Tambien estaba Miguel, ex directivo de Canal 9, en situación de pre jubilación. Al parecer lo han llamado de la tele, porque dicen que debe horas, para que trabaje durante un mes para devolverlas. No será raro que Rajoy aparezca en televisión el mes que viene para comunicar, triunfante, que tenemos un parado menos.

Carlos, que ha terminado su último libro, hablaba de las dificultades de comercializarlo, no siendo el un escritor muy mediático. Al mismo tiempo reconocía que su mayor satisfacción es escribir el libro, lo de venderlo le resulta, mas bien, indiferente. Por cierto, Miguel presentará el mes que viene, en El Corte Inglés de la Av. de Francia, la última edición de su Historia de las salas de cine en Heliópolis.

Con Pedro, el periodista gastronómico, he compartido algunas experiencias sobre la cocina griega, mientras Fernando, el ex alcalde permanecía algo taciturno y Rafael, el periodista y erudito cuyos artículos aparecen en 'Levante', contaba la experiencia de su presencia entre miembros de la Real Maestranza, que para serlo deben tener cuatro antecesores directos no se si entre la aristocracia, o la grandeza de España. Rafael, siempre nos sorprende.

Se me olvidaba el último tertuliano, Enrique, profesor jubilado del CEU San Pablo, especialista en cine, con quien he compartido parte del camino de regreso a casa. Ya en casa, ha dado un vistazo al periódico, que lo animado de la tertulia no me ha permitido ojear, y he encontrado en el titular gordo de la primera el tema de la entrada de hoy.

(...)
'La Marina Real proyecta edificar un hotel de treinta alturas junto a la torre del reloj del puerto'. La letra pequeña precisa que el plan prevé islas flotantes para restaurantes...', como en Dubai, ¿no?. 

Vamos a ver, no escarmentamos, aún no hemos salido del fiasco del ladrillo en esta ciudad de cuento de hadas, el PAI de Cuatre Carreres parece un cementerio urbano, sin acabar, como el barrio casi íntegro de Nou Campanar, lleno de torres deshabitadas, por no hablar de kilómetros enteros de costa, la costa norte,  Almenara y por ahí, lugares fantasmagóricos llenos de apartamentos vacíos, y otra vez nos dejamos seducir por el complejo de Manhattan. 

Como si el Manhattan de Benidorm no hubiera satisfecho nuestras ansias de imitación, ahora imitamos a Dubai, con el plan de islas flotantes (todas las islas flotan ,¿no?, porqué las llaman así, mas bien deberían llamarlas artificiales). Bueno. 

El caso es que debajo del titular aparece una foto con los tipos del PP, empresarios, artistas y deportistas, dando fe de que las fuerzas vivas, ahora llamadas sociedad civil, son una piña alrededor de los políticos que gobiernan aquí. 

En particular, los empresarios de la foto harían bien en rechazar su papel de figurantes, de extras sin frase, en ese falso evento dedicado a la galería, renunciar al apoyo del Consell, que por cierto no tiene dinero para materializarlo y ponerse a buscar dinero en otras partes.

Según Botín, el dinero fluye ahora de todas partes (menos del Consell, claro). Una vez conseguida esa financiación, deberían orientar sus proyectos a cualquier cosa menos el ladrillo, después de la experiencia habida, y reconstruir el entramado comercial, industrial y agrario, restaurar el conocimiento científico aplicado, es decir traer de vuelta a nuestros investigadores, para conseguir ese equilibrio entre ciencia y negocios cuya combinación podría ser un seguro contra la excesiva duración de las crisis. 

El Proyecto de Marina Real no es mas que una vuelta hacia los errores del pasado. No digo yo que no se construya un hotel, pero debería respetar su entorno arquitectónico, y de las islas artificiales, que se lo piensen. 

Ya tenemos Tabarca, Columbretes, Baleares y Canarias. Para que mas?.¿Para que tomen un Daikiry unos cuantos pijos?. Yo, si no me demuestran con un proyecto sensato la rentabilidad de la inversión, no sé... 

En fin. No escarmentamos.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 18-10-13.