CORREOS, ESPAÑOLES

En tiempos del fraguismo, de Fraga, que coincidió ampliamente con el  franquismo de Franco, un sistema político que se llamó 'el régimen' porque todos los españolitos de entonces vivíamos en un régimen cuartelario, uno de cuyos rasgos distintivos fue fusilar disidentes y volar algún periódico, cuando su editorial no gustaba a los señores del régimen, hubo una revista satírica, La Codorniz, dirigida por Alvaro de la Iglesia, quien de vez en cuando se concedía la licencia de burlarse en sus portadas del sistema dominante en aquel momento.

Hoy solo se pueden encontrar esas portadas en exposiciones de material ilustrado de la época o en algún rastro o mercadillo, pero hay una, en particular, que conservo en la memoria, cuyo lema decía así, 'Correos, Españoles'.
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Con una simple coma, de la Iglesia, que se debió sentir mas seguro que otros de su ramo por sus vínculos parentales directos con los amos del sistema financiero de entonces, convirtió lo que era el nombre de una institución pública, la primera en el sector de la comunicación, en una incitación encubierta a la orgía y el desenfreno de una población amargada por todo tipo de represiones. Una simple coma, si. 

Actualmente, casi nadie escribe cartas y si vas a una antigua oficina de correos a recoger un paquete, lo que encuentras es una sucursal del Deutsche Bank que, marginalmente, se dedica a lo que antiguamente fue el servicio de correos.

Por eso, causa mucha risa, como la vieja página de La Codorniz, que los sucesores de aquel régimen, entre ellos Gallardón, que quiere administrar ahora los úteros de las mujeres, o el nuevo Fraga que quiere hacer la calle suya, y los payasos del circo económico, aconsejados por sus expertos en comunicación, nos muestren en la tele un panel con la evolución de los precios, varias cosas que han subido de precio, junto a los sellos de correos ¡que no han subido!. 

Hay que tener la cara dura para poner como elemento de comparación con otras cosas que han subido, los sellos de correos, que no solo no han subido, sino que representan el 0,00000... del Producto Nacional Bruto.

Como chiste, está al nivel de 'Correos, Españoles'; como información económica, es la mayor tomadura de pelo a la ciudadanía, después de la amnistía fiscal de Montoro.

Con ese mensaje, los responsables de comunicación del Partido Popular demuestran que están a la altura de la mejor revista satírica del franquismo. 

Lástima que nadie pueda editarla ya. Para qué, estando el Boletín Oficial del Estado, ahora digitalizado,  y la propaganda gubernamental, es imposible competir con ellos en golpes de humor, sea político, o negro. 

En fin. Correos, Españoles.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 4-01-14.