CONFISCACIÓN

"Ayer nos fuimos de viaje, ja...ja..., tomamos el bus número 25 y, casi gratis, solo usando el bono de transporte, hicimos una visita panorámica a uno de los parques naturales de por aquí, más guays, llegamos hasta el Perelló, donde visitamos su puerto deportivo, su playa, y tomamos unas cervezas en Corner, cuya carta de tapas es tan buena que le dije al camarero, después de pedir una porción de tortilla, que figuraba en la carta, pero de la que no disponian, --me ha gustado tanto su carta de tapas que pienso volver por aquí, para probarlas.

El trayecto desde Heliópolis duró unos cuarenta/cuarenta y cinco minutos. Ya al atravesar el puente sobre el río nuevo, ahora habitado por el agua del mar, comenzamos a ver los campos inundados, un paisaje de aire lacustre que se prolongó hasta l'Albufera, y después, hasta el Perelló en dirección a Sueca.

A la izquierda, el bosque de la Devesa, con su abigarrada vida vegetal, ponía el contrapunto a las masas de agua que flanquean el camino. Poco antes de llegar al Perelló están los huertos de sus famoso tomates.

No se si ustedes saben que, esta temporada, los primeros tomates han sido subastados, como si fueran el Campanu, el primer salmón pescado en ríos asturianos, y un restaurados ha pagado 900 euros por los primeros quinientos kilos.

Paseando por el puerto, la carta del restaurante del Näutico me ha dado la pista de que tal vez han sido ellos los que concurrieron a la subasta. La tapa incluida en la carta, tomates del Perelló con ajitos y atún, así parece indicarlo.

Poco antes de tomar el autobús de vuelta, al atravesar un puente modernista sobre la Gola del Perelló, ese paisaje me recordó las rías gallegas, con sus embarcaciones detenidas sobre el agua, y al otro lado del puente, las compuertas que separan la Gola, del lago de l'Albufera,  que regulan su caudal por medio de este camino acuático, que se abre y se cierra según las necesidades de los agricultores, cuyas explotaciones, junto a la carretera, ofrecen sus productos cultivados en unas tierras que supongo que aún reciben el aporte de la arena de la playa, de ahí el apelativo de los tomates que cultivan, 'tomates de la arena'."
 .....

Eso fué ayer, hoy, después de ir al Mercado a por un kilo de boquerones y otro de clotxines, porque tenemos comida familiar, he bajado al Maravillas y la lectura del periódico me ha dado la clave para la entrada de hoy. Confiscación. 

Al parecer, Cámeron, a quien los electores ingleses han vuelto a dar el sillón para hacer ver que dirige los destinos del país, ha hecho unas declaraciones completamente surrealistas, al parecer derivadas de una promesa electoral. 

Nada menos, ha dicho Cámeron, que piensa confiscar los salarios de los trabajadores ilegales de su país. 

A ver, la confiscación, lo digo sin consultar Wikipedia, es un procedimiento legal para que el Estado se apropie de los bienes de quienes, de uno u otro modo han infringido la ley. Aquí hemos tenido experiencias de ese procedimiento, por ejemplo los inmuebles de los narcotafricantes detenidos en Galicia. Generalmente se usa ese procedimiento para cubrir las fianzas que se imponen a los reos convictos de actividades delictivas. 

Ahora, les ruego que reflexionen sobre el uso que piensa hacer Cámeron de esa figura, la confiscación. Los trabajadores ilegales, uno a uno, estoy convencido de que no tienen ingresos en cuantia suficiente para que les alcance la obligación de declarar sus impuestos.

En cambio, los empresarios, sobre todo aquellos que dan trabajo a un número significativo de trabajadores ilegales, muy probablemente, por las plús valías que obtendrán de ese trabajo, si estarán obligados a declarar y, si no lo hacen, tiene sentido que Cámeron apunte sus instrumentos de confiscación hacia ellos, en cambio, al parecer, ni los ha nombrado, se ha dirigido, únicamente, a los trabajadores ilegales. 

¿Porqué Cámeron utiliza ese lenguaje tan distorsionado?. Quiere ganarse a los votantes de la extrema derecha? Es un complemento de su discurso en el que niega asilo a cualquiera que quiera residir allí. ¿Porqué ese discurso racista, excluyente? No sé. 

El lenguaje de los políticos, a veces es un misterio, en cuanto a su motivación. Ahora estamos de campaña por aquí, el domingo hay que ir a votar, quien quiera hacerlo. Me he dado una vuelta por Heliópolis y está llena de carteles que afirman, debajo de la efigie del candidato/a del PP, Trabajar, hacer, crecer. 

Lamento no tener unos años menos para lanzarme a las calles con un rotulador y añadir una palabra al lema, Trabajar, hacer, crecer, Robar. Total, es añadir otro verbo, para conferir más realismo al lema, algo de lo que los publicistas de ese partido no hablan. 

No soy yo solo quien tiene esta percepción de ese partido, Emili Piera termina hoy su columna en las páginas de opinión de Levante, con esta palabra, Ladrones. Se refiere a otra forma de confiscación, la de algún partido en el poder sobre los presupuestos públicos. 

Claro, si no tienes poder, no puedes robar. Algo que habrá que tener en cuenta, antes de dar poder a unos u otros. 

En fin. Confiscación. 

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 22 05 15.