CIBERNOTICIAS

"He bajado al Maravillas, a las siete cuarenta y cinco. El local estaba atestado. La clientela habitual, la marquesa gitana de las tierras florentinas, el chaval que sufrió una embolia cerebral hace catorce años y, después de pasar por la silla de ruedas, ahora anda, aunque con muleta y se le entiende a medias lo que habla, el albañil decorador discutiendo con la marquesa, currantes que pasan a desayunar, antes de irse al curro. Desocupados, como yo.

Todos consumiendo variadas especialidades de café tocado con licores, de la experta mano de Toni. Al recordar que estamos hoy a veintisiete, --un día crucial para Catalunya, de eso no voy a hablar-- una fecha del mes en la que algunos pensionistas han cobrado su pensión, y algún trabajador, que cobra semanal, también habrá tenido ingresos, le he dicho a Toni, en voz baja, --qué, día de cobro... te pagan lo que hay apuntado en la libreta, no?. -Que vá, aquí no paga ni dios, sea la fecha que sea, si esto sigue así, me veré obligado a cerrar el bar..

--Si quieres, bajo disfrazado de torero, como el cobrador del frac, me dejas la libreta con las direcciones de los deudores y yo te cobro a domicilio, como cobrador del frac, pero de torero, por una prudente y modesta comisión..

 --Tío, se nota que no te has tomado la pastilla, no me jodas con tus chistecitos, que ya lo estoy bastante..

"Mi padre quiso que yo fuera torero, por eso me dió clases de capote con un saco de yute, pero le decepcioné. Me hice Economista, ya lo saben. Lo dejé hace diez años.

El otro día llevé a uno de mis nietos a ver 'Piratas del Caribe' y me partí de la risa viendo a Jack Sparrow, me ví reflejado en la pantalla, como Sparrow, con un pañuelo en la cabeza y un parche en el ojo, ganándome la vida de pirata, (2.0) tanto, que me han entrado unas ganas irresistibles de ponerme a piratear los artículos de las mejores plumas del mundo, en cualquier idioma, sin permiso, sin pagar derechos, y abrir una nueva sección, Cibernoticias, con lo mejor de cada casa de la prensa editorial."

Ya lo hice ayer, reproducir un artículo de prensa íntegro, sin permiso, el de Ventura Meliá, pero porque es amiguete.

No lo van a creer. Esta mañana, al intentar repetir la experiencia, intentando publicar el artículo íntegro de Paco Tomás, Crónicas de un Seductor, en la 2 del Levante de hoy, que he comprado en el quiosco después de pasar por la cafetería de La Fuente, luego de ir al Maravillas (no había ni un alma, a diferencia del Maravillas, lleno de gente que no paga, o paga en diferido, como diría Cospedal), en la Fuente, oiga, no había nadie.

Así como el Estado chino financia la deuda de las economías occidentales, los chinos de La Fuente no le fían a nadie, así les iba hoy.

Decía que, después de dos horas de teclear, cuando estaba a punto de publicar lo de Tomás 'Las Malas Noticias', íntegramente, un huevo de palabras, ...'Las malas noticias nos hacen más agresivos, más desconfiados,disminuyen nuestra capacidad de reflexión y afectan a nuestra creatividad..' ésta es la entradilla, he pulsado, sin querer, dos teclas a la vez, y toda la faena de dos horas se ha ido al carajo.

Compren, si lo desean, 'Levante' de hoy, y allí, en la 2, lo tienen entero, aunque les aviso que trata, específicamente, de la ética en el periodismo.

Ante esta frustración, no quiero volver a intentarlo. Soy desconfiado por naturaleza, me viene de mi abuela Cármen, de la rama paterna familiar, sospecho que los de Google tienen un mecanismo de lectura que observa, no solo lo que publicamos, sino lo que intentamos publicar, y si huele a pirateo, zas, se lo cargan.

Se lo dije a mi asesor informático, Jordi, porque me pasa a veces perder una página entera antes de publicada, y me dijo que no, es porque tengo un ordenador viejo y me empeño en pulsar a veces dos teclas a la vez.

Pues se van a j.... los de Google, cáspita.,. (digo cáspita, en lugar de hostia o joder, porque el profe de teatro nos prohibía ayer usar palabras malsonantes en cualquier actividad, relacionada o no con el teatro) porque esto de la piratería me empieza a gustar.

Ustedes se han fijado como viven los piratas, cáspita, al menos en el cine. Imagino a Sparrow navegando en su galeón, desvalijando las aldeas costeras de tres mares, regresando a su guarida y tirándose tres meses sin dar golpe, en su colchón bordado con hilos de seda, hasta la próxima expedición.

Si yo me meto en este lio de las Cibernoticias y me toca pagar derechos de autor, o, en su caso, las condenas económico financieras de los pleitos que me metan, ya me veo escribiendo como un esclavo veinticuatro horas al día, para pagar, por medio de la publicidad de la cerveza que odio, Amstel, que estaría obligado a poner en el blog, los platos rotos de mi audacia.

Y con la torpeza que tengo para pulsar más de una tecla a la vez, tendría que escribirlo todo dos veces, ni te cuento. Total, que estoy a merced de dos presiones simétricas, como diría Ventura. Por un lado el impulso de un deseo irracional, nutrir esta nueva sección, sin permiso, con las mejores plumas del mundo mundial, la de Ramonet, la de los héroes del Washington Post, el del watergate, se acuerdan, sin negar la presencia de otros, para que se puedan expresar también aquí, libremente, hasta dejaría a los del Die Welt, (se llama así?) germánico, que pongan aquí sus tonterías. Esta nueva sección sería un escaparate global de los mejores artículos de la prensa mundial. Hasta aquí la presión irracional. Luego está lo otro, la reflexión racional, derivada de que he vuelto a tomar el litio, aunque, de momento, no ha conseguido frenar mi incipiente tendencia a la euforia. Sería una barbaridad, de todas todas, abrir esta nueva sección con la intención de dar cabida a los mejores, pero sin intención de pagar nada por sus textos íntegros. Eso no funciona así.

Se me ocurre una tercera reflexión. ¿Quien debería pagar a quién? Considerando que la prensa impresa, incluso la que pone parte de sus contenidos en Internet está en un declive histórico, sus tiradas no se podrán mantener mucho tiempo ante la competencia implacable de la Red, y la falta de ética de muchos periodistas, que denuncian ahora hasta sus colegas, (véanse los dos artículos citados, el de Ventura publicado en su integridad, y el citado hoy de Tomás) que sus trabajos periodísticos aparecieran, debidamente valorados y seleccionados, en mi blog, considarando que es un medio visitado por usuarios de tres culturas y más de veinte paíes, ¿no deberían ser ellos, el periodismo impreso, los que me paguen a mi, por aumentar sus ventas de material gracias a la difusión virtual aquí? No sé.

Mi duda ha dejado de ser simétrica, para transmutarse en trifásica. ¿Que hacer? olvidarse de la nueva sección, de las citas, o de los plagios, lo que sea, y volver a la marchita normal del blog...

Mi cabeza no está estos días muy clara para tomar decisiones, así que someto la cosa al juicio de los usuarios, proponiéndo tres alternativas:

A) Nutrir la nueva sección con artículos de cualquier parte del mundo de periodistas de competencia y ética contrastadas, pagando los oportunos derechos de autor.

B) Piratear sin complejos lo mejor de cada casa y ponerlo aquí por el morro.

C) Negociar con los medios más influyentes del ámbito Global, para que paguen ellos por poner aquí sus cositas."

Como si esto fuera el concurso de Saber y Ganar de la 2, pero sin gastarse un duro en llamadas (menudo timo han montado) entren en los Comentarios de la página del blog, y dejen sus preferencias, solo la letra, A, B, o C, y cuando reciba las respuestas, hablamos del tema. Vale?.

En fin. Cibernoticias.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 27 10 17.