"En 2.025, la tecnología de aviones no tripulados con fines militares o civiles ha progresado de modo considerable. A los viejos ingenios conocidos como Drones, Pioneer, Alo, Alba, Diana o Milano, que incluían aparatos conducidos por control remoto, guiados por satélite desde una estación en tierra, dedicados a misiones variadas en el campo civil o militar, blancos aéreos tele dirigidos para entrenamiento con ingenios anti aéreos, misiones forestales o medio ambientales, vigilancia aeroportuaria, crímenes de Estado, entre otras aplicaciones, les ha sucedido una nueva generación de aparatos con total autonomía y órdenes de no retorno, de modo que una vez programados pueden captar las señales emitidas por un dispositivo electrónico alojado en un cuerpo humano y hacer estallar su carga explosiva en la cerviz del blanco, sin apenas margen de error.
(...)
La tecnología, como se sabe, es neutra en cuanto a su desarrollo, sus efectos dependen del uso que los humanos hacen de ella, de tal modo que puede resultar un progreso social, o una auténtica barbaridad. Leo en el periódico mural del centro de acogida donde entretengo mis días, que una docena de esos ingenios ha impactado en la última planta de las sedes de Goldman Sachs. Entre otras, se han visto afectadas, las oficinas de N.York, Los Angeles, Frankfurt, Zurich, París, San Francisco, Londres, Singapur y Tokio. Esa noticia llena hoy la pantalla de la prensa internacional, porque Goldman Sachs, que ya en 2012 controlaba una masa de dinero equivalente al PIB mundial, ahora cuadruplica esa cifra.
La Brigada Anti Jubilados Exaltados ha emitido un comunicado según el cual se sospecha que los autores materiales del ataque podrían ser miembros del grupo que se hace llamar 'Comando Kropotkin', un grupo de ancianos algo pirados, entre los que se encuentran ingenieros aeronáuticos, filósofos y arquitectos separados de sus empleos en el sector público en 2012, a causa de las medidas de recorte impuestas por el gobierno conservador de entonces, que llevan una doble vida. De día, son inocentes pensionistas que pasan las horas en las aulas de formación para mayores de la Universidad, de noche acuden a su centro de investigación instalado en un hangar del abandonado Aeropuerto de Castellón.
Aunque los ingenios no tripulados han dado en el blanco, es decir, justo en la nuca de los máximos ejecutivos de Goldman Sachs en cada una de sus sedes, corre el rumor de que los tales ejecutivos eran meros figurantes, que los auténticos están dispersos en grandes latifundios de latino América, acompañados de enormes rebaños de vacas en lugares inexpugnables e inaccesibles al público común, que quienes detentan el verdadero poder del mundo, lo ejercen desde allí por medio de la vídeo conferencia y los demás medios que la tecnología pone a su disposición, sin que sean vulnerables a ataque alguno, pues la localización de sus auténticas sedes es un secreto impenetrable.
La nota del N.York Times se extiende sobre el origen del grupo 'Comando Kropotkin'. Al parecer se constituyeron como grupo activo después de coincidir en los actos de la Huelga General de 2.012 contra el gobierno de Rajoy.
Ese gobierno, precisa el N.Y. Times, tuvo que abandonar en helicóptero la Moncloa, menos de un año después de aquella huelga, no tanto por su política económica, sino por su actitud antipática, filo fascista, prepotente con los débiles y rastrera con los fuertes, que hizo insoportable a la mayoría de la población su permanencia en el poder. Ahora, con la perspectiva de los trece años transcurridos, la noticia de hoy sobre Goldman Sachs confirma lo que muchos sospechábamos entonces, que las políticas económicas de la mayoría de los países estaban dictadas por ese centro de poder financiero. Es una paradoja que en aquella lejana huelga, los trabajadores no se concentraran en las sedes de Goldman Sachs, pero así es la cosa, incomprensible, si.
Una de las consecuencias de aquellas políticas de entonces es que cuatro millones de pensionistas malvivimos ahora en centros de acogida. Los verdaderos causantes de los retrocesos sociales en Europa no sabemos donde viven, pero si parece seguro que las víctimas del 'Comando Kropotkin' eran meros figurantes."
En fin. Ciencia Ficción.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 29-03-12.
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