Hoy me espera una mañana muy ocupada, y luego me voy tres días a la casa de la sierra. Antes de irme, dejo en esta página unos apuntes, que me servirán para el siguiente artículo, a mi regreso, que se llamará, 'Física y Química'.
En la página Tokyo Blues utilicé una expresión, amor físico, que, según quien la lea, puede parecer cursi, y hasta ridícula. La he releído y me lo ha parecido. ¿Que es eso de amor físico, es que también hay amor químico? Pues mire usted, si, al menos lo hubo en la época de Kerouac, el padre de la química doméstica y la psicodelia, en la que todo el mundo andaba colocado.
Entonces yo ejercía de contable y andaba muy alejado de aquella movida, mi condición de padre de familia joven, que simultaneaba con la de estudiante universitario y trabajador, me condujo a una situación de crisis, mi cerebro comenzó a generar endorfinas, o como se llamen, en cantidades industriales y me vi inmerso, temporalmente, en una nube química como las que Kerouac incluía en su filosofía existencial, pero sin haberme acercado, ni de lejos, al consumo de sustancias alucinógenas.
Aquello fue una fiesta de euforia endógena, que no se volvió a repetir con la misma intensidad, y que me hizo perder quince kilos en unos pocos días por el poco dormir y el mucho velar en la vida bohemia de la Heliópolis de aquel tiempo.
De estas y otras cosas, tratará la página 'Física y Química', que espero añadir al blog a mi vuelta.
Hasta entonces, un saludo cibernauta.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 28-07-11.
viernes, 29 de julio de 2011
miércoles, 27 de julio de 2011
FRESCO Y HÚMEDO (2)
A estas alturas del verano ya estamos en situación de valorar la eficacia predictiva de las estimaciones que dos centros de investigación meteorológica hicieron antes de la llegada del estío. El CEAM, Centro de Estudios Ambientales, que se ve que dispone
de buenos augures, de esos que destripan una gallina y analizan sus vísceras antes de dar una opinión, fundada por lo demás en criterios científicos, anunció un verano fresco y húmedo, mientras que la Agencia Estatal de Meteorología, cuyo título sugiere
una grande y extendida estructura burocrática, dijo que iba a ser muy cálido, creo que de húmedo, no dijo nada.
(...)
Si preguntamos a los de Bilbao o por ahí, o residimos en Heliópolis, es obvio que observamos la evidencia de que los del CEAM han acertado de pleno. Solo quienes residan en el valle del Guadalquivir, que en verano es un infierno a prueba de cualquier previsión, coincidirán en sus apreciaciones con los otros augures.
Por otro lado, quienes se ocupan de las estadísticas del clima, ya nos han confirmado que las temperaturas medias en lo que ha transcurrido del verano, están tres grados por debajo del año anterior?. Esto de las medias, claro, es muy relativo, de que nos sirve saber cual es la renta media por habitante, si no tenemos renta alguna. A los residentes norteños que han vuelto a sacar las gabardinas, que no hay día que puedan salir de casa sin paraguas, lo de los tres grados seguro que les parece poco.
Las medias son medidas que sirven para comparar un periodo con otro, pero es el factor localización, y lo que sucede en cada región geográfica lo que mejor refleja la sensación individualizada sobre la naturaleza de los efectos de los factores meteorológicos en la vida cotidiana.
Yo, por ejemplo, no tengo la sensación de haber pasado calor este verano, solo algunos días puntuales he tenido esa sensación de agobio que acompaña la vida en las ciudades costeras, con humedades muy altas, o el ahogo que producen aquí los vientos de poniente. Esto, claro, es algo subjetivo, que no tiene nada que ver con las mediciones del clima. Basta que durante un par de días haga algo de fresco, para que tu memoria del calor se atrofie.
Ahora mismo, miro por la ventana del gabinete en el que escribo, y todo es muy gris, pero no conozco ninguna estadística que informe del color de los días.
En alguna página del blog he hecho un elogio de los grises, tan denostados, porque se asocian a la ausencia de alegría, de felicidad. Me parece un error, la felicidad también puede ser gris ¿porqué no?. Para aquellos que ya tenemos los ojos tan gastados, que el brillo solar nos castiga las pupilas, la suavidad de los grises es un descanso que se agradece, a condición de que no dure siempre, porque lo peor no es que llueva y haga frío, o que nos asemos de calor, lo terrorífico sería tener un clima tropical, sin variaciones estacionales, sin esos ciclos que hacen que broten unas flores y otras no, sin poder contemplar el magnífico espectáculo de los árboles de hojas caducas doradas por el otoño.
En el fondo, me importa un bledo que el verano sea húmedo y fresco, o cálido, lo que me importa es la sucesión estacional que, después de este verano, aparezca el otoño con su esplendor, luego el frio invierno como un anticipo de la explosión floral de la primavera, y que el próximo verano sea, otra vez, esa maravilla habitada por los muslos desnudos, las espaldas deslumbrantes y otros muestras anatómicas de la belleza, que nada se pare, que todo siga girando en esos ciclos de vida, hasta que uno cumpla su propio ciclo, y ya no pueda verlo.
En fin. Fresco y Húmedo (2)
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 27-07-11.
de buenos augures, de esos que destripan una gallina y analizan sus vísceras antes de dar una opinión, fundada por lo demás en criterios científicos, anunció un verano fresco y húmedo, mientras que la Agencia Estatal de Meteorología, cuyo título sugiere
una grande y extendida estructura burocrática, dijo que iba a ser muy cálido, creo que de húmedo, no dijo nada.
(...)
Si preguntamos a los de Bilbao o por ahí, o residimos en Heliópolis, es obvio que observamos la evidencia de que los del CEAM han acertado de pleno. Solo quienes residan en el valle del Guadalquivir, que en verano es un infierno a prueba de cualquier previsión, coincidirán en sus apreciaciones con los otros augures.
Por otro lado, quienes se ocupan de las estadísticas del clima, ya nos han confirmado que las temperaturas medias en lo que ha transcurrido del verano, están tres grados por debajo del año anterior?. Esto de las medias, claro, es muy relativo, de que nos sirve saber cual es la renta media por habitante, si no tenemos renta alguna. A los residentes norteños que han vuelto a sacar las gabardinas, que no hay día que puedan salir de casa sin paraguas, lo de los tres grados seguro que les parece poco.
Las medias son medidas que sirven para comparar un periodo con otro, pero es el factor localización, y lo que sucede en cada región geográfica lo que mejor refleja la sensación individualizada sobre la naturaleza de los efectos de los factores meteorológicos en la vida cotidiana.
Yo, por ejemplo, no tengo la sensación de haber pasado calor este verano, solo algunos días puntuales he tenido esa sensación de agobio que acompaña la vida en las ciudades costeras, con humedades muy altas, o el ahogo que producen aquí los vientos de poniente. Esto, claro, es algo subjetivo, que no tiene nada que ver con las mediciones del clima. Basta que durante un par de días haga algo de fresco, para que tu memoria del calor se atrofie.
Ahora mismo, miro por la ventana del gabinete en el que escribo, y todo es muy gris, pero no conozco ninguna estadística que informe del color de los días.
En alguna página del blog he hecho un elogio de los grises, tan denostados, porque se asocian a la ausencia de alegría, de felicidad. Me parece un error, la felicidad también puede ser gris ¿porqué no?. Para aquellos que ya tenemos los ojos tan gastados, que el brillo solar nos castiga las pupilas, la suavidad de los grises es un descanso que se agradece, a condición de que no dure siempre, porque lo peor no es que llueva y haga frío, o que nos asemos de calor, lo terrorífico sería tener un clima tropical, sin variaciones estacionales, sin esos ciclos que hacen que broten unas flores y otras no, sin poder contemplar el magnífico espectáculo de los árboles de hojas caducas doradas por el otoño.
En el fondo, me importa un bledo que el verano sea húmedo y fresco, o cálido, lo que me importa es la sucesión estacional que, después de este verano, aparezca el otoño con su esplendor, luego el frio invierno como un anticipo de la explosión floral de la primavera, y que el próximo verano sea, otra vez, esa maravilla habitada por los muslos desnudos, las espaldas deslumbrantes y otros muestras anatómicas de la belleza, que nada se pare, que todo siga girando en esos ciclos de vida, hasta que uno cumpla su propio ciclo, y ya no pueda verlo.
En fin. Fresco y Húmedo (2)
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 27-07-11.
TOKYO BLUES
Ayer estuve en el cine D'Or. Día del espectador. Dos películas por dos con cincuenta, un auténtico chollo, aunque la primera, ese western en el que sale Eduardo Noriega de vaquero no la vi, porque no me cuadraba el horario. Fui a ver la segunda, Tokyo Blues, con grandes expectativas, porque en mi reciente estancia en Xábia leí otro libro de Murakami, y tenía una gran curiosidad por conocer esta versión cinematográfica de su novela, publicada en 1.987, con el mismo título.
(...)
Cuando te dejas llevar por tus expectativas antes de ver una película, sueles sufrir una decepción, aunque, en este caso, solo ha sido media, pues el Tokyo que yo esperaba ver, un lugar nocturno, festivo, abierto veinticuatro horas, como N. York, lleno de jóvenes decadentes y sofisticados, algo parecido a lo que nos mostró 'Last Translation', no aparece por parte alguna. En cambio, la otra mitad del título, Blues, literalmente, tristeza melancólica, estuvo presente en toda la proyección, pues lo que nos cuentan son los años jóvenes de Murakami, marcados
por las pérdidas y el desamor.
La película arranca con la bucólica felicidad de Murakami, su joven amigo y su novia,
que comparten una amistad desde la infancia. Enseguida, el amigo se suicida, sin que sepamos porqué, enchufando una goma al tubo de escape del coche en un garaje, sellando herméticamente esa conexión, y quedándose en su interior a esperar el efecto del monóxido de carbono.
Esa dolorosa pérdida inicial, marcará los acontecimientos posteriores, que no son muchos, porque se trata de una película intimista, con la lentitud y la morosidad
propia de las historias que inciden, sobre todo, en las emociones y sentimientos de los personajes, y prescinden de cualquier trama argumental añadida.
Murakami aparece como un chico normal, que estudia y trabaja, se interesa por la literatura y por las chicas, hasta que reaparece en su vida la novia del amigo muerto, en un encuentro ocasional, en el que follan. Prefiero esa expresión, dada la edad y circunstancias de los personajes, antes que la edulcorada, hacen el amor.
La chica le dice a Murakami que no se ha recuperado de la pérdida de su novio, y que se va a una casa de reposo para intentar encontrar la salud perdida. A partir de ese momento, todo son idas y venidas de Murakami a la casa de reposo para ver a la muchacha de la que se enamora sin remedio, pero en cada visita, la chica está peor
y termina suicidándose también.
Quizás la mejor secuencia de la película es la toma aérea en la que Murakami aúlla de desesperación tras la muerte de su amada que, dicho sea de paso, por un trauma psicológico está incapacitada para el amor físico, que solo experimentó una vez, en el encuentro ocasional con Murakami, sin que nunca haya logrado después estar en disposición de hacerlo. Es enorme ese plano en el que se nos muestra al protagonista en un paisaje natural de increíble belleza, gritando al viento la tragedia de la pérdida.
La película abunda en mostrarnos localizaciones de espacios naturales impresionantes, pero lo hace como si estuviéramos viendo un álbum de postales. Hay que decir que el montaje de la película parece un poco chapucero, saltando de un plano a otro sin ningún nexo que los encadene, pero la lectura de Murakami ofrece
otra clave, pues alguna de sus novelas está escrita sin ninguna intención de linealidad. Su escritura parece un conjunto de estampas inconexas, pero solo a los ojos de un lector superficial. Es posible que se trate de un puzzle que una vez ordenado por lectores mas cuidadosos, alcance su pleno sentido. En este caso, el montaje algo abrupto de las imágenes, respondería a la intención de fidelidad al texto.
Lo que queda transparente es la intención del autor, trasladada a la película, de vincular la narración, de modo simbólico, a la idea de amor y muerte. Ya saben, eso que, dicho con pedantería, se expresa como Eros y Tánatos. Son frecuentes en el guión las alusiones explícitas al sexo, en el tono franco y vulgar que corresponde a la edad de los protagonistas, y no menos frecuentes son las escenas de sexo, no tan explícitas como el vocabulario que se emplea.
No comparto la asociación entre el sexo y la muerte, ni veo en el orgasmo ninguna
representación simbólica de la muerte. El sexo es vida. La muerte es la ausencia total, de sexo, de todo lo demás, de uno mismo. Ahora soy un seductor decrépito, pero una mujer con la que me acosté, hace aproximadamente un siglo, de la que guardo un recuerdo grato y afectuoso, me lo dijo, --Enrique, déjalo todo dentro... es vida.
En fin. Tokyo Blues. La pueden ver esta semana en el cine D'Or, por dos pavos y medio (si están jubilados). Un chollo. Y la de Noriega, de propina.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 27-07-11.
(...)
Cuando te dejas llevar por tus expectativas antes de ver una película, sueles sufrir una decepción, aunque, en este caso, solo ha sido media, pues el Tokyo que yo esperaba ver, un lugar nocturno, festivo, abierto veinticuatro horas, como N. York, lleno de jóvenes decadentes y sofisticados, algo parecido a lo que nos mostró 'Last Translation', no aparece por parte alguna. En cambio, la otra mitad del título, Blues, literalmente, tristeza melancólica, estuvo presente en toda la proyección, pues lo que nos cuentan son los años jóvenes de Murakami, marcados
por las pérdidas y el desamor.
La película arranca con la bucólica felicidad de Murakami, su joven amigo y su novia,
que comparten una amistad desde la infancia. Enseguida, el amigo se suicida, sin que sepamos porqué, enchufando una goma al tubo de escape del coche en un garaje, sellando herméticamente esa conexión, y quedándose en su interior a esperar el efecto del monóxido de carbono.
Esa dolorosa pérdida inicial, marcará los acontecimientos posteriores, que no son muchos, porque se trata de una película intimista, con la lentitud y la morosidad
propia de las historias que inciden, sobre todo, en las emociones y sentimientos de los personajes, y prescinden de cualquier trama argumental añadida.
Murakami aparece como un chico normal, que estudia y trabaja, se interesa por la literatura y por las chicas, hasta que reaparece en su vida la novia del amigo muerto, en un encuentro ocasional, en el que follan. Prefiero esa expresión, dada la edad y circunstancias de los personajes, antes que la edulcorada, hacen el amor.
La chica le dice a Murakami que no se ha recuperado de la pérdida de su novio, y que se va a una casa de reposo para intentar encontrar la salud perdida. A partir de ese momento, todo son idas y venidas de Murakami a la casa de reposo para ver a la muchacha de la que se enamora sin remedio, pero en cada visita, la chica está peor
y termina suicidándose también.
Quizás la mejor secuencia de la película es la toma aérea en la que Murakami aúlla de desesperación tras la muerte de su amada que, dicho sea de paso, por un trauma psicológico está incapacitada para el amor físico, que solo experimentó una vez, en el encuentro ocasional con Murakami, sin que nunca haya logrado después estar en disposición de hacerlo. Es enorme ese plano en el que se nos muestra al protagonista en un paisaje natural de increíble belleza, gritando al viento la tragedia de la pérdida.
La película abunda en mostrarnos localizaciones de espacios naturales impresionantes, pero lo hace como si estuviéramos viendo un álbum de postales. Hay que decir que el montaje de la película parece un poco chapucero, saltando de un plano a otro sin ningún nexo que los encadene, pero la lectura de Murakami ofrece
otra clave, pues alguna de sus novelas está escrita sin ninguna intención de linealidad. Su escritura parece un conjunto de estampas inconexas, pero solo a los ojos de un lector superficial. Es posible que se trate de un puzzle que una vez ordenado por lectores mas cuidadosos, alcance su pleno sentido. En este caso, el montaje algo abrupto de las imágenes, respondería a la intención de fidelidad al texto.
Lo que queda transparente es la intención del autor, trasladada a la película, de vincular la narración, de modo simbólico, a la idea de amor y muerte. Ya saben, eso que, dicho con pedantería, se expresa como Eros y Tánatos. Son frecuentes en el guión las alusiones explícitas al sexo, en el tono franco y vulgar que corresponde a la edad de los protagonistas, y no menos frecuentes son las escenas de sexo, no tan explícitas como el vocabulario que se emplea.
No comparto la asociación entre el sexo y la muerte, ni veo en el orgasmo ninguna
representación simbólica de la muerte. El sexo es vida. La muerte es la ausencia total, de sexo, de todo lo demás, de uno mismo. Ahora soy un seductor decrépito, pero una mujer con la que me acosté, hace aproximadamente un siglo, de la que guardo un recuerdo grato y afectuoso, me lo dijo, --Enrique, déjalo todo dentro... es vida.
En fin. Tokyo Blues. La pueden ver esta semana en el cine D'Or, por dos pavos y medio (si están jubilados). Un chollo. Y la de Noriega, de propina.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 27-07-11.
martes, 26 de julio de 2011
DESIERTOS
En los desiertos antiguos, según Buñuel, algunos aspirantes a la santidad se subían encima de un poyo y allí permanecían inmóviles en busca de la iluminación. El hambre, la intemperie y la soledad, terminaban por desencadenar delirios en el sujeto dolorido y al fin de ese voluntario martirio, el verbo del penitente ya estaba suficientemente afilado para la prédica.
Otros menos valerosos se conformaban con acomodarse en el interior de un morabito, de donde salían después de tres años sin lavarse y sin cortarse las uñas. Algunos piensan que de esas experiencias procede la expresión 'olor de santidad'. En nuestros días, la prédica adopta otras formas, y también el cine, en ocasiones, da cuenta de ellas.
(...)
Ayer vi de nuevo, en TCM, una magnífica película que casi había olvidado, 'La Hoguera de las Vanidades', versión cinematográfica del excelente libro de Tom Wolf, aunque con otro desenlace. El predicador negro que monta un juicio público, manejando a periodistas y fiscales, para castigar el atropello de un feligrés suyo del Bronx, revela al final de la película que todo es una maniobra secundaria, subsidiaria de su verdadero objetivo, obtener una indemnización de diez millones de dolares del hospital que atendió,mal, a su pupilo.
El magistral discurso del juez --Morgan Friedman- que da el caso por sobreseído, incluye una reconvención a ese hombre de Dios, cuya única motivación en el asunto es su propio beneficio monetario, y que luce durante todo el film un atuendo a base de túnicas y joyas áureas, además de un verbo bíblico purificador.
Quiere esto decir, que hay predicadores y predicadores, hay desiertos y desiertos. El último concurso de la Generalitat para la adjudicación de las obras de varias líneas y una estación en Alicante, ha sido declarado desierto, al parecer porque los constructores no se han fiado de la prédica contractual que declaraba
las bondades del negocio, en especial en cuanto a la capacidad de pago de esas obras
por la Administración de Heliópolis.
No parece congruente esa actitud con el nuevo estilo de la prédica política que ya practica el candidato a President. Cualquiera que lo haya escuchado habrá notado la credibilidad y solidez de su discurso, y lo menos que podían haber hecho las constructoras es otorgar la mínima credibilidad a esos contratos, asumiendo algunos riesgos financieros, para redondear con una actitud mas positiva lo que parece
consolidarse como una nueva forma de hacer política.
¿La política es solo prédica?. Yo no lo creo. Existen los contratos y las leyes aprobadas en las cortes que demuestran, cada día, que la política tiene un contenido retórico, si, pero también normativo, que nos afecta de modo cotidiano.
Una prueba de lo que digo es la travesía por la que sigue su camino penitente la CAM, esa entidad financiera a la que se dan casi seis mil millones de euros, para capitalizarla, lo que indica que alguien, o alguienes, la han descapitalizado, si no directamente, con su gestión temeraria.
Predicadores y desiertos no están tan lejanos en el tiempo como creemos, no son residuos de los tiempos bíblicos, están aquí, entre nosotros, con distintas formas.
El entorno económico mas inmediato y cercano se asemeja, cada vez mas, a una travesía del desierto, en la que comienzan a escasear los víveres, y somos incapaces de percibir, con claridad, si lo que se adivina a lo lejos es un oasis, o solo una alucinación.
En fin. Desiertos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 26-07-11.
Otros menos valerosos se conformaban con acomodarse en el interior de un morabito, de donde salían después de tres años sin lavarse y sin cortarse las uñas. Algunos piensan que de esas experiencias procede la expresión 'olor de santidad'. En nuestros días, la prédica adopta otras formas, y también el cine, en ocasiones, da cuenta de ellas.
(...)
Ayer vi de nuevo, en TCM, una magnífica película que casi había olvidado, 'La Hoguera de las Vanidades', versión cinematográfica del excelente libro de Tom Wolf, aunque con otro desenlace. El predicador negro que monta un juicio público, manejando a periodistas y fiscales, para castigar el atropello de un feligrés suyo del Bronx, revela al final de la película que todo es una maniobra secundaria, subsidiaria de su verdadero objetivo, obtener una indemnización de diez millones de dolares del hospital que atendió,mal, a su pupilo.
El magistral discurso del juez --Morgan Friedman- que da el caso por sobreseído, incluye una reconvención a ese hombre de Dios, cuya única motivación en el asunto es su propio beneficio monetario, y que luce durante todo el film un atuendo a base de túnicas y joyas áureas, además de un verbo bíblico purificador.
Quiere esto decir, que hay predicadores y predicadores, hay desiertos y desiertos. El último concurso de la Generalitat para la adjudicación de las obras de varias líneas y una estación en Alicante, ha sido declarado desierto, al parecer porque los constructores no se han fiado de la prédica contractual que declaraba
las bondades del negocio, en especial en cuanto a la capacidad de pago de esas obras
por la Administración de Heliópolis.
No parece congruente esa actitud con el nuevo estilo de la prédica política que ya practica el candidato a President. Cualquiera que lo haya escuchado habrá notado la credibilidad y solidez de su discurso, y lo menos que podían haber hecho las constructoras es otorgar la mínima credibilidad a esos contratos, asumiendo algunos riesgos financieros, para redondear con una actitud mas positiva lo que parece
consolidarse como una nueva forma de hacer política.
¿La política es solo prédica?. Yo no lo creo. Existen los contratos y las leyes aprobadas en las cortes que demuestran, cada día, que la política tiene un contenido retórico, si, pero también normativo, que nos afecta de modo cotidiano.
Una prueba de lo que digo es la travesía por la que sigue su camino penitente la CAM, esa entidad financiera a la que se dan casi seis mil millones de euros, para capitalizarla, lo que indica que alguien, o alguienes, la han descapitalizado, si no directamente, con su gestión temeraria.
Predicadores y desiertos no están tan lejanos en el tiempo como creemos, no son residuos de los tiempos bíblicos, están aquí, entre nosotros, con distintas formas.
El entorno económico mas inmediato y cercano se asemeja, cada vez mas, a una travesía del desierto, en la que comienzan a escasear los víveres, y somos incapaces de percibir, con claridad, si lo que se adivina a lo lejos es un oasis, o solo una alucinación.
En fin. Desiertos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 26-07-11.
lunes, 25 de julio de 2011
EN LA ISLA
En la casa de la sierra he escuchado por la radio la trágica noticia, que me ha conmovido profundamente, la matanza de jóvenes en una isla de Noruega. Además, escuché otra noticia, al parecer incruenta, que me pareció muy inquietante.
Un hombre de edad avanzada agredió a una pareja de jóvenes en un restaurante, al parecer, porque se besaban en público. A mi me parecen, ambas noticias, dos manifestaciones distintas de una misma plaga, la intolerancia.
¿Existe algún lugar donde uno pueda retirarse a vivir que esté libre de intolerantes?
No sé.
Tal vez, todos vivamos, sin saberlo, en una futura isla, ignorando el grado de violencia e irracionalidad que un solo individuo puede desencadenar.
(...)
Estamos al tanto, sabemos lo que ha sucedido, pero tal vez hemos olvidado pequeños incidentes en los que afloró la intolerancia en nuestra vida cotidiana.
Cuando compramos la vieja casa campesina de la isla, encargamos el propio hijo de quien nos la vendió la rehabilitación de la fachada. Un día, aparecimos por allí para ver el resultado de los trabajos y aquel hombre nos mostró, orgulloso de su obra, la textura perfectamente lisa de la fachada, resultado de una finalización cuidadosa de la rehabilitación.
Cuando le dijimos que preferíamos algo mas rústico, mas basto, alejado de aquel acabado casi perfecto, el hombre, con la paleta de lucir en la mano, nos miró de un modo extraño, enrojeció de cólera y, después de unos segundos, los que tardó en elegir entre partirnos el cráneo con la herramienta, o deshacer la apariencia de perfección del trabajo realizado, comenzó a lanzar porciones de cemento con la mano contra la fachada de la casa, y era tanta su cólera por plegarse a nuestra sugerencia de un acabado imperfecto, que en un tiempo muy corto dejó la fachada con el aire rústico que habíamos solicitado.
Desde entonces, aquel hombre, cuando pasa con su gran coche por el camino polvoriento junto al que está nuestra vieja casa de la isla, lo hace a toda velocidad, sin detenerse, ni saludar. En cierta ocasión, estuvo a punto de llevarse por delante a nuestro perro Lucas, a quien tocó ligeramente la rueda, sin lesionarlo.
Lucas ha adquirido la costumbre de ladrar con agresividad al coche que estuvo a punto de atropellarlo, cuando huele su proximidad. Aún hoy, cuando nuestros nietos comparten con nosotros un día en la casa de la isla, hemos de tener mucho cuidado y mantenerlos alejados del camino. Nunca se sabe cuando va a aparecer el conductor violento.
En el fondo de este conflicto latente está la violencia de la intolerancia hacia el error, la imperfección, o la permisividad. Las sociedades permisivas pueden generar sujetos violentos, como es el caso de Noruega, que odian la permisividad, pero las formas autoritarias de organización social generan el mismo tipo de violencia, solo que a mayor escala. La historia del siglo XX lo demuestra.
Una sociedad permisiva, como la noruega, carece de mecanismos para una detección precoz de la violencia individual. Los gobiernos totalitarios, como el cubano, recluyen a las personas por sus supuestas intenciones y, parece claro, si uno puede elegir, en que tipo de sociedad le gustaría vivir.
En realidad, nuestra vieja casa campesina no está en una isla, sino en una península, pero no se puede descartar que, con el tiempo, se desprenda del continente, como no se puede excluir que un tipo violento, que no soporta la permisividad, urda un plan destructivo de consecuencias brutales.
Los permisivos hemos de resistir las presiones de los autoritarios, a veces, en situaciones muy dolorosas, para seguir viviendo en libertad. Eso parece que están haciendo los noruegos y por ello se sienten legítimamente orgullosos, además de doloridos por una tragedia colectiva, incomprensible, estúpida, con la estupidez de la intolerancia.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 25-07-11.
Un hombre de edad avanzada agredió a una pareja de jóvenes en un restaurante, al parecer, porque se besaban en público. A mi me parecen, ambas noticias, dos manifestaciones distintas de una misma plaga, la intolerancia.
¿Existe algún lugar donde uno pueda retirarse a vivir que esté libre de intolerantes?
No sé.
Tal vez, todos vivamos, sin saberlo, en una futura isla, ignorando el grado de violencia e irracionalidad que un solo individuo puede desencadenar.
(...)
Estamos al tanto, sabemos lo que ha sucedido, pero tal vez hemos olvidado pequeños incidentes en los que afloró la intolerancia en nuestra vida cotidiana.
Cuando compramos la vieja casa campesina de la isla, encargamos el propio hijo de quien nos la vendió la rehabilitación de la fachada. Un día, aparecimos por allí para ver el resultado de los trabajos y aquel hombre nos mostró, orgulloso de su obra, la textura perfectamente lisa de la fachada, resultado de una finalización cuidadosa de la rehabilitación.
Cuando le dijimos que preferíamos algo mas rústico, mas basto, alejado de aquel acabado casi perfecto, el hombre, con la paleta de lucir en la mano, nos miró de un modo extraño, enrojeció de cólera y, después de unos segundos, los que tardó en elegir entre partirnos el cráneo con la herramienta, o deshacer la apariencia de perfección del trabajo realizado, comenzó a lanzar porciones de cemento con la mano contra la fachada de la casa, y era tanta su cólera por plegarse a nuestra sugerencia de un acabado imperfecto, que en un tiempo muy corto dejó la fachada con el aire rústico que habíamos solicitado.
Desde entonces, aquel hombre, cuando pasa con su gran coche por el camino polvoriento junto al que está nuestra vieja casa de la isla, lo hace a toda velocidad, sin detenerse, ni saludar. En cierta ocasión, estuvo a punto de llevarse por delante a nuestro perro Lucas, a quien tocó ligeramente la rueda, sin lesionarlo.
Lucas ha adquirido la costumbre de ladrar con agresividad al coche que estuvo a punto de atropellarlo, cuando huele su proximidad. Aún hoy, cuando nuestros nietos comparten con nosotros un día en la casa de la isla, hemos de tener mucho cuidado y mantenerlos alejados del camino. Nunca se sabe cuando va a aparecer el conductor violento.
En el fondo de este conflicto latente está la violencia de la intolerancia hacia el error, la imperfección, o la permisividad. Las sociedades permisivas pueden generar sujetos violentos, como es el caso de Noruega, que odian la permisividad, pero las formas autoritarias de organización social generan el mismo tipo de violencia, solo que a mayor escala. La historia del siglo XX lo demuestra.
Una sociedad permisiva, como la noruega, carece de mecanismos para una detección precoz de la violencia individual. Los gobiernos totalitarios, como el cubano, recluyen a las personas por sus supuestas intenciones y, parece claro, si uno puede elegir, en que tipo de sociedad le gustaría vivir.
En realidad, nuestra vieja casa campesina no está en una isla, sino en una península, pero no se puede descartar que, con el tiempo, se desprenda del continente, como no se puede excluir que un tipo violento, que no soporta la permisividad, urda un plan destructivo de consecuencias brutales.
Los permisivos hemos de resistir las presiones de los autoritarios, a veces, en situaciones muy dolorosas, para seguir viviendo en libertad. Eso parece que están haciendo los noruegos y por ello se sienten legítimamente orgullosos, además de doloridos por una tragedia colectiva, incomprensible, estúpida, con la estupidez de la intolerancia.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 25-07-11.
ALERTAS
Miro el horizonte abierto, las colinas encadenadas formando un semicírculo perfecto, el cielo brillante de las seis de la tarde iluminado por el sol de julio y las pinceladas suaves de nubes que parecen dejadas por un acuarelista en vuelo a alguna parte, mientras escucho la cuarta de Brahms, y me da una pereza enorme ponerme a escribir de las cosas pequeñas de los hombres, pero el compromiso adquirido en la página anterior, me lo exige.
(...)
La cosa iba de Alertas, creo. "Que vienen los dinosaurios", "De un momento a otro volverá a aparecer desnuda la vecina de enfrente tras la ventana". Miedo y sexo, dos emociones esenciales en la vida cotidiana.
Las alertas que en ocasiones no nos dejan conciliar el sueño, ¿He apagado el fuego?, ¿He cerrado bien la puerta?, se suelen disparar a destiempo. Pero, ¿Que son las alertas?.
Sospecho que son procesos neurofisiológicos que tienen su función principal en la vigilia. Nos avisan de peligros, reales o supuestos, para que nuestra atención esté siempre dispuesta en situaciones que lo requieran.
Un sueño tranquilo, reparador, requiere que todas las alertas estén apagadas para que nada perturbe nuestro descanso y podamos conciliar el sueño. La actividad neuronal, excitada por los acontecimientos de la vigilia puede comportarse como un proceso imperfecto.
Imaginemos que las alertas de la vigilia, una vez desactivadas, se comportan, en ausencia de estímulos, como tapones que cierran herméticamente el flujo de respuestas a la información que las estimula. Si ese proceso de cierre no es perfectamente estanco, seguiremos recibiendo un flujo de estímulos que pueden ser responsables de episodios de insomnio mas o menos permanentes.
Ante la imposibilidad de llamar a los bomberos para que sellen con silicona esas grietas por donde se escapan los estímulos de las alertas de la vigilia que no los dejan dormir, mucha gente opta por consumir neurolépticos. No se cuantas toneladas de neurolépticos puede consumir una población del tamaño de la nuestra, pero sería interesante practicar una medicina preventiva. Equipos de especialistas deberían enseñarnos a manejar mejor nuestros miedos, nuestros estímulos, y a cerrarlos correctamente antes de intentar conciliar el sueño.
En fin. Alertas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 25-07-11.
(...)
La cosa iba de Alertas, creo. "Que vienen los dinosaurios", "De un momento a otro volverá a aparecer desnuda la vecina de enfrente tras la ventana". Miedo y sexo, dos emociones esenciales en la vida cotidiana.
Las alertas que en ocasiones no nos dejan conciliar el sueño, ¿He apagado el fuego?, ¿He cerrado bien la puerta?, se suelen disparar a destiempo. Pero, ¿Que son las alertas?.
Sospecho que son procesos neurofisiológicos que tienen su función principal en la vigilia. Nos avisan de peligros, reales o supuestos, para que nuestra atención esté siempre dispuesta en situaciones que lo requieran.
Un sueño tranquilo, reparador, requiere que todas las alertas estén apagadas para que nada perturbe nuestro descanso y podamos conciliar el sueño. La actividad neuronal, excitada por los acontecimientos de la vigilia puede comportarse como un proceso imperfecto.
Imaginemos que las alertas de la vigilia, una vez desactivadas, se comportan, en ausencia de estímulos, como tapones que cierran herméticamente el flujo de respuestas a la información que las estimula. Si ese proceso de cierre no es perfectamente estanco, seguiremos recibiendo un flujo de estímulos que pueden ser responsables de episodios de insomnio mas o menos permanentes.
Ante la imposibilidad de llamar a los bomberos para que sellen con silicona esas grietas por donde se escapan los estímulos de las alertas de la vigilia que no los dejan dormir, mucha gente opta por consumir neurolépticos. No se cuantas toneladas de neurolépticos puede consumir una población del tamaño de la nuestra, pero sería interesante practicar una medicina preventiva. Equipos de especialistas deberían enseñarnos a manejar mejor nuestros miedos, nuestros estímulos, y a cerrarlos correctamente antes de intentar conciliar el sueño.
En fin. Alertas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 25-07-11.
viernes, 22 de julio de 2011
AVISOS Y ESPANTADAS
Hoy iba a escribir sobre las 'Alertas', esos mecanismos neurofisiológicos? que nos habitan en la frontera entre la vigilia y el sueño, y a veces ocasionan, por un funcionamiento defectuoso, trastornos de insomnio, unas veces leves y pasajeros, otras mas permanentes. Que vienen los dinosaurios, o de un momento a otro, la vecina de enfrente volverá a aparecer desnuda tras la ventana, son ejemplos de alertas relacionadas con el miedo y el sexo, dos potentes emociones que nos inquietan tanto que alguna vez nos impiden dormir. ¿He apagado el fuego? ¿He cerrado bien la puerta? son alertas frecuentes que se encienden, casi siempre, sin motivo. 'Creo que mi jefe me despedirá mañana', es otra manifestación de las inquietudes que nos impiden conciliar el sueño, se podría decir que bastante fundada, en estos tiempos.
El caso es que no he podido dedicarme a la entrada de hoy, porque esta mañana he andado muy ocupado, y unos amigos me acaban de llamar para avisar de que vienen esta tarde a casa, para jugar unas manos al Continental.
No dispongo de tiempo libre para dedicarlo hoy al blog, y como mañana me voy a pasar tres días a la casa de la sierra, he pensado dejar aquí estas pistas que me servirán para dedicar una entrada al tema de las 'Alertas', a mi regreso.
Hasta entonces, un saludo cibernauta.
Tengo un lector nuevo, un joven estudiante y jugador de basket, amigo de la familia. Menos mal que solo ha entrado en la sección de Cocina, sin aventurarse en otros textos mas escatológicos. En fin.
Hasta la vista.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 22-07-11.
El caso es que no he podido dedicarme a la entrada de hoy, porque esta mañana he andado muy ocupado, y unos amigos me acaban de llamar para avisar de que vienen esta tarde a casa, para jugar unas manos al Continental.
No dispongo de tiempo libre para dedicarlo hoy al blog, y como mañana me voy a pasar tres días a la casa de la sierra, he pensado dejar aquí estas pistas que me servirán para dedicar una entrada al tema de las 'Alertas', a mi regreso.
Hasta entonces, un saludo cibernauta.
Tengo un lector nuevo, un joven estudiante y jugador de basket, amigo de la familia. Menos mal que solo ha entrado en la sección de Cocina, sin aventurarse en otros textos mas escatológicos. En fin.
Hasta la vista.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 22-07-11.
jueves, 21 de julio de 2011
MUJERES
Ayer escribí el artículo mas corto de mi vida de internauta. Solo dos palabras, dedicadas al sujeto dimisionario que fue noticia radiada ayer por la tarde. Lo hice convencido de que no merecía mayor atención. Puede parecer un gesto de desprecio, a mi me pareció ajustado al historial público del personaje. Al parecer, estaba equivocado, pues toda la prensa de hoy, al menos la local y la nacional, está desbordada por una cantidad ingente de artículos que tratan la noticia desde todos los puntos de vista. ¿Todos?. Voy a intentar un punto de vista distinto, muy personal, que no he visto reflejado entre las opiniones, abrumadoramente masculinas, que he leído, visto, escuchado.
(...)
Antes de entrar en materia, he de confesar que estoy enamorado de todas las mujeres, de una mas que de las otras, sin excluir a ninguna, las altas y esbeltas, las gruesas y no tanto, las que están grávidas y las que no, las jóvenes y no tan jóvenes, las que se dedican a la vida política --iba a decir pública, pero tiene otras connotaciones-- y las que viven mas discretamente en el ámbito civil. Un médico amigo me dijo una vez que yo era un poco Edipo, pero yo creo que mi sincera admiración por lo femenino está anclada en la observación de la historia, el teatro, la literatura y la política.
Será por eso que, al observar un suceso como el que nos ocupa, no puedo dejar de reflexionar sobre el papel de la mujer en su desenlace. La mujer de César, le aconsejó, el día de su asesinato, que no fuera al Senado, porque había hecho eviscerar a una gallina y el augur le había advertido del peligro letal que corría su marido. César no hizo caso a su mujer, fue al senado, y allí fue acuchillado por sus amigos mas queridos.
En esta ocasión, la de nuestro sujeto dimisionario de Heliópolis, tengo una fuerte intuición de que la decisión última de este algo rocambolesco episodio, hay que apuntarla en la cuenta de la mujer del César, que, en este caso, ha impuesto su criterio por encima del poderoso aparato partidario y el marrullero arreglador jurídico que habían enviado aquí para que los distintos imputados aceptaran el pago de una multa que los eximía de juicio.
Con su actitud de hacer caso a su mujer, y no a sus compañeros de partido, en mi opinión, nuestro César ha demostrado mayor sentido común que aquel asesinado por Bruto, de cuyo matador Marco Antonio dijo, repetidas veces, en el discurso que siguió al magnicidio, que era un hombre honrado. Lo mismo que estamos oyendo ahora con insistencia de nuestro César dimitido, pero vivo.
Digo esto desde la convicción de que las mujeres y los hombres, no somos iguales. Ellas son mejores. Otra cosa es que debamos tener iguales derechos, que ellas todavía no tienen. No hay mas que ver el censo de la política, el género de quienes la practican, para darse cuenta de que todas las desventuras que nos afligen, en buena parte imputables al fracaso de la política en la conducción del mundo, son un fracaso de género, de los hombres, que son, mayoritariamente, quienes ejercen el poder político.
Esta no es una afirmación gratuita, aunque puede que esté marcada por mis preferencias personales, está basada en la observación. Una de las mujeres mas poderosas del mundo, a la vez mas consciente de su feminidad, es Lagarde, la actual gerente del FMI, que sustituyó a DSK, ya saben porqué.
Esta mujer poderosa dice un par de cosas, en una entrevista que publicó un dominical recientemente, que no me pasaron desapercibidas. Una de ellas, que las relaciones internacionales, a nivel financiero, organizativo, político, están demasiado marcadas por la testosterona, por los desahogos hormonales. Cuando le piden que defina la condición femenina, Lagarde dice que las mujeres son como las bolsitas de té, que cuando las sumergen en el agua emerge toda su fuerza. Es decir, ellas son las fuertes, no se si porque la necesidad de supervivencia en un mundo de hombres las hace así.
No todas las mujeres poderosas son como Lagarde. Algunas, reproducen el papel masculino en sus actuaciones públicas. Estoy pensando en Tatcher, en Cospedal, en Merkel, en Barberá.
Angela Merkel, ahora enmerdada en una política populista que agrada a una parte de su electorado que dice estar cansado de la solidaridad con los países del Sur, no me parece que piense como Lagarde.
Alguien debería recordar a esos electores que están condicionando, bajo la batuta de Merkel, la política de la Unión, que, de no ser por la solidaridad exterior, en su país todavía estarían recogiendo cascotes del solar en que quedó convertido tras la gran guerra, y que la financiación de la reunificación alemana después de la caída del Muro de Berlín, se financió en gran parte con recursos que se restaron a los países ibéricos, por no hablar de que la deuda actual de los países del sur, ha de ponerse en una balanza donde se pese también cuanto de las exportaciones alemanas a esos países ha contribuido al saneamiento de las cuentas germanas.
Quiere esto decir que, al igual que los hombres y las mujeres no somos iguales, las mujeres tampoco son iguales entre si. Pero hay un hecho incontestable. Puesto que el poder es esencialmente masculino, y la situación actual de nuestro mundo mas cercano
es una consecuencia, básicamente, de errores estratégicos en el uso de ese poder, algunos pensamos que las mujeres, en general, aunque haya otras en particular que imitan el rol masculino, son mas capaces, mas sensibles, y mas fuertes que los varones.
Como se ha reconocido este hecho en muchos países pobres, las agencias de ayuda al desarrollo les confían a ellas las tareas vinculadas al crecimiento económico, y en Rusia, el sesenta por ciento de la población, las mujeres, llevan el peso en un país donde buena parte de los hombres se dedican al vodka.
Tal vez en Europa hemos llegado a un punto donde una coalición de mujeres y jóvenes debería tomar el poder, la verdadera alternancia democrática que nos está haciendo falta, de un modo urgente.
En fin. Mujeres.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 21-07-11.
(...)
Antes de entrar en materia, he de confesar que estoy enamorado de todas las mujeres, de una mas que de las otras, sin excluir a ninguna, las altas y esbeltas, las gruesas y no tanto, las que están grávidas y las que no, las jóvenes y no tan jóvenes, las que se dedican a la vida política --iba a decir pública, pero tiene otras connotaciones-- y las que viven mas discretamente en el ámbito civil. Un médico amigo me dijo una vez que yo era un poco Edipo, pero yo creo que mi sincera admiración por lo femenino está anclada en la observación de la historia, el teatro, la literatura y la política.
Será por eso que, al observar un suceso como el que nos ocupa, no puedo dejar de reflexionar sobre el papel de la mujer en su desenlace. La mujer de César, le aconsejó, el día de su asesinato, que no fuera al Senado, porque había hecho eviscerar a una gallina y el augur le había advertido del peligro letal que corría su marido. César no hizo caso a su mujer, fue al senado, y allí fue acuchillado por sus amigos mas queridos.
En esta ocasión, la de nuestro sujeto dimisionario de Heliópolis, tengo una fuerte intuición de que la decisión última de este algo rocambolesco episodio, hay que apuntarla en la cuenta de la mujer del César, que, en este caso, ha impuesto su criterio por encima del poderoso aparato partidario y el marrullero arreglador jurídico que habían enviado aquí para que los distintos imputados aceptaran el pago de una multa que los eximía de juicio.
Con su actitud de hacer caso a su mujer, y no a sus compañeros de partido, en mi opinión, nuestro César ha demostrado mayor sentido común que aquel asesinado por Bruto, de cuyo matador Marco Antonio dijo, repetidas veces, en el discurso que siguió al magnicidio, que era un hombre honrado. Lo mismo que estamos oyendo ahora con insistencia de nuestro César dimitido, pero vivo.
Digo esto desde la convicción de que las mujeres y los hombres, no somos iguales. Ellas son mejores. Otra cosa es que debamos tener iguales derechos, que ellas todavía no tienen. No hay mas que ver el censo de la política, el género de quienes la practican, para darse cuenta de que todas las desventuras que nos afligen, en buena parte imputables al fracaso de la política en la conducción del mundo, son un fracaso de género, de los hombres, que son, mayoritariamente, quienes ejercen el poder político.
Esta no es una afirmación gratuita, aunque puede que esté marcada por mis preferencias personales, está basada en la observación. Una de las mujeres mas poderosas del mundo, a la vez mas consciente de su feminidad, es Lagarde, la actual gerente del FMI, que sustituyó a DSK, ya saben porqué.
Esta mujer poderosa dice un par de cosas, en una entrevista que publicó un dominical recientemente, que no me pasaron desapercibidas. Una de ellas, que las relaciones internacionales, a nivel financiero, organizativo, político, están demasiado marcadas por la testosterona, por los desahogos hormonales. Cuando le piden que defina la condición femenina, Lagarde dice que las mujeres son como las bolsitas de té, que cuando las sumergen en el agua emerge toda su fuerza. Es decir, ellas son las fuertes, no se si porque la necesidad de supervivencia en un mundo de hombres las hace así.
No todas las mujeres poderosas son como Lagarde. Algunas, reproducen el papel masculino en sus actuaciones públicas. Estoy pensando en Tatcher, en Cospedal, en Merkel, en Barberá.
Angela Merkel, ahora enmerdada en una política populista que agrada a una parte de su electorado que dice estar cansado de la solidaridad con los países del Sur, no me parece que piense como Lagarde.
Alguien debería recordar a esos electores que están condicionando, bajo la batuta de Merkel, la política de la Unión, que, de no ser por la solidaridad exterior, en su país todavía estarían recogiendo cascotes del solar en que quedó convertido tras la gran guerra, y que la financiación de la reunificación alemana después de la caída del Muro de Berlín, se financió en gran parte con recursos que se restaron a los países ibéricos, por no hablar de que la deuda actual de los países del sur, ha de ponerse en una balanza donde se pese también cuanto de las exportaciones alemanas a esos países ha contribuido al saneamiento de las cuentas germanas.
Quiere esto decir que, al igual que los hombres y las mujeres no somos iguales, las mujeres tampoco son iguales entre si. Pero hay un hecho incontestable. Puesto que el poder es esencialmente masculino, y la situación actual de nuestro mundo mas cercano
es una consecuencia, básicamente, de errores estratégicos en el uso de ese poder, algunos pensamos que las mujeres, en general, aunque haya otras en particular que imitan el rol masculino, son mas capaces, mas sensibles, y mas fuertes que los varones.
Como se ha reconocido este hecho en muchos países pobres, las agencias de ayuda al desarrollo les confían a ellas las tareas vinculadas al crecimiento económico, y en Rusia, el sesenta por ciento de la población, las mujeres, llevan el peso en un país donde buena parte de los hombres se dedican al vodka.
Tal vez en Europa hemos llegado a un punto donde una coalición de mujeres y jóvenes debería tomar el poder, la verdadera alternancia democrática que nos está haciendo falta, de un modo urgente.
En fin. Mujeres.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 21-07-11.
miércoles, 20 de julio de 2011
CAMPS
Adiós, Camps.
(No se puede ser mas conciso, creo)
En fin. Camps.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 20-07-11.
(No se puede ser mas conciso, creo)
En fin. Camps.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 20-07-11.
SUEÑOS
"He soñado que bajaba al Maravillas a las seis de la mañana, lo que es del todo improbable, porque a esas horas aún no estoy en la calle, y además, el bar está cerrado. En el sueño, he contado a quien ha querido escucharme los sueños sucesivos que me han inducido esta noche un descanso inquieto y un despertar abrupto.
(...)
--He soñado con una película que no he visto, cuyo título desconozco. En el sueño, un científico estadounidense viaja a Berlín con su mujer, para participar en una reunión de la comunidad científica sobre Biotecnología. Cuando van a instalarse en el hotel, se da cuenta de que ha olvidado su maletín, con su documentación, en el carrito de equipajes. Toma un taxi para intentar recuperar el maletín perdido, pero un accidente de tráfico provoca que el taxi se precipite en uno de los dos ríos berlineses, no se si el Spree o el Havel, y aunque la taxista salva a su cliente de morir ahogado, va a parar a un hospital donde permanece cuatro días en coma.
La trama continua a partir de ese arranque, contando las vicisitudes de alguien que, sin documentación y casi sin memoria, intenta reivindicar lo que el cree que es su identidad, pero se encuentra con un muro conspirativo que se lo impide.
Tienes la sensación de que el protagonista es, efectivamente, víctima de una conspiración urdida por poderes desconocidos, pero al final, descubres, junto con el personaje, que, si bien es cierto que es una víctima de una trama conspirativa, el también ha sido parte de esa trama que, además de ser víctima, es verdugo.
Es un poco inquietante que uno pueda ser víctima y verdugo a la vez. Al margen del contenido de este sueño, recuerdo el artículo de Millás que cité en la última entrada, en el que lanzaba una mirada a víctimas y verdugos de la crisis de deuda en la que chapoteamos todos. Su punto de vista es que víctimas y verdugos son categorías claramente diferenciadas. Se puede estar de acuerdo con ese punto de vista, o con el que se desprende de la historia de la película soñada pero, en todo caso, es una idea que invita a la reflexión. --Tu que opinas?, le he preguntado a Tony, el jefe del Maravillas, en el sueño.
--Yo nunca voy al cine.
El sueño de la película, concluyó en el vestíbulo del Cine D'Or. Allí, unos carteles anuncian que el próximo lunes proyectan 'Tokyo Blues', basada en el libro de Murakami. Esa no me la voy a perder. La voy a ver de verdad.
--Anda, pon una cerveza de esas del Sur, del tipo Gran Reserva, que el otro dí me la dio un amigo a probar y está estupenda.
--No tengo de esas. Las hacen de arroz.
--¿Que dices?
--La mejor cerveza la inventaron los egipcios. Los vikingos, que viajaban mucho, la trajeron a Europa.
--¿Como que los egipcios?
--Hace por lo menos tres mil años, el cereal que almacenaban en un silo se mojó, fermentó, y así nació la cerveza.
--Y tu, ¿como sabes tanto de cerveza y tan poco de cine?.
--Es mi oficio. El tuyo, por lo que veo, tiene que ver con los sueños.
--Tu conocimiento del origen de la cerveza me hace recordar que otra civilización mas antigua aún, los persas --he visto arte persa de seis mil años de antigüedad--
ya conocía los usos del petróleo, creo que lo he dicho en el blog alguna vez. Si bien los egipcios usaban petróleo para los embalsamamientos, Marco Polo dejó escrito
que otras culturas ya conocían ese recurso. Vio las caravanas de camellos cargadas con petróleo, procedentes de Persia?, en dirección a Bagdad, donde se empleaba para alimentar las lámparas de aquella civilización en su época de mayor esplendor.
No sería petróleo refinado, claro, sino algo parecido a lo que soñé anoche, un lago de brea en Trinidad-Tobago, un lugar del Caribe donde las mujeres trinitarias, con ocasión del carnaval, restriegan sus traseros contra los genitales masculinos en una danza que es la mas transgresora que he visto nunca, ni siquiera en sueños.
Pero el sueño mas perturbador e inquietante que tuve anoche, el que tal vez ha causado que haya tenido un descanso inquieto y un despertar abrupto, fue el que me visitó, apenas iniciado el primer ciclo del sueño. Vi, con una claridad sorprendente, como si fuera real, el cuerpo desnudo de mi vecina de enfrente, tras la ventana iluminada y entreabierta de su cocina, mientras me detenía un momento para tirar a la basura las colillas apagadas del cenicero.
Tengo la sensación de que esa visión onírica me ha producido una erección nocturna prolongada, y un despertar abrupto y prematuro bajo los efectos del priapismo matinal, que un escritor de Tomelloso llamó, de un modo muy castizo, 'la fuerza del orín'."
En fin. Sueños.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 20-07-11.
(...)
--He soñado con una película que no he visto, cuyo título desconozco. En el sueño, un científico estadounidense viaja a Berlín con su mujer, para participar en una reunión de la comunidad científica sobre Biotecnología. Cuando van a instalarse en el hotel, se da cuenta de que ha olvidado su maletín, con su documentación, en el carrito de equipajes. Toma un taxi para intentar recuperar el maletín perdido, pero un accidente de tráfico provoca que el taxi se precipite en uno de los dos ríos berlineses, no se si el Spree o el Havel, y aunque la taxista salva a su cliente de morir ahogado, va a parar a un hospital donde permanece cuatro días en coma.
La trama continua a partir de ese arranque, contando las vicisitudes de alguien que, sin documentación y casi sin memoria, intenta reivindicar lo que el cree que es su identidad, pero se encuentra con un muro conspirativo que se lo impide.
Tienes la sensación de que el protagonista es, efectivamente, víctima de una conspiración urdida por poderes desconocidos, pero al final, descubres, junto con el personaje, que, si bien es cierto que es una víctima de una trama conspirativa, el también ha sido parte de esa trama que, además de ser víctima, es verdugo.
Es un poco inquietante que uno pueda ser víctima y verdugo a la vez. Al margen del contenido de este sueño, recuerdo el artículo de Millás que cité en la última entrada, en el que lanzaba una mirada a víctimas y verdugos de la crisis de deuda en la que chapoteamos todos. Su punto de vista es que víctimas y verdugos son categorías claramente diferenciadas. Se puede estar de acuerdo con ese punto de vista, o con el que se desprende de la historia de la película soñada pero, en todo caso, es una idea que invita a la reflexión. --Tu que opinas?, le he preguntado a Tony, el jefe del Maravillas, en el sueño.
--Yo nunca voy al cine.
El sueño de la película, concluyó en el vestíbulo del Cine D'Or. Allí, unos carteles anuncian que el próximo lunes proyectan 'Tokyo Blues', basada en el libro de Murakami. Esa no me la voy a perder. La voy a ver de verdad.
--Anda, pon una cerveza de esas del Sur, del tipo Gran Reserva, que el otro dí me la dio un amigo a probar y está estupenda.
--No tengo de esas. Las hacen de arroz.
--¿Que dices?
--La mejor cerveza la inventaron los egipcios. Los vikingos, que viajaban mucho, la trajeron a Europa.
--¿Como que los egipcios?
--Hace por lo menos tres mil años, el cereal que almacenaban en un silo se mojó, fermentó, y así nació la cerveza.
--Y tu, ¿como sabes tanto de cerveza y tan poco de cine?.
--Es mi oficio. El tuyo, por lo que veo, tiene que ver con los sueños.
--Tu conocimiento del origen de la cerveza me hace recordar que otra civilización mas antigua aún, los persas --he visto arte persa de seis mil años de antigüedad--
ya conocía los usos del petróleo, creo que lo he dicho en el blog alguna vez. Si bien los egipcios usaban petróleo para los embalsamamientos, Marco Polo dejó escrito
que otras culturas ya conocían ese recurso. Vio las caravanas de camellos cargadas con petróleo, procedentes de Persia?, en dirección a Bagdad, donde se empleaba para alimentar las lámparas de aquella civilización en su época de mayor esplendor.
No sería petróleo refinado, claro, sino algo parecido a lo que soñé anoche, un lago de brea en Trinidad-Tobago, un lugar del Caribe donde las mujeres trinitarias, con ocasión del carnaval, restriegan sus traseros contra los genitales masculinos en una danza que es la mas transgresora que he visto nunca, ni siquiera en sueños.
Pero el sueño mas perturbador e inquietante que tuve anoche, el que tal vez ha causado que haya tenido un descanso inquieto y un despertar abrupto, fue el que me visitó, apenas iniciado el primer ciclo del sueño. Vi, con una claridad sorprendente, como si fuera real, el cuerpo desnudo de mi vecina de enfrente, tras la ventana iluminada y entreabierta de su cocina, mientras me detenía un momento para tirar a la basura las colillas apagadas del cenicero.
Tengo la sensación de que esa visión onírica me ha producido una erección nocturna prolongada, y un despertar abrupto y prematuro bajo los efectos del priapismo matinal, que un escritor de Tomelloso llamó, de un modo muy castizo, 'la fuerza del orín'."
En fin. Sueños.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 20-07-11.
lunes, 18 de julio de 2011
PERIÓDICOS
A menudo doy opiniones en el blog, que no han sido solicitadas, sobre los contenidos de la prensa escrita, que tal vez son demasiado exigentes porque, que le voy a hacer, creo tener una mente crítica. La mirada crítica sobre los acontecimientos del mundo, sobre quienes los cuentan, sobre su modo de contarlos, a veces desde posiciones ideológicas, otras con criterios profesionales, no debe implicar, siempre, una visión negativa, pues la actitud crítica lo mismo debe detenerse en aspectos mejorables, que en otros que merecen el elogio sincero.
Mira por donde, por dos euros de mierda, cayó en mis manos ayer un ejemplar de 'Levante' que, después de su lectura, me ha impulsado a dedicarle la entrada de hoy
pues la mayoría de sus contenidos merecen con justicia comentarios elogiosos.
(...)
El titular de la portada no puede ser mas actual. "El recorte de interinos en la Generalitat se extiende a los docentes y a los de Sanidad". Este tijeretazo confirma mis temores, expresados en la página 'Goteras', de que la franqueza del nuevo Conseller de Hacienda, Vela, el reconocimiento de la grave situación financiera de nuestras instituciones, pudiera ser el prologo de recortes salvajes en los servicios públicos.
Las páginas de opinión están habitadas por muchos artículos interesantes, comenzando por el Editorial, que se ocupa de los símbolos con goteras, un tema muy conectado con la página que escribí en el blog ya citada. El artículo de Matías Vallés, 'Camps está desnudo', me ha parecido excelente, una magnífica glosa del auto del juez Flors, muy completa y documentada, que también evoca algo que escribí en el blog en relación con el jurado que debe decidir sobre el sentido de la moda masculina del President.
Lo que pasa con esto de los regalos es que, si le preguntas a Tony, el jefe del Maravillas, que opina de los regalos a políticos, no le da ninguna importancia, y si un periodista profesional le pregunta por Camps a Celia Villalobos en 'La Noria', ella no responde, se limita a enumerar una supuesta lista de políticos socialistas
que han visitado los juzgados. Si le preguntan a Rajoy, ni eso. Permanece en un silencio muy gallego --lo de sepulcral es demasiado fúnebre.
Lo bueno del periódico del domingo viene cuando, agotadas las cuestiones de contenido mas o menos político, llegas a la 5 y te encuentras con dos artículos magistrales, por diferentes razones. Uno de Millás y otro de Gabriel Janer.
Millás, con la singularidad inimitable que lo caracteriza, reflexiona sobre las relaciones entre víctimas y verdugos en pleno chapoteo en la crisis de la deuda, y concluye con esta frase. 'Si nos van a estrangular, nos gustaría conocer al menos el nombre de pila del estrangulador, aunque para matarnos se ponga una capucha', lo que me recuerda mi afirmación de la página 'El poder de las escuchas', en el sentido de que no podemos evadirnos de los excesos de las relaciones de poder, porque casi nunca sabemos donde habita, ni quien es ese poder.
Pero el artículo que mas me ha impresionado, por su extrema sensibilidad humana y literaria, es el que dedica Gabriel Janer a glosar el libro de Josep M. Fuster, 'Gabriel y la vida', un texto dedicado por el autor a una reflexión sobre la vida partiendo de una tragedia personal, la muerte de su hijo en la carretera a consecuencia de un accidente provocado por un conductor bajo los efectos del alcohol y las drogas.
No me había dado cuenta, pero al revisar ese artículo para esta entrada, observo que se titula 'I floriran les roses', que me ha inspirado, de un modo inconsciente, la introducción a la página 'Rosas' que comienza así, 'Florecieron las rosas del camino...', lo que confirma la evidencia de las interacciones, a veces, voluntarias, otras automáticas, entre los contenidos del blog, y los de la prensa escrita.
Y ahora viene una declaración de desagravio a los meteorólogos que escriben en 'Levante' a los que he citado varias veces en el blog, en relación con asuntos del clima, y a los que siento haber tratado con demasiada dureza. Prueba de lo poco equilibrado de mis opiniones sobre ellos es el extraordinario artículo de Vicente Aupi, en la página 6, 'El olor de las tormentas', que es una magnifica síntesis de ciencia y lirismo, que proporciona una valiosa información que se nota que está expresada desde el amor a la naturaleza, y concluye con un reconocimiento positivo de las sinergias entre prensa e Internet, en el campo de la meteorología.
Por si fuera poco la extraordinaria calidad de los contenidos de 'Levante' del domingo, incluye un especial '75 años de la guerra civil', con un sentido estrictamente histórico, que cuenta la aventura vital de Isidro Guardia, un nonagenario al que he tenido el privilegio de conocer personalmente, y la decena de compañeros libertarios que le acompañaron en esos avatares, --uno de ellos de mi propia familia. Aquellos libertarios tenían claro que las formas jerárquicas de organización social eran el origen de los males de la sociedad de su época. Han transcurrido setenta y cinco años, y todos, libertarios o no, volvemos a tener la misma sensación.
Prescindo de glosar otros muchos contenidos del periódico del domingo que merecen ser elogiados, para no extenderme demasiado. No puedo dejar de citar el artículo de Javier Cuervo, en la última, 'Puntualidad y Plantón' que, bajo el epígrafe 'Artículos de Broma', ofrece la visión, siempre precisa, observadora, irónica, sintética, de Cuervo, uno de los periodistas mas 'serios' de la prensa escrita que nos traslada desde su disfraz bromista, una mirada sutil sobre la vida.
O sea, por dos euros de mierda,una demostración sobrada de talento y profesionalidad al alcance de cualquiera.
Otro día hablaré de las colaboraciones literarias del suplemento. Quim Monzó y compañía. Un lujo.
En fin. Periódicos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 18-07-11.
Mira por donde, por dos euros de mierda, cayó en mis manos ayer un ejemplar de 'Levante' que, después de su lectura, me ha impulsado a dedicarle la entrada de hoy
pues la mayoría de sus contenidos merecen con justicia comentarios elogiosos.
(...)
El titular de la portada no puede ser mas actual. "El recorte de interinos en la Generalitat se extiende a los docentes y a los de Sanidad". Este tijeretazo confirma mis temores, expresados en la página 'Goteras', de que la franqueza del nuevo Conseller de Hacienda, Vela, el reconocimiento de la grave situación financiera de nuestras instituciones, pudiera ser el prologo de recortes salvajes en los servicios públicos.
Las páginas de opinión están habitadas por muchos artículos interesantes, comenzando por el Editorial, que se ocupa de los símbolos con goteras, un tema muy conectado con la página que escribí en el blog ya citada. El artículo de Matías Vallés, 'Camps está desnudo', me ha parecido excelente, una magnífica glosa del auto del juez Flors, muy completa y documentada, que también evoca algo que escribí en el blog en relación con el jurado que debe decidir sobre el sentido de la moda masculina del President.
Lo que pasa con esto de los regalos es que, si le preguntas a Tony, el jefe del Maravillas, que opina de los regalos a políticos, no le da ninguna importancia, y si un periodista profesional le pregunta por Camps a Celia Villalobos en 'La Noria', ella no responde, se limita a enumerar una supuesta lista de políticos socialistas
que han visitado los juzgados. Si le preguntan a Rajoy, ni eso. Permanece en un silencio muy gallego --lo de sepulcral es demasiado fúnebre.
Lo bueno del periódico del domingo viene cuando, agotadas las cuestiones de contenido mas o menos político, llegas a la 5 y te encuentras con dos artículos magistrales, por diferentes razones. Uno de Millás y otro de Gabriel Janer.
Millás, con la singularidad inimitable que lo caracteriza, reflexiona sobre las relaciones entre víctimas y verdugos en pleno chapoteo en la crisis de la deuda, y concluye con esta frase. 'Si nos van a estrangular, nos gustaría conocer al menos el nombre de pila del estrangulador, aunque para matarnos se ponga una capucha', lo que me recuerda mi afirmación de la página 'El poder de las escuchas', en el sentido de que no podemos evadirnos de los excesos de las relaciones de poder, porque casi nunca sabemos donde habita, ni quien es ese poder.
Pero el artículo que mas me ha impresionado, por su extrema sensibilidad humana y literaria, es el que dedica Gabriel Janer a glosar el libro de Josep M. Fuster, 'Gabriel y la vida', un texto dedicado por el autor a una reflexión sobre la vida partiendo de una tragedia personal, la muerte de su hijo en la carretera a consecuencia de un accidente provocado por un conductor bajo los efectos del alcohol y las drogas.
No me había dado cuenta, pero al revisar ese artículo para esta entrada, observo que se titula 'I floriran les roses', que me ha inspirado, de un modo inconsciente, la introducción a la página 'Rosas' que comienza así, 'Florecieron las rosas del camino...', lo que confirma la evidencia de las interacciones, a veces, voluntarias, otras automáticas, entre los contenidos del blog, y los de la prensa escrita.
Y ahora viene una declaración de desagravio a los meteorólogos que escriben en 'Levante' a los que he citado varias veces en el blog, en relación con asuntos del clima, y a los que siento haber tratado con demasiada dureza. Prueba de lo poco equilibrado de mis opiniones sobre ellos es el extraordinario artículo de Vicente Aupi, en la página 6, 'El olor de las tormentas', que es una magnifica síntesis de ciencia y lirismo, que proporciona una valiosa información que se nota que está expresada desde el amor a la naturaleza, y concluye con un reconocimiento positivo de las sinergias entre prensa e Internet, en el campo de la meteorología.
Por si fuera poco la extraordinaria calidad de los contenidos de 'Levante' del domingo, incluye un especial '75 años de la guerra civil', con un sentido estrictamente histórico, que cuenta la aventura vital de Isidro Guardia, un nonagenario al que he tenido el privilegio de conocer personalmente, y la decena de compañeros libertarios que le acompañaron en esos avatares, --uno de ellos de mi propia familia. Aquellos libertarios tenían claro que las formas jerárquicas de organización social eran el origen de los males de la sociedad de su época. Han transcurrido setenta y cinco años, y todos, libertarios o no, volvemos a tener la misma sensación.
Prescindo de glosar otros muchos contenidos del periódico del domingo que merecen ser elogiados, para no extenderme demasiado. No puedo dejar de citar el artículo de Javier Cuervo, en la última, 'Puntualidad y Plantón' que, bajo el epígrafe 'Artículos de Broma', ofrece la visión, siempre precisa, observadora, irónica, sintética, de Cuervo, uno de los periodistas mas 'serios' de la prensa escrita que nos traslada desde su disfraz bromista, una mirada sutil sobre la vida.
O sea, por dos euros de mierda,una demostración sobrada de talento y profesionalidad al alcance de cualquiera.
Otro día hablaré de las colaboraciones literarias del suplemento. Quim Monzó y compañía. Un lujo.
En fin. Periódicos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 18-07-11.
domingo, 17 de julio de 2011
ROSAS
Florecieron las rosas del camino sin que ninguna mano humana las cultivara, alterara su color, alargara su ciclo de vida. ¿Porqué las llaman salvajes, si son, solo, flores libres?. Tal vez, porque los humanos confundimos a menudo la libertad con el salvajismo. Ayer estaba en la parada del bus cuando vi a lo lejos dos tipos que la emprendían a patadas con una papelera que nada les había hecho, mientras un viandante tomaba su móvil para llamar al departamento de jardinería, para que un jardinero uniformado interviniera en aquella conducta desordenada.
Luego pasó un joven que conducía una furgoneta, paró, y retiró de la calzada la papelera que aquellos energúmenos habían lanzado, solo por divertirse, al centro de la vía, con un evidente riesgo para los conductores.
¿Como podemos nombrar igual a las flores que crecen en libertad, y a los salvajes que no son libres, porque son cautivos de su propio salvajismo?
La vida de las rosas salvajes es efímera, enseguida se agostan ¿Porqué decimos eso, si mueren antes de que llegue agosto?. No sé. Me gusta el esplendor del rojo de las rosas salvajes, su color no manipulado por manos humanas y no me entristece que su floración sea efímera, porque la próxima primavera volverán a brotar, después de un largo período invernal.
(....)
"Las sociedades humanas que tenemos mas próximas están ahora entristecidas, aletargadas, porque a los jardineros responsables de los equilibrios sociales se les ha ido la mano, y la cosecha es ahora un conjunto de individuos pálidos, lívidos, sin conciencia aparente de su capacidad de renacimiento, pero una mirada a la historia de los hombres prueba que esas fases depresivas siempre son temporales, que a un ciclo de depresión le sucede, siempre, uno de renacimiento, y que nada hay en la existencia humana que dure siempre, ni el dolor,ni el amor, a condición de que nos esforcemos en acortar nuestro propio dolor, y en aceptar, sin estirarlo, lo efímero de los efectos milagrosos del amor humano.
Junto al color de las rosas salvajes, hay otro que me fascina. Anoche fue la noche de los siete museos abiertos en Heliópolis, y las treinta actividades callejeras, y tuve ocasión de contemplar una pintura renacentista. El rojo escarlata que domina esas pinturas, no lo he vuelto a ver en el arte de épocas posteriores. Se ve que los pintores renacentistas se llevaron con ellos el secreto de la mezcla que hacían en sus morteros para conseguirlo.
La ciudad estaba muy animada cuando salimos a la calle después de visionar en la filmoteca, 'Los Amantes', de Louis Mallé. A pesar del tiempo transcurrido desde que se estrenó este film, cuando estaba de moda que Buñuel y el cine francés se dedicaran a epatar la burguesía, los golpes de irónico humor del guión siguen igual de frescos, y esta especie de retrato de una clase social francesa, prolongado al final con una historia de amor que ahora parece muy ingenua, te provoca la sonrisa, sobre todo cuando Jeanne Moreau huye? con su joven amante.
La huída de la pareja, montada en un dos caballos que renquea lentamente al salir de la casa familiar ante la estupefacción del marido, el amante oficial de Moreau, y el servidor de la casa, es cualquier cosa menos una escapada heroica, y, me parece a mi, es el momento mas memorable de esta película.
Después, nos acercamos a la plaza de la Reina con la intención de cenar algo ligero, pero, que va, no hubo forma. Nos conformamos, sin problemas, con ocupar una mesa cerca de la puerta plateresca de la Catedral y tomar una cervezas con patatas fritas y cacahuetes. Seis, diez. La camarera me persiguió al levantarme, porque creía que le faltaba una moneda, que resultó estar debajo de un billete. Una vez me faltó un pico para la cuenta en otro sitio, pero le dije, con toda calma, al camarero, lo que falta se lo pides al falso sordo que se lo acaba de llevar.
Fuimos a continuación a la plaza de la Almoina, donde daban un magnífico espectáculo, una buena síntesis de marionetas, teatro y música, que hizo las delicias del público. Cada muñeco que presentaban, llevaba varias prendas superpuestas, y estaba descabezado, la cabeza era la de los actores en cada número, y le quitaban la piel de ropa del número anterior, con una velocidad de vértigo. La música que sonaba era propia del mejor DJ. Juque Box, creo que se llama el invento. Una lección de como aprovechar lo mejor de cada género, para conseguir un resultado que arrastró al público al entusiasmo.
Luego nos acercamos a la plaza de la Virgen, vimos una danzas africanas y a un grupo aficionado de folclore rumano, pero nos marchamos antes de que terminaran, porque teníamos curiosidad por ver lo que había en la plaza del Ayuntamiento.
Allí no había nada. Unas proyecciones de vídeo, técnicamente detestables. A quien se le ocurre organizar una proyección gigante sobre una fachada irregular, llena de columnas y capiteles. La próxima vez, una pantalla grande y ya está. Por lo demás, la plaza aparecía en casi completa oscuridad con lo que el ambiente, en lugar de festivo, parecía funeral.
En general, lo mejor de este embrión de noche en blanco, Nit de Juliol, ha sido la gente que llenaba las calles y plazas de la ciudad, el azul del cielo entre dos luces, antes de que oscureciera del todo, y las torres de nuestros edificios venerables, muy bien iluminadas, que le daban a la ciudad nocturna un aire florentino.
Cuando llegaba a nuestros oídos el lejano eco de los fuegos artificiales que se disparaban junto al mar, tomamos un autobús de la línea nocturna y llegamos a casa, donde, por fin, pudimos cenar, aunque de modo frugal."
En fin. Rosas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 17-07-11.
Luego pasó un joven que conducía una furgoneta, paró, y retiró de la calzada la papelera que aquellos energúmenos habían lanzado, solo por divertirse, al centro de la vía, con un evidente riesgo para los conductores.
¿Como podemos nombrar igual a las flores que crecen en libertad, y a los salvajes que no son libres, porque son cautivos de su propio salvajismo?
La vida de las rosas salvajes es efímera, enseguida se agostan ¿Porqué decimos eso, si mueren antes de que llegue agosto?. No sé. Me gusta el esplendor del rojo de las rosas salvajes, su color no manipulado por manos humanas y no me entristece que su floración sea efímera, porque la próxima primavera volverán a brotar, después de un largo período invernal.
(....)
"Las sociedades humanas que tenemos mas próximas están ahora entristecidas, aletargadas, porque a los jardineros responsables de los equilibrios sociales se les ha ido la mano, y la cosecha es ahora un conjunto de individuos pálidos, lívidos, sin conciencia aparente de su capacidad de renacimiento, pero una mirada a la historia de los hombres prueba que esas fases depresivas siempre son temporales, que a un ciclo de depresión le sucede, siempre, uno de renacimiento, y que nada hay en la existencia humana que dure siempre, ni el dolor,ni el amor, a condición de que nos esforcemos en acortar nuestro propio dolor, y en aceptar, sin estirarlo, lo efímero de los efectos milagrosos del amor humano.
Junto al color de las rosas salvajes, hay otro que me fascina. Anoche fue la noche de los siete museos abiertos en Heliópolis, y las treinta actividades callejeras, y tuve ocasión de contemplar una pintura renacentista. El rojo escarlata que domina esas pinturas, no lo he vuelto a ver en el arte de épocas posteriores. Se ve que los pintores renacentistas se llevaron con ellos el secreto de la mezcla que hacían en sus morteros para conseguirlo.
La ciudad estaba muy animada cuando salimos a la calle después de visionar en la filmoteca, 'Los Amantes', de Louis Mallé. A pesar del tiempo transcurrido desde que se estrenó este film, cuando estaba de moda que Buñuel y el cine francés se dedicaran a epatar la burguesía, los golpes de irónico humor del guión siguen igual de frescos, y esta especie de retrato de una clase social francesa, prolongado al final con una historia de amor que ahora parece muy ingenua, te provoca la sonrisa, sobre todo cuando Jeanne Moreau huye? con su joven amante.
La huída de la pareja, montada en un dos caballos que renquea lentamente al salir de la casa familiar ante la estupefacción del marido, el amante oficial de Moreau, y el servidor de la casa, es cualquier cosa menos una escapada heroica, y, me parece a mi, es el momento mas memorable de esta película.
Después, nos acercamos a la plaza de la Reina con la intención de cenar algo ligero, pero, que va, no hubo forma. Nos conformamos, sin problemas, con ocupar una mesa cerca de la puerta plateresca de la Catedral y tomar una cervezas con patatas fritas y cacahuetes. Seis, diez. La camarera me persiguió al levantarme, porque creía que le faltaba una moneda, que resultó estar debajo de un billete. Una vez me faltó un pico para la cuenta en otro sitio, pero le dije, con toda calma, al camarero, lo que falta se lo pides al falso sordo que se lo acaba de llevar.
Fuimos a continuación a la plaza de la Almoina, donde daban un magnífico espectáculo, una buena síntesis de marionetas, teatro y música, que hizo las delicias del público. Cada muñeco que presentaban, llevaba varias prendas superpuestas, y estaba descabezado, la cabeza era la de los actores en cada número, y le quitaban la piel de ropa del número anterior, con una velocidad de vértigo. La música que sonaba era propia del mejor DJ. Juque Box, creo que se llama el invento. Una lección de como aprovechar lo mejor de cada género, para conseguir un resultado que arrastró al público al entusiasmo.
Luego nos acercamos a la plaza de la Virgen, vimos una danzas africanas y a un grupo aficionado de folclore rumano, pero nos marchamos antes de que terminaran, porque teníamos curiosidad por ver lo que había en la plaza del Ayuntamiento.
Allí no había nada. Unas proyecciones de vídeo, técnicamente detestables. A quien se le ocurre organizar una proyección gigante sobre una fachada irregular, llena de columnas y capiteles. La próxima vez, una pantalla grande y ya está. Por lo demás, la plaza aparecía en casi completa oscuridad con lo que el ambiente, en lugar de festivo, parecía funeral.
En general, lo mejor de este embrión de noche en blanco, Nit de Juliol, ha sido la gente que llenaba las calles y plazas de la ciudad, el azul del cielo entre dos luces, antes de que oscureciera del todo, y las torres de nuestros edificios venerables, muy bien iluminadas, que le daban a la ciudad nocturna un aire florentino.
Cuando llegaba a nuestros oídos el lejano eco de los fuegos artificiales que se disparaban junto al mar, tomamos un autobús de la línea nocturna y llegamos a casa, donde, por fin, pudimos cenar, aunque de modo frugal."
En fin. Rosas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 17-07-11.
sábado, 16 de julio de 2011
EL PODER DE LAS ESCUCHAS
Las viejas películas de 007, construidas alrededor de los relatos de Ian Fleming, hacían uso en sus puestas en escena del precario atrezzo de la época, con multitud de artilugios de apariencia mecánica con lucecitas y unos aparatos de escucha y defensa de maletín que recordaban las cestas, con vajilla y cubiertos ordenaditos que servían para ir de merienda al campo.
Vistos desde la distancia temporal, aquellos aparatos de alta tecnología del M16, el departamento de inteligencia británico, parecen mas próximos al cine mudo que a la sociedad tecnológica que trataban de evocar, y producen mucha risa.
Mas convincentes son los relatos cinematográficos de anticipación basados en la escritura de George Orwell, o Bradbury, en los que una pantalla de televisión doméstica, interactiva, controla los aspectos mas privados de la vida de la audiencia.
En el primer caso, 007, se trataría de las escuchas del poder, practicadas por los
órganos mas discretos y secretos de los Estados, mientras que Orwell y Bradbury hicieron mas énfasis en el poder de las escuchas que, como se ha visto ahora con el caso de los medios propiedad de Rupert Murdoch, tiene un alcance mucho mas amplio.
(...)
En nuestro caso, estamos comprobando desde hace décadas que las escuchas del poder están limitadas por el filtro judicial, por eso Nasseiro, cuando fue tesorero del Partido Popular, se libró y libró a su partido del marrón de la financiación ilegal, porque sus habilidosos abogados supieron hacer impugnar, por defectos de forma, las pruebas obtenidas por ese medio.
Las formas judiciales, en las que el rufián Trillo es un experto, están, al parecer, al mismo nivel que las formas artísticas y pueden transformar un pedazo de arcilla en una obra de arte. Ahora, nuestro President, al parecer, ha renovado su inscripción en el colegio de abogados, porque alguien le ha hecho caer en la cuenta de que su condición de togado le proporcionará un tratamiento formal mas noble ante el jurado que ha de decidir sobre su sentido de la moda masculina. También en este caso han habido escuchas que cada parte ha intentado usar en su beneficio.
Todas esas escuchas, relacionadas con el buen, o mal uso, del poder político, han sido practicadas desde órganos de poder sometidos a control, pero ahora resulta que corporaciones de comunicación, ajenas a los poderes clásicos, legislativo, ejecutivo, judicial, han tendido una red de escuchas tan amplia e indiscriminada, que las fantasías de Fleming, Orwell o Bradbury, disminuyen de tamaño anticipador,
ante la realidad Murdochiana. Esas escuchas, han podido tener un alcance tremendo, como el de contribuir a encumbrar o a defenestrar carreras personales en los niveles mas altos de la política.
Ingenuo de mi, he sostenido en varias páginas del blog que los medios escritos ya no crean opinión, que han dejado de influir en la sociedad, y ahora resulta que el News of The World, no solo trataba de influir con sus noticias en la opinión, sino que con sus escuchas las creaba, las construía, las modelaba como el artista que crea a partir de la arcilla una realidad antes inexistente. Una obra de arte, de no ser porque el material que usaba eran sentimientos y emociones humanas que no le pertenecían.
El poder, siempre el poder. No podemos librarnos de los excesos de las relaciones de poder porque, en realidad, pocas veces sabemos donde está, desde donde se ejerce.
Cuando un político deja el gobierno, como es el caso del repelente José María Aznar --A mi me repele desde siempre, aunque no se porqué. No me gusta su rostro, su sonrisa, ni sus palabras, aunque es evidente que a otros, si-- parece que abandonó las parcelas del poder, que se retiró a un territorio mas contemplativo, pero irse a trabajar con Murdoch, en este caso, ahora, a la luz de los hechos, no parece un abandono, sino un paseo por las cloacas, se deja de estar en las estructuras donde se realizan las escuchas del poder, para residir en un territorio, al parecer, mas extenso e influyente, el del poder de las escuchas, desde donde lo mismo se defenestra a un político laborista, que se encumbra a otro afín.
En fin. Escuchas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 17-07-11.
Vistos desde la distancia temporal, aquellos aparatos de alta tecnología del M16, el departamento de inteligencia británico, parecen mas próximos al cine mudo que a la sociedad tecnológica que trataban de evocar, y producen mucha risa.
Mas convincentes son los relatos cinematográficos de anticipación basados en la escritura de George Orwell, o Bradbury, en los que una pantalla de televisión doméstica, interactiva, controla los aspectos mas privados de la vida de la audiencia.
En el primer caso, 007, se trataría de las escuchas del poder, practicadas por los
órganos mas discretos y secretos de los Estados, mientras que Orwell y Bradbury hicieron mas énfasis en el poder de las escuchas que, como se ha visto ahora con el caso de los medios propiedad de Rupert Murdoch, tiene un alcance mucho mas amplio.
(...)
En nuestro caso, estamos comprobando desde hace décadas que las escuchas del poder están limitadas por el filtro judicial, por eso Nasseiro, cuando fue tesorero del Partido Popular, se libró y libró a su partido del marrón de la financiación ilegal, porque sus habilidosos abogados supieron hacer impugnar, por defectos de forma, las pruebas obtenidas por ese medio.
Las formas judiciales, en las que el rufián Trillo es un experto, están, al parecer, al mismo nivel que las formas artísticas y pueden transformar un pedazo de arcilla en una obra de arte. Ahora, nuestro President, al parecer, ha renovado su inscripción en el colegio de abogados, porque alguien le ha hecho caer en la cuenta de que su condición de togado le proporcionará un tratamiento formal mas noble ante el jurado que ha de decidir sobre su sentido de la moda masculina. También en este caso han habido escuchas que cada parte ha intentado usar en su beneficio.
Todas esas escuchas, relacionadas con el buen, o mal uso, del poder político, han sido practicadas desde órganos de poder sometidos a control, pero ahora resulta que corporaciones de comunicación, ajenas a los poderes clásicos, legislativo, ejecutivo, judicial, han tendido una red de escuchas tan amplia e indiscriminada, que las fantasías de Fleming, Orwell o Bradbury, disminuyen de tamaño anticipador,
ante la realidad Murdochiana. Esas escuchas, han podido tener un alcance tremendo, como el de contribuir a encumbrar o a defenestrar carreras personales en los niveles mas altos de la política.
Ingenuo de mi, he sostenido en varias páginas del blog que los medios escritos ya no crean opinión, que han dejado de influir en la sociedad, y ahora resulta que el News of The World, no solo trataba de influir con sus noticias en la opinión, sino que con sus escuchas las creaba, las construía, las modelaba como el artista que crea a partir de la arcilla una realidad antes inexistente. Una obra de arte, de no ser porque el material que usaba eran sentimientos y emociones humanas que no le pertenecían.
El poder, siempre el poder. No podemos librarnos de los excesos de las relaciones de poder porque, en realidad, pocas veces sabemos donde está, desde donde se ejerce.
Cuando un político deja el gobierno, como es el caso del repelente José María Aznar --A mi me repele desde siempre, aunque no se porqué. No me gusta su rostro, su sonrisa, ni sus palabras, aunque es evidente que a otros, si-- parece que abandonó las parcelas del poder, que se retiró a un territorio mas contemplativo, pero irse a trabajar con Murdoch, en este caso, ahora, a la luz de los hechos, no parece un abandono, sino un paseo por las cloacas, se deja de estar en las estructuras donde se realizan las escuchas del poder, para residir en un territorio, al parecer, mas extenso e influyente, el del poder de las escuchas, desde donde lo mismo se defenestra a un político laborista, que se encumbra a otro afín.
En fin. Escuchas.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 17-07-11.
viernes, 15 de julio de 2011
NACIONALIZAR
Ayer bajé al Maravillas a una hora tan temprana que el periódico del día todavía no estaba allí. Después de tomar un café con leche y un zumo de tomate con tabasco --dos cincuenta-- por aquello de hacer tiempo, al regreso adquirí en el quiosco un ejemplar de 'Levante', que llevaba en primera, en tipos del dieciocho, la noticia de que la CAM, una entidad financiera, Caja de Ahorros del Mediterráneo, con sede en Alicante, será nacionalizada al fallar sus expectativas de supervivencia por otros medios.
Mi viejo Espasa pre democrático describe nacionalizar como 'Hacer que pasen a depender del gobierno de la nación, propiedades industriales o servicios explotados por particulares. Como la CAM estaba en manos de particulares, muy particulares, conviene hacer algo de historia para entender mejor lo que parece, simplemente, una noticia financiera, pero que tiene mucha mas enjundia.
(...)
Tenemos a una parte de la Armada Española, con unas dotaciones muy profesionales, en los mares de Somalia, para evitar que nos secuestren los atunes, que, por cierto, no son nuestros, pero hace mas de una década se produjo una operación filibustera de desembarco de los dos partidos mayoritarios en los consejos de administración de unas entidades tranquilas, muy conservadoras, que se dedicaban a administrar nuestros ahorros con criterios de prudencia.
Aquellos pacíficos consejos de administración no se resistieron demasiado a la usurpación de sus funciones por una tropa que los secuestró sin apenas violencia, aunque luego se dio al abandono de la gestión racional y comenzó a practicar una política de sangre y fuego, ajena a las recomendaciones del Banco de España, que no se en que estaría pensando, basada en los caprichos de unos gilipollas, que no lo serían tanto, pues apenas se acomodaron en sus sillones comenzaron a subirse el sueldo, y en las sedes de los partidos grandes había hostias por alcanzar esos asientos.
En alguna página del blog, con motivo de las ocasiones frustradas de fusión de la CAM, opiné que esas operaciones eran, sobre todo, cuestión de sillones. Si los ejecutivos de la entidad en trance de fusión no veían claro el futuro de sus sillones, se opondrían a la fusión, como así fue, aunque su alternativa mas probable fuera cederlos entonces, o esperar a cederlos mas tarde, en alguna operación de salvamento o rescate. Por cierto, la palabra rescate, suena a secuestro, no?, lo que parece que va en favor de mi mirada histórica sobre la entidad en trance de nacionalización.
Me tocan un poco las pelotas los opinantes que insisten, una y otra vez, en que los casos de conductas impropias entre los políticos no deben ser generalizados, que una actitud minoritaria no debe manchar el honor extendido de nuestra democracia. Vale, pero cuando han sido --es un hecho-- las propias estructuras de los dos partidos mas grandes de esa democracia las que han propiciado el secuestro de todo un sector financiero, el de las cajas de ahorro, para mangonearlas a su antojo, con el resultado de que ahora seremos todos los curritos los que deberemos pagar los costes de esa nacionalización, la cosa cobra el aspecto de una estafa generalizada.
Eso si, una estafa muy democrática, porque ningún nacional se quedará libre de que se paguen con sus impuestos los trapicheos de los parques temáticos, de la financiación especulativa, o los salarios siderales, como el de Oliva, que no está en CAM, creo que está en Bankia, pero es un ejemplo muy representativo de como un inútil, que no serviría para nada en la empresa privada, se lleva un pastón por el único mérito de formar parte de un partido político y haber maniobrado con habilidad para conseguir un sillón que apenas puede contener su culo de inepto.
Esta nacionalización merece, pues, dos precisiones, no se hace cargo el Estado de unos negocios financieros que estaban en manos de unos particulares cualquiera, porque esos particulares, los que controlaban esas entidades a través de sus consejos de administración, eran políticas nombrados, no solo, pero si con carácter mayoritario, por los dos partidos que controlan la vida política nacional.
Tampoco se trata de una nacionalización al uso, sino de la reparación de un secuestro que nunca debió producirse, y que el Banco de España no debió autorizar. Si hay que pagar, ahora, se paga, pero Fernández Ordóñez y los responsables de los partidos mayoritarios en el momento en que se produjo aquel secuestro, deberían contribuir algo mas que la gente de a pie, o dimitir, aunque sea para hacer frente a sus directas responsabilidades, con carácter retroactivo.
Amén.
En fin. Nacionalizar.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 16-07-11.
Mi viejo Espasa pre democrático describe nacionalizar como 'Hacer que pasen a depender del gobierno de la nación, propiedades industriales o servicios explotados por particulares. Como la CAM estaba en manos de particulares, muy particulares, conviene hacer algo de historia para entender mejor lo que parece, simplemente, una noticia financiera, pero que tiene mucha mas enjundia.
(...)
Tenemos a una parte de la Armada Española, con unas dotaciones muy profesionales, en los mares de Somalia, para evitar que nos secuestren los atunes, que, por cierto, no son nuestros, pero hace mas de una década se produjo una operación filibustera de desembarco de los dos partidos mayoritarios en los consejos de administración de unas entidades tranquilas, muy conservadoras, que se dedicaban a administrar nuestros ahorros con criterios de prudencia.
Aquellos pacíficos consejos de administración no se resistieron demasiado a la usurpación de sus funciones por una tropa que los secuestró sin apenas violencia, aunque luego se dio al abandono de la gestión racional y comenzó a practicar una política de sangre y fuego, ajena a las recomendaciones del Banco de España, que no se en que estaría pensando, basada en los caprichos de unos gilipollas, que no lo serían tanto, pues apenas se acomodaron en sus sillones comenzaron a subirse el sueldo, y en las sedes de los partidos grandes había hostias por alcanzar esos asientos.
En alguna página del blog, con motivo de las ocasiones frustradas de fusión de la CAM, opiné que esas operaciones eran, sobre todo, cuestión de sillones. Si los ejecutivos de la entidad en trance de fusión no veían claro el futuro de sus sillones, se opondrían a la fusión, como así fue, aunque su alternativa mas probable fuera cederlos entonces, o esperar a cederlos mas tarde, en alguna operación de salvamento o rescate. Por cierto, la palabra rescate, suena a secuestro, no?, lo que parece que va en favor de mi mirada histórica sobre la entidad en trance de nacionalización.
Me tocan un poco las pelotas los opinantes que insisten, una y otra vez, en que los casos de conductas impropias entre los políticos no deben ser generalizados, que una actitud minoritaria no debe manchar el honor extendido de nuestra democracia. Vale, pero cuando han sido --es un hecho-- las propias estructuras de los dos partidos mas grandes de esa democracia las que han propiciado el secuestro de todo un sector financiero, el de las cajas de ahorro, para mangonearlas a su antojo, con el resultado de que ahora seremos todos los curritos los que deberemos pagar los costes de esa nacionalización, la cosa cobra el aspecto de una estafa generalizada.
Eso si, una estafa muy democrática, porque ningún nacional se quedará libre de que se paguen con sus impuestos los trapicheos de los parques temáticos, de la financiación especulativa, o los salarios siderales, como el de Oliva, que no está en CAM, creo que está en Bankia, pero es un ejemplo muy representativo de como un inútil, que no serviría para nada en la empresa privada, se lleva un pastón por el único mérito de formar parte de un partido político y haber maniobrado con habilidad para conseguir un sillón que apenas puede contener su culo de inepto.
Esta nacionalización merece, pues, dos precisiones, no se hace cargo el Estado de unos negocios financieros que estaban en manos de unos particulares cualquiera, porque esos particulares, los que controlaban esas entidades a través de sus consejos de administración, eran políticas nombrados, no solo, pero si con carácter mayoritario, por los dos partidos que controlan la vida política nacional.
Tampoco se trata de una nacionalización al uso, sino de la reparación de un secuestro que nunca debió producirse, y que el Banco de España no debió autorizar. Si hay que pagar, ahora, se paga, pero Fernández Ordóñez y los responsables de los partidos mayoritarios en el momento en que se produjo aquel secuestro, deberían contribuir algo mas que la gente de a pie, o dimitir, aunque sea para hacer frente a sus directas responsabilidades, con carácter retroactivo.
Amén.
En fin. Nacionalizar.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 16-07-11.
jueves, 14 de julio de 2011
LA PLAYA
La entrada de ayer la escribí de forma algo precipitada, porque se me hacía tarde para pasar la mañana en la playa de El Saler. Ahora la releo y descubro las ventajas de la prisa en la escritura, porque observo que la ausencia de apresuramiento, en mi caso, da como resultado una serie de rodeos, meandros, recovecos y otros entretenimientos elípticos que no siempre contribuyen a la claridad y la concisión del texto, como me está sucediendo ahora mismo.
El tiempo puede convertir en estilo personal ese defecto, pero no estoy seguro de que sea el caso, así que me voy a centrar en el tema de hoy. La Playa.
(...)
"Estar en la playa, esa frontera entre el mundo húmedo y el mundo seco, ofrece un universo de experiencias sensoriales muy rico y variado. La suave y delicada caricia de las mínimas gotas de mar que la brisa de levante lleva hasta tu rostro, la sensación casi sólida que sientes al aspirar el aire yodado, o la presencia de una variada exposición de anatomías de cuerpos humanos, liberados del yugo textil, de los que surge un intrincado aroma, mezcla de sudor corporal y cremas protectoras de la radiación solar, que aporta una variedad de perfumes casi infinita.
Miras a las dunas fijadas por la vegetación, un paisaje que el hombre ha pretendido restituir, o al mar deshabitado de fauna marina y te da la sensación de que todo es aparentemente igual que antes. Sometes a la prueba de la memoria esas apariencias y reconoces que hace algo mas de medio siglo, esas dunas eran móviles, alcanzaban una altura superior a las de ahora, que el paisaje actual es radicalmente distinto del de entonces, y, hace apenas veinte años, si te internabas con un bote de caucho doscientos metros mar adentro, provisto de una caña corta, en menos de una hora llenabas un cubo con peces de variadas especies, ahora desaparecidas.
Vuelves a mirar a las dunas, te cercioras de que el paisaje de la playa de tu infancia ha desaparecido y comprendes que esa idea que tenemos asumida quienes leímos a Lampedusa, que solo cambian las apariencias, pero nada cambia en lo profundo de las cosas, no vale para otros aspectos de la vida, pues este mar no ha cambiado en lo aparente. Permanentemente recomenzado, siempre permanece igual en su apariencia, pero sus profundidades son ahora una ciénaga salada deshabitada de vida marina.
Esta reflexión, al hilo de una estancia placentera en la playa, no excluye mi aprecio por la idea de que cualquier tiempo pasado fue peor, y de que todos nacemos demasiado pronto. Es un modo de expresar mi confianza en el futuro de los hombres, en su capacidad de aprender, en la idea de que el futuro es una oportunidad de progreso.
Las ideas de la evolución que han terminado por influir en el pensamiento de los dos últimos siglos, se han reducido a veces a una cuestión de lucha, de supervivencia de los mas fuertes, sin destacar lo bastante que existen especies animales que sobreviven gracias a la cooperación.
El Homo cooperador puede oponerse al Homo Lupus con ventaja, y en situaciones tan complicadas como la que ahora estamos atravesando, conviene recordarlo, pues solo con procesos cooperadores, dialogados, negociadores, flexibles, compartidos, seremos capaces de consolidar un futuro a la medida de las necesidades humanas.
Ya se que es una vieja aspiración nunca cumplida, también es la aspiración de un viejo. No es cierto que la vejez proporcione sabiduría. Si eres un tonto como yo, la vejez te vuelve mas tonto todavía. Pero nosotros, los viejos, tenemos un tesoro del que carecen otros. La memoria. Esa cualidad nos permite mirar un paisaje, una mañana cualquiera, en la playa, y reconocer si ha cambiado o no, y que es lo que ha cambiado, si es lo aparente, o lo que subyace en sus profundidades."
En fin. La Playa.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 15-07-11.
El tiempo puede convertir en estilo personal ese defecto, pero no estoy seguro de que sea el caso, así que me voy a centrar en el tema de hoy. La Playa.
(...)
"Estar en la playa, esa frontera entre el mundo húmedo y el mundo seco, ofrece un universo de experiencias sensoriales muy rico y variado. La suave y delicada caricia de las mínimas gotas de mar que la brisa de levante lleva hasta tu rostro, la sensación casi sólida que sientes al aspirar el aire yodado, o la presencia de una variada exposición de anatomías de cuerpos humanos, liberados del yugo textil, de los que surge un intrincado aroma, mezcla de sudor corporal y cremas protectoras de la radiación solar, que aporta una variedad de perfumes casi infinita.
Miras a las dunas fijadas por la vegetación, un paisaje que el hombre ha pretendido restituir, o al mar deshabitado de fauna marina y te da la sensación de que todo es aparentemente igual que antes. Sometes a la prueba de la memoria esas apariencias y reconoces que hace algo mas de medio siglo, esas dunas eran móviles, alcanzaban una altura superior a las de ahora, que el paisaje actual es radicalmente distinto del de entonces, y, hace apenas veinte años, si te internabas con un bote de caucho doscientos metros mar adentro, provisto de una caña corta, en menos de una hora llenabas un cubo con peces de variadas especies, ahora desaparecidas.
Vuelves a mirar a las dunas, te cercioras de que el paisaje de la playa de tu infancia ha desaparecido y comprendes que esa idea que tenemos asumida quienes leímos a Lampedusa, que solo cambian las apariencias, pero nada cambia en lo profundo de las cosas, no vale para otros aspectos de la vida, pues este mar no ha cambiado en lo aparente. Permanentemente recomenzado, siempre permanece igual en su apariencia, pero sus profundidades son ahora una ciénaga salada deshabitada de vida marina.
Esta reflexión, al hilo de una estancia placentera en la playa, no excluye mi aprecio por la idea de que cualquier tiempo pasado fue peor, y de que todos nacemos demasiado pronto. Es un modo de expresar mi confianza en el futuro de los hombres, en su capacidad de aprender, en la idea de que el futuro es una oportunidad de progreso.
Las ideas de la evolución que han terminado por influir en el pensamiento de los dos últimos siglos, se han reducido a veces a una cuestión de lucha, de supervivencia de los mas fuertes, sin destacar lo bastante que existen especies animales que sobreviven gracias a la cooperación.
El Homo cooperador puede oponerse al Homo Lupus con ventaja, y en situaciones tan complicadas como la que ahora estamos atravesando, conviene recordarlo, pues solo con procesos cooperadores, dialogados, negociadores, flexibles, compartidos, seremos capaces de consolidar un futuro a la medida de las necesidades humanas.
Ya se que es una vieja aspiración nunca cumplida, también es la aspiración de un viejo. No es cierto que la vejez proporcione sabiduría. Si eres un tonto como yo, la vejez te vuelve mas tonto todavía. Pero nosotros, los viejos, tenemos un tesoro del que carecen otros. La memoria. Esa cualidad nos permite mirar un paisaje, una mañana cualquiera, en la playa, y reconocer si ha cambiado o no, y que es lo que ha cambiado, si es lo aparente, o lo que subyace en sus profundidades."
En fin. La Playa.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 15-07-11.
GOTERAS
Europa se agrieta como una bóveda construida sin clave que la sustente, mientras de la bóveda del Ágora, construida sin terminar de techar, las goteras que caen del cielo obligan a los chicos y chicas de la Campus Party, y a la anciana internauta que despierta su curiosidad y asombro, como si la edad fuera un obstáculo para la práctica vitalista cotidiana, a tapar sus ordenadores con plásticos, para evitar los daños de ese diluvio.
En la España nacional católica, la coalición de curas y políticos conservadores trataba de educar a los jóvenes con la promesa del cielo, y la amenaza del infierno, pero no se hacía tanto énfasis en la noción de purgatorio, que sería algo así como una estación de ferrocarril en Albacete, donde uno espera el paso de un tren que le lleve en la dirección que sus juzgadores deciden. Si no tiene antecedentes, igual se le permite acceder a un tren en dirección a la nada eterna.
El cielo del Ágora está lleno de agujeros y parece una metáfora perfecta de nuestro proyecto civil y comunitario. Generaciones enteras de políticos conservadores han actuado de jefes de estación durante mas de quince años en este paraíso mediterráneo y, cosas de las paradojas políticas, están en trance de no conservar nada de nuestro edifico institucional, pues el gasto público por habitante es el mas bajo del país. Esto no sería tan grave si nuestra renta fuera la mas elevada, pues tal vez eso significara que, al ser tan ricos, no necesitábamos del gasto público, pero, puesto que nuestra renta por habitante no es para echar cohetes, lo que significa es que somos doblemente pobres, mas pobres que antes.
Mientras el Ágora muestra sus goteras y debilidades, mis paisanos han estado en el foro durante quince años aplaudiendo a los políticos conservadores que se han encargado de esa demolición, y, si no cambia nada, el final de esa etapa triunfal será un indigente zarrapastroso tendido en sus cartones, con un móvil en la mano, escuchando las cotizaciones del cierre de la bolsa, por usar la misma imagen de la entrada de ayer.
En este panorama de goteras y demoliciones ha salido un nuevo personaje a la palestra, Vela, el nuevo Conseller de Hacienda, quien ha hecho unas declaraciones tan francas y realistas sobre el estado de nuestra Hacienda autonómica que, por un lado, son de agradecer, pues prescinden de las falacias y eufemismos acostumbrados, pero, por otro, te ponen el vello de punta, pues parecen el prólogo de unos tijeretazos salvajes, proporcionales a la realidad de la situación.
En fin. Goteras.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 14-07-11.
En la España nacional católica, la coalición de curas y políticos conservadores trataba de educar a los jóvenes con la promesa del cielo, y la amenaza del infierno, pero no se hacía tanto énfasis en la noción de purgatorio, que sería algo así como una estación de ferrocarril en Albacete, donde uno espera el paso de un tren que le lleve en la dirección que sus juzgadores deciden. Si no tiene antecedentes, igual se le permite acceder a un tren en dirección a la nada eterna.
El cielo del Ágora está lleno de agujeros y parece una metáfora perfecta de nuestro proyecto civil y comunitario. Generaciones enteras de políticos conservadores han actuado de jefes de estación durante mas de quince años en este paraíso mediterráneo y, cosas de las paradojas políticas, están en trance de no conservar nada de nuestro edifico institucional, pues el gasto público por habitante es el mas bajo del país. Esto no sería tan grave si nuestra renta fuera la mas elevada, pues tal vez eso significara que, al ser tan ricos, no necesitábamos del gasto público, pero, puesto que nuestra renta por habitante no es para echar cohetes, lo que significa es que somos doblemente pobres, mas pobres que antes.
Mientras el Ágora muestra sus goteras y debilidades, mis paisanos han estado en el foro durante quince años aplaudiendo a los políticos conservadores que se han encargado de esa demolición, y, si no cambia nada, el final de esa etapa triunfal será un indigente zarrapastroso tendido en sus cartones, con un móvil en la mano, escuchando las cotizaciones del cierre de la bolsa, por usar la misma imagen de la entrada de ayer.
En este panorama de goteras y demoliciones ha salido un nuevo personaje a la palestra, Vela, el nuevo Conseller de Hacienda, quien ha hecho unas declaraciones tan francas y realistas sobre el estado de nuestra Hacienda autonómica que, por un lado, son de agradecer, pues prescinden de las falacias y eufemismos acostumbrados, pero, por otro, te ponen el vello de punta, pues parecen el prólogo de unos tijeretazos salvajes, proporcionales a la realidad de la situación.
En fin. Goteras.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 14-07-11.
martes, 12 de julio de 2011
NERVIOS
Las bolsas europeas se han puesto de los nervios. Mientras intento llegar a la página 200 de 'El Ruido y la Furia' de Faulkner, cómodamente instalado en el porche de la casa de la sierra, la radio cuenta que el Ibex 35 ha caído hasta los 9.600 puntos. Si recordamos que hace tres años ese índice bursátil estaba por encima de los 16.000 puntos, la caída acumulada parece un gran batacazo.
En este país aun es frecuente que, cuando alguien se cae por la calle, una parte de los viandantes se apresuren a ayudarle, mientras que otros se descojonan de risa.
Será por eso que yo mismo, ante las noticias de la bolsa, no puedo evitar visualizar
la imagen de un indigente zarrapastroso tendido en sus cartones, provisto de su móvil, que escucha, con gesto preocupado, las cotizaciones del cierre del día. Que le voy a hacer, los hombres planta somos así, un poco hijo putas.
(...)
"El segundo día de nuestra estancia en la casa de la sierra me acosté para hacer la siesta. Me levanté con dolor de riñones y le dije a mi mujer,
'hemos de cambiar el colchón, está viejo y no se acopla bien al cuerpo', 'que va, lo cambiamos hace dos años y con el poco uso que le damos, aun está rígido' 'Serán tus riñones, que están blandengues', replicó ella.
No he dormido, pero lo he pasado muy bien.
Ningún ruido extraño ha interrumpido mi descanso, nada de avisos acústicos de vehículos sanitarios, ninguna exhibición atronadora de coche de bomberos, ninguna discreta sirena --porqué le llaman así-- de unidad móvil de la policía, ni siquiera un maldito vehículo del servicio de vigilancia forestal ha roto el silencio serrano de esta habitación cuya ventana da a un camino por el que nadie, nunca, pasa.
Vivir en Heliópolis cerca del parque de bomberos, junto a un cuartel de la policía, en una encrucijada urbana que está en la ruta de los hospitales, es también agradable, pero tiene el inconveniente de que la frecuencia de los aullidos de toda clase de artilugios mecánicos de emergencia, pone de los nervios, aunque a mi, no.
Tengo un ligero temblor en las manos, a veces, cuando tomo un café del tiempo, al trasvasar el brebaje negro y caliente, una vez endulzado, desde la taza de cerámica
hasta la copa de cristal preparada con hielo y limón, derramo un poco de café, pero no es por los nervios, es por el litio.
Tengo los nervios bien templados, aunque desde que entró el verano he notado un aumento de la presión arterial y de la actividad hormonal, cuya principal manifestación es que veo a las mujeres, a todas, propia y ajenas, amigas y desconocidas, con una mirada de macho alfa que no se corresponde, para nada, con mi condición de viejo ejemplar en proceso de ser apartado de la manada.
Por eso, tengo mucho cuidado de no dejar de tomar litio, algo que solo se debe hacer bajo vigilancia médica, aunque uno de sus efectos secundarios es ese visible temblor en las manos. El litio es un producto que ayuda a estabilizar el ánimo demasiado cambiante de los hombres planta, muy sensibles a los cambios estacionales, de ahí que yo prefiera ese nombre, al mas prosaico y estigmatizador de la ciencia médica.
Sigo esa pauta médica, para evitar que un repentino incremento de la actividad hormonal me conduzca a una excesiva euforia veraniega que exceda los límites de la correcta convivencia con las hembras de la manada.
Fuera de esas pequeñas alteraciones, mis nervios están tan helados como los cubos con los que acompaño el café del tiempo, y no tengo memoria de haberme pasado, ni participado en altercado alguno, desde hace veinte años, cuando negocié con mi psiquiatra un tratamiento preventivo para mi trastorno de hombre planta, que me ha permitido llevar una vida absolutamente aburrida desde entonces.
Mis nervios están templados, entre otras cosas, no solo por el uso permanente y disciplinado del litio, sino porque hace quince años decidí comprar esta casa campesina de la sierra, situada en un paraje dominado por el silencio de la vida natural, y restaurarla para hacerla habitable, sin lujos. La casa está a diez mil metros del núcleo urbano más próximo y, claro, es muy tranquila. Un inconveniente es que, cuando se te olvida la soja del desayuno, debes hacer veinte kilómetros para reparar el olvido.
Esta mañana ha sucedido eso, precisamente, y el único ser vivo que he encontrado en la carretera, de camino a Mercadona, ha sido el hombre de la contrata del asfaltado que están aplicando en la vieja carretera. Ha hecho un gesto para que disminuya la velocidad al pasar a su lado, porque estaba pintando marcas para la señalización horizontal de la carretera, y me ha dicho, --Tenga cuidado. No me pise el eje.
Ya se ve, por el aislamiento extremo de esa casa, por la ausencia de población en sus alrededores,la imposibilidad de conflictos, de ruido, de acontecimientos, que vivo temporalmente en un sitio que es un bálsamo para los nervios. Temporalmente, claro, porque si te quedas mas de tres días, puedes terminar con los nervios destrozados por tanto silencio."
En fin. Nervios.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 13-07-11.
En este país aun es frecuente que, cuando alguien se cae por la calle, una parte de los viandantes se apresuren a ayudarle, mientras que otros se descojonan de risa.
Será por eso que yo mismo, ante las noticias de la bolsa, no puedo evitar visualizar
la imagen de un indigente zarrapastroso tendido en sus cartones, provisto de su móvil, que escucha, con gesto preocupado, las cotizaciones del cierre del día. Que le voy a hacer, los hombres planta somos así, un poco hijo putas.
(...)
"El segundo día de nuestra estancia en la casa de la sierra me acosté para hacer la siesta. Me levanté con dolor de riñones y le dije a mi mujer,
'hemos de cambiar el colchón, está viejo y no se acopla bien al cuerpo', 'que va, lo cambiamos hace dos años y con el poco uso que le damos, aun está rígido' 'Serán tus riñones, que están blandengues', replicó ella.
No he dormido, pero lo he pasado muy bien.
Ningún ruido extraño ha interrumpido mi descanso, nada de avisos acústicos de vehículos sanitarios, ninguna exhibición atronadora de coche de bomberos, ninguna discreta sirena --porqué le llaman así-- de unidad móvil de la policía, ni siquiera un maldito vehículo del servicio de vigilancia forestal ha roto el silencio serrano de esta habitación cuya ventana da a un camino por el que nadie, nunca, pasa.
Vivir en Heliópolis cerca del parque de bomberos, junto a un cuartel de la policía, en una encrucijada urbana que está en la ruta de los hospitales, es también agradable, pero tiene el inconveniente de que la frecuencia de los aullidos de toda clase de artilugios mecánicos de emergencia, pone de los nervios, aunque a mi, no.
Tengo un ligero temblor en las manos, a veces, cuando tomo un café del tiempo, al trasvasar el brebaje negro y caliente, una vez endulzado, desde la taza de cerámica
hasta la copa de cristal preparada con hielo y limón, derramo un poco de café, pero no es por los nervios, es por el litio.
Tengo los nervios bien templados, aunque desde que entró el verano he notado un aumento de la presión arterial y de la actividad hormonal, cuya principal manifestación es que veo a las mujeres, a todas, propia y ajenas, amigas y desconocidas, con una mirada de macho alfa que no se corresponde, para nada, con mi condición de viejo ejemplar en proceso de ser apartado de la manada.
Por eso, tengo mucho cuidado de no dejar de tomar litio, algo que solo se debe hacer bajo vigilancia médica, aunque uno de sus efectos secundarios es ese visible temblor en las manos. El litio es un producto que ayuda a estabilizar el ánimo demasiado cambiante de los hombres planta, muy sensibles a los cambios estacionales, de ahí que yo prefiera ese nombre, al mas prosaico y estigmatizador de la ciencia médica.
Sigo esa pauta médica, para evitar que un repentino incremento de la actividad hormonal me conduzca a una excesiva euforia veraniega que exceda los límites de la correcta convivencia con las hembras de la manada.
Fuera de esas pequeñas alteraciones, mis nervios están tan helados como los cubos con los que acompaño el café del tiempo, y no tengo memoria de haberme pasado, ni participado en altercado alguno, desde hace veinte años, cuando negocié con mi psiquiatra un tratamiento preventivo para mi trastorno de hombre planta, que me ha permitido llevar una vida absolutamente aburrida desde entonces.
Mis nervios están templados, entre otras cosas, no solo por el uso permanente y disciplinado del litio, sino porque hace quince años decidí comprar esta casa campesina de la sierra, situada en un paraje dominado por el silencio de la vida natural, y restaurarla para hacerla habitable, sin lujos. La casa está a diez mil metros del núcleo urbano más próximo y, claro, es muy tranquila. Un inconveniente es que, cuando se te olvida la soja del desayuno, debes hacer veinte kilómetros para reparar el olvido.
Esta mañana ha sucedido eso, precisamente, y el único ser vivo que he encontrado en la carretera, de camino a Mercadona, ha sido el hombre de la contrata del asfaltado que están aplicando en la vieja carretera. Ha hecho un gesto para que disminuya la velocidad al pasar a su lado, porque estaba pintando marcas para la señalización horizontal de la carretera, y me ha dicho, --Tenga cuidado. No me pise el eje.
Ya se ve, por el aislamiento extremo de esa casa, por la ausencia de población en sus alrededores,la imposibilidad de conflictos, de ruido, de acontecimientos, que vivo temporalmente en un sitio que es un bálsamo para los nervios. Temporalmente, claro, porque si te quedas mas de tres días, puedes terminar con los nervios destrozados por tanto silencio."
En fin. Nervios.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 13-07-11.
domingo, 10 de julio de 2011
AVISOS Y ESPANTADAS
Anoche, la barbacoa en la terraza de mis amigos que da a levante se prolongó hasta la madrugada, pero no nos quedamos a ver salir el sol. Vimos una esquina de los fuegos artificiales, antes los veíamos completos, pero Rita los ha cambiado de sitio. Cenamos y bebimos de todo, una excelente cerveza Gran Reserva, de esa que te aconseja en un spot que disfrutes los placeres del sur, un estupendo tinto de Castilla, un café helado con un toque de whisky de veinte años, ese es el tiempo que mi amigo ha guardado la botella en el anaquel para esta ocasión, y terminamos con un chocolat, porque mi amiga sigue una dieta proteínica permanente que le ha hecho adelgazar ocho kilos, pero ayer era su Día de Homenaje.
Un poco resacoso, antes de irme a la casa de la sierra, lo que justifica el título de la entrada de hoy, he bajado al bar de los locos y he desayunado la magnífica metáfora frutal de Manuel Vicent en su columna del País de hoy, Santoral, en la que Vicent hace una brillante reflexión sobre el mundo transgénico de hoy y la ausencia de valores seguros y maestros a los que seguir. No se la pierdan.
Sin embargo, esa visión de Vicent, a mi juicio, no es del todo exacta. Mientras queden maestros como el, con su estilo brillante, tan personal, su sentido ético y estético de la vida y la escritura, seguiremos percibiendo que en el mundo del periodismo y la literatura aún quedan productos de temporada, cultivados al aire libre, libres de sustancias extrañas, intoxicantes, que tanto abundan en el mundo de la hiper comunicación que nos toca vivir. Gracias, Vicent, en nombre de todos los que apreciamos la buena comida, la buena bebida, y la buena leída.
Pues eso. Me voy a la casa de la sierra. Abandono el Blog por dos o tres días, pero dejo a disposición de los usuarios las 1.300 entradas que contiene. Hagan buen uso de ellas. Ayer Google me advirtió, mientras hacía correcciones en la última entrada, 'Ha entrado usted 53 veces en esta página' con un cierto tono de reproche, sugiriendo si no sería yo un adicto a esto de Internet. No es eso. Ocurre que, como yo no soy un maestro, sino un aprendiz, me cuesto mucho eliminar errores y repeticiones, antes de dar la página por acabada.
Un saludo cibernauta. Hasta la vista.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 10-07-11.
Un poco resacoso, antes de irme a la casa de la sierra, lo que justifica el título de la entrada de hoy, he bajado al bar de los locos y he desayunado la magnífica metáfora frutal de Manuel Vicent en su columna del País de hoy, Santoral, en la que Vicent hace una brillante reflexión sobre el mundo transgénico de hoy y la ausencia de valores seguros y maestros a los que seguir. No se la pierdan.
Sin embargo, esa visión de Vicent, a mi juicio, no es del todo exacta. Mientras queden maestros como el, con su estilo brillante, tan personal, su sentido ético y estético de la vida y la escritura, seguiremos percibiendo que en el mundo del periodismo y la literatura aún quedan productos de temporada, cultivados al aire libre, libres de sustancias extrañas, intoxicantes, que tanto abundan en el mundo de la hiper comunicación que nos toca vivir. Gracias, Vicent, en nombre de todos los que apreciamos la buena comida, la buena bebida, y la buena leída.
Pues eso. Me voy a la casa de la sierra. Abandono el Blog por dos o tres días, pero dejo a disposición de los usuarios las 1.300 entradas que contiene. Hagan buen uso de ellas. Ayer Google me advirtió, mientras hacía correcciones en la última entrada, 'Ha entrado usted 53 veces en esta página' con un cierto tono de reproche, sugiriendo si no sería yo un adicto a esto de Internet. No es eso. Ocurre que, como yo no soy un maestro, sino un aprendiz, me cuesto mucho eliminar errores y repeticiones, antes de dar la página por acabada.
Un saludo cibernauta. Hasta la vista.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 10-07-11.
sábado, 9 de julio de 2011
EL IMBÉCIL
"He bajado al Maravillas, después de una noche algo insomne, con mucho porno. Creo que tomo demasiado café. Una ducha fría, esta mañana, me ha puesto de nuevo en forma, aunque tengo la sensación de haberme comportado como un imbécil.
La columna de Piera en las páginas de opinión de 'Levante' concluye con una frase que me ha gustado mucho, y que da mucho juego, '..uno es tan imbécil como elige ser..' en respuesta a una de las afirmaciones que Rosell, el presidente de la patronal española, suele difundir, eso si, citando estudios que las apoyan. Cuando echaron al calvo y Rosell empezó a revelar sus preferencias político sociales me percaté de que era menos follonero, pero mas peligroso que Diaz Ferrán. Es una opinión.
(...)
Sostiene Rosell que las capacidades humanas están determinadas por la genética. Esa mirada tiene muchas implicaciones sociales. Lo mismo sirve para excluir a los menos dotados genéticamente, que para racionalizar el gasto en educación. Piera, en cambio, sostiene que la imbecilidad no es una herencia genética, sino algo elegido. La eterna cuestión de cual es el peso relativo de la herencia y el ambiente en el comportamiento humano.
Me inclino por la mirada de Piera. Tener una peca en el pie derecho, en el mismo lugar y del mismo tamaño que algún ancestro tuyo, es una herencia genética. Que un pollo nazca con dos cabezas, es una malformación genética. No creo en la existencia de los imbéciles. Si en la existencia de comportamientos imbéciles, entre las muchas, variadas y, a veces, contradictorias actitudes de los humanos.
Para nuestra fortuna, la vida en sociedad de los humanos ofrece a lo largo de sus vicisitudes multitud de ocasiones en las que hemos de realizar una elección. Esa elección, por mucho que tenga una base fisiológica, neurológica, no es unívoca. En ocasiones, en ciertos ámbitos sociales, tal vez elegimos comportarnos como imbéciles, en cambio en otros, elegimos lo contrario. Ayer vi una peli dirigida por Jodie Foster que incide en la dualidad de los comportamientos humanos, en este caso, patológicos.
En 'El Castor', proyectada ayer en el cine D'Or ,el protagonista, Mel Gibson, inmerso en una profunda depresión que le acerca al suicidio trata de librarse de ella, no con consejos médicos, sino a través de una mascota, un peluche al que da su propia voz y una identidad ajena, que le aconseja lo que tiene que hacer. Este comportamiento dual, esquizofrénico, tiene como resultado que el trastornado obtenga un brillante éxito profesional en su empresa, pero sus relaciones familiares, a pesar del esfuerzo de su mujer por ayudarle, se convierten en un desastre de imbecilidad.
Esta parábola cinematográfica viene a ilustrar que puede haber personajes públicos muy exitosos en alguna actividad, pero absolutamente imbéciles en otra, como hay personas anónimas que, habiéndose comportado como nulidades en el colegio, llegan a la madurez y se convierten en personas altruistas, productivas, en el sentido emocional, capaces de promover y desarrollar actividades individuales, o grupales, de gran valor social o colectivo.
Me parece del todo improductivo asumir, divulgar o defender la idea de que estamos determinados por la genética, en lugar de reconocer la variedad, riqueza y posibilidades de mejora de los individuos, a través de sus comportamientos, incluso
cuando alguna parte de esos comportamientos, ofrezca aparentes rasgos de imbecilidad.
No creo que Rosell crea sinceramente lo que dice. Mas bien parece que utiliza los discursos que convienen a sus intereses legítimos, aunque mezquinos.
La vida social, como la natural, está llena de dudas y preguntas, que casi nunca ofrecen respuestas unívocas.
Esta noche estoy invitado a una barbacoa nocturna en la terraza de la casa del Cabanyal de unos amigos, que da a levante. Si la cosa se prolonga, tal vez tengamos ocasión de ver salir el sol, con esa aparente sensación de que emerge de las profundidades del mar. En la escuela nos enseñaron a todos, de niños, tontos y listos, tarados o no, que el sol no vive en las profundidades del mar, sino que está lejos, y cerca.
Está tan lejos, que no podemos imaginar esa distancia, pero a la vez, está tan cerca que sentimos en nuestra piel la evidencia de su presencia. Si las cosas de la naturaleza pueden estar lejos y cerca a la vez, no es muy riguroso pensar que las capacidades humanas dependen, esencialmente, de la genética."
En fin. El Imbécil.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 9-07-11.
La columna de Piera en las páginas de opinión de 'Levante' concluye con una frase que me ha gustado mucho, y que da mucho juego, '..uno es tan imbécil como elige ser..' en respuesta a una de las afirmaciones que Rosell, el presidente de la patronal española, suele difundir, eso si, citando estudios que las apoyan. Cuando echaron al calvo y Rosell empezó a revelar sus preferencias político sociales me percaté de que era menos follonero, pero mas peligroso que Diaz Ferrán. Es una opinión.
(...)
Sostiene Rosell que las capacidades humanas están determinadas por la genética. Esa mirada tiene muchas implicaciones sociales. Lo mismo sirve para excluir a los menos dotados genéticamente, que para racionalizar el gasto en educación. Piera, en cambio, sostiene que la imbecilidad no es una herencia genética, sino algo elegido. La eterna cuestión de cual es el peso relativo de la herencia y el ambiente en el comportamiento humano.
Me inclino por la mirada de Piera. Tener una peca en el pie derecho, en el mismo lugar y del mismo tamaño que algún ancestro tuyo, es una herencia genética. Que un pollo nazca con dos cabezas, es una malformación genética. No creo en la existencia de los imbéciles. Si en la existencia de comportamientos imbéciles, entre las muchas, variadas y, a veces, contradictorias actitudes de los humanos.
Para nuestra fortuna, la vida en sociedad de los humanos ofrece a lo largo de sus vicisitudes multitud de ocasiones en las que hemos de realizar una elección. Esa elección, por mucho que tenga una base fisiológica, neurológica, no es unívoca. En ocasiones, en ciertos ámbitos sociales, tal vez elegimos comportarnos como imbéciles, en cambio en otros, elegimos lo contrario. Ayer vi una peli dirigida por Jodie Foster que incide en la dualidad de los comportamientos humanos, en este caso, patológicos.
En 'El Castor', proyectada ayer en el cine D'Or ,el protagonista, Mel Gibson, inmerso en una profunda depresión que le acerca al suicidio trata de librarse de ella, no con consejos médicos, sino a través de una mascota, un peluche al que da su propia voz y una identidad ajena, que le aconseja lo que tiene que hacer. Este comportamiento dual, esquizofrénico, tiene como resultado que el trastornado obtenga un brillante éxito profesional en su empresa, pero sus relaciones familiares, a pesar del esfuerzo de su mujer por ayudarle, se convierten en un desastre de imbecilidad.
Esta parábola cinematográfica viene a ilustrar que puede haber personajes públicos muy exitosos en alguna actividad, pero absolutamente imbéciles en otra, como hay personas anónimas que, habiéndose comportado como nulidades en el colegio, llegan a la madurez y se convierten en personas altruistas, productivas, en el sentido emocional, capaces de promover y desarrollar actividades individuales, o grupales, de gran valor social o colectivo.
Me parece del todo improductivo asumir, divulgar o defender la idea de que estamos determinados por la genética, en lugar de reconocer la variedad, riqueza y posibilidades de mejora de los individuos, a través de sus comportamientos, incluso
cuando alguna parte de esos comportamientos, ofrezca aparentes rasgos de imbecilidad.
No creo que Rosell crea sinceramente lo que dice. Mas bien parece que utiliza los discursos que convienen a sus intereses legítimos, aunque mezquinos.
La vida social, como la natural, está llena de dudas y preguntas, que casi nunca ofrecen respuestas unívocas.
Esta noche estoy invitado a una barbacoa nocturna en la terraza de la casa del Cabanyal de unos amigos, que da a levante. Si la cosa se prolonga, tal vez tengamos ocasión de ver salir el sol, con esa aparente sensación de que emerge de las profundidades del mar. En la escuela nos enseñaron a todos, de niños, tontos y listos, tarados o no, que el sol no vive en las profundidades del mar, sino que está lejos, y cerca.
Está tan lejos, que no podemos imaginar esa distancia, pero a la vez, está tan cerca que sentimos en nuestra piel la evidencia de su presencia. Si las cosas de la naturaleza pueden estar lejos y cerca a la vez, no es muy riguroso pensar que las capacidades humanas dependen, esencialmente, de la genética."
En fin. El Imbécil.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 9-07-11.
viernes, 8 de julio de 2011
LA RESIDENCIA
La entrada de hoy iba a ser un aviso de huida, de esos que tengo por costumbre comunicar al personal cuando me dispongo a pasar unos días en la casa de la sierra,
pero anoche, unos amigos con los que compartí la asistencia a un concierto memorable del que luego hablaré, nos han invitado a una barbacoa nocturna en la terraza de su casa del Cabanyal que da a levante y, con los calores que dominan ahora el comienzo del estío, es una propuesta que no se puede rechazar.
(...)
EL CONCIERTO. Anoche se celebró una velada musical en los Jardines del Palau, en Heliópolis, en el ámbito del Festival de Jazz que se celebra en estas fechas. Once artistas, músicos, cantantes, instrumentistas, bailarines, de muy distintas nacionalidades, culturas y orígenes, estuvieron mas de dos horas en el escenario y consiguieron un éxito de público de escándalo. No solo se duplicó el aforo, pues la gente llenaba el espacio alrededor de los asientos en zonas marginales, en el césped, en el suelo, en cualquier sitio, sino que, cuando ya estaba bien avanzado el espectáculo, nadie se movió, a diferencia de otras ediciones en que la gente se iba poco a poco antes del final.
La participación del público, bailando y coreando las canciones del último tramo de la actuación, superó todo lo visto anteriormente en pasadas ediciones. El hombre ciego de Nueva Orleáns que cantaba blues, se hizo con el público con una autoridad
increíble. Mientras actuaba, se movía con esa forma característica que tenía Ray Charles cuando cantaba mientras tocaba el piano. El joven holandés de color que llevaba la voz cantante y bailante, arrancaba de las mujeres comentarios muy sabrosos. Mira, es como Shakira, pero en tío, decía una. Has visto que músculos, aventuraba otra.
Lo cierto es que todos, los instrumentistas, los cantantes y los bailarines, imprimieron un ritmo a su actuación desde el principio que, añadido a las propinas que interpretaron al final, tuvo que dejarlos exhaustos.
Intérpretes africanos, estadounidenses, holandeses, italianos, jamaicanos, nos ofrecieron un mosaico de músicas, blues, soul, goodspel, founky, étnica, que culminó con la interpretación de las mejores canciones de Bob Marley, coreadas por el público con un entusiasmo multitudinario que jamás había visto en estos acontecimientos.
En fin. Un concierto de éxito, al que cualquiera pudo asistir, pues fue gratuito, a condición claro, de estar allí dos horas antes, con el bocata y la cerveza, para coger sitio. Nosotros lo hicimos, y creo que fueron las dos horas mejor empleadas de los últimos tiempos para participar en un acontecimiento público.
Quien quiera saber mas, puede visitar la Web de Playing For Change Live, que es el nombre de este proyecto musical, mucho mas que un simple grupo al uso.
LA RESIDENCIA. Esta mañana, con la resaca de haber dormido poco y mal después de
la actividad nocturna de anoche, me he desplazado hasta un pueblo medio serrano, a unos treinta kilómetros de Heliópolis, para visitar a un familiar que está en una residencia geriátrica.
El director de la residencia nos ha informado de que mi familiar residente, sufre un extraño síndrome recién investigado entre los asilados que consiste en que, aunque ingieren alimentos, no asimilan los nutrientes necesarios para vivir. La extrema delgadez de ese familiar, así parece indicarlo, aunque le dan un suplemento adecuado de batidos con vitamínas y otros nutrientes para suplir esa deficiencia, lo cierto es que esta persona, que comenzó habitando una residencia para cuidar a su mujer enferma, cuando falleció esta, ya no ha salido de allí y, poco a poco, se ha ido convirtiendo, el mismo, en una isla deshabitada, en un remoto lugar que solo es visitado por los turistas una vez por semana.
En el transcurso de la visita, he tenido ocasión de leer un cartel con la foto de una residente, que convida a todos a participar en la inminente celebración de su cumpleaños centenario. Para mi es un misterio, que algunos ancianos lleguen a centenarios con un relativo buen estado de salud, y otros, apenas rebasados los setenta, presenten un aspecto depauperado y triste.
Algo tendrá que ver, digo yo, que algunos de ellos se comportan como islas, que en su cabeza y sus emociones no hay sitio para la relación con los otros, mientras que otras personas de su condición, hacen de la vida un espacio común para ser compartido, disfrutado, vivido, junto a los demás.
Supongo que la enfermedad, la precaria salud de cada uno está en el origen de esas diferencias, pero sospecho que el grado de salud, o enfermedad, está muy vinculado al modo de ver la vida de cada uno. Si optas por aislarte, tu ser social se atrofia y al final, el equilibrio entre salud y enfermedad puede quedar alterado. No sé.
En fin. La Residencia.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 8-7-11.
pero anoche, unos amigos con los que compartí la asistencia a un concierto memorable del que luego hablaré, nos han invitado a una barbacoa nocturna en la terraza de su casa del Cabanyal que da a levante y, con los calores que dominan ahora el comienzo del estío, es una propuesta que no se puede rechazar.
(...)
EL CONCIERTO. Anoche se celebró una velada musical en los Jardines del Palau, en Heliópolis, en el ámbito del Festival de Jazz que se celebra en estas fechas. Once artistas, músicos, cantantes, instrumentistas, bailarines, de muy distintas nacionalidades, culturas y orígenes, estuvieron mas de dos horas en el escenario y consiguieron un éxito de público de escándalo. No solo se duplicó el aforo, pues la gente llenaba el espacio alrededor de los asientos en zonas marginales, en el césped, en el suelo, en cualquier sitio, sino que, cuando ya estaba bien avanzado el espectáculo, nadie se movió, a diferencia de otras ediciones en que la gente se iba poco a poco antes del final.
La participación del público, bailando y coreando las canciones del último tramo de la actuación, superó todo lo visto anteriormente en pasadas ediciones. El hombre ciego de Nueva Orleáns que cantaba blues, se hizo con el público con una autoridad
increíble. Mientras actuaba, se movía con esa forma característica que tenía Ray Charles cuando cantaba mientras tocaba el piano. El joven holandés de color que llevaba la voz cantante y bailante, arrancaba de las mujeres comentarios muy sabrosos. Mira, es como Shakira, pero en tío, decía una. Has visto que músculos, aventuraba otra.
Lo cierto es que todos, los instrumentistas, los cantantes y los bailarines, imprimieron un ritmo a su actuación desde el principio que, añadido a las propinas que interpretaron al final, tuvo que dejarlos exhaustos.
Intérpretes africanos, estadounidenses, holandeses, italianos, jamaicanos, nos ofrecieron un mosaico de músicas, blues, soul, goodspel, founky, étnica, que culminó con la interpretación de las mejores canciones de Bob Marley, coreadas por el público con un entusiasmo multitudinario que jamás había visto en estos acontecimientos.
En fin. Un concierto de éxito, al que cualquiera pudo asistir, pues fue gratuito, a condición claro, de estar allí dos horas antes, con el bocata y la cerveza, para coger sitio. Nosotros lo hicimos, y creo que fueron las dos horas mejor empleadas de los últimos tiempos para participar en un acontecimiento público.
Quien quiera saber mas, puede visitar la Web de Playing For Change Live, que es el nombre de este proyecto musical, mucho mas que un simple grupo al uso.
LA RESIDENCIA. Esta mañana, con la resaca de haber dormido poco y mal después de
la actividad nocturna de anoche, me he desplazado hasta un pueblo medio serrano, a unos treinta kilómetros de Heliópolis, para visitar a un familiar que está en una residencia geriátrica.
El director de la residencia nos ha informado de que mi familiar residente, sufre un extraño síndrome recién investigado entre los asilados que consiste en que, aunque ingieren alimentos, no asimilan los nutrientes necesarios para vivir. La extrema delgadez de ese familiar, así parece indicarlo, aunque le dan un suplemento adecuado de batidos con vitamínas y otros nutrientes para suplir esa deficiencia, lo cierto es que esta persona, que comenzó habitando una residencia para cuidar a su mujer enferma, cuando falleció esta, ya no ha salido de allí y, poco a poco, se ha ido convirtiendo, el mismo, en una isla deshabitada, en un remoto lugar que solo es visitado por los turistas una vez por semana.
En el transcurso de la visita, he tenido ocasión de leer un cartel con la foto de una residente, que convida a todos a participar en la inminente celebración de su cumpleaños centenario. Para mi es un misterio, que algunos ancianos lleguen a centenarios con un relativo buen estado de salud, y otros, apenas rebasados los setenta, presenten un aspecto depauperado y triste.
Algo tendrá que ver, digo yo, que algunos de ellos se comportan como islas, que en su cabeza y sus emociones no hay sitio para la relación con los otros, mientras que otras personas de su condición, hacen de la vida un espacio común para ser compartido, disfrutado, vivido, junto a los demás.
Supongo que la enfermedad, la precaria salud de cada uno está en el origen de esas diferencias, pero sospecho que el grado de salud, o enfermedad, está muy vinculado al modo de ver la vida de cada uno. Si optas por aislarte, tu ser social se atrofia y al final, el equilibrio entre salud y enfermedad puede quedar alterado. No sé.
En fin. La Residencia.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 8-7-11.
jueves, 7 de julio de 2011
EL ENCIERRO
"He bajado al Maravillas.Stop. La tele estaba puesta.Stop.Mientras tomaba tres daiquiris he visto el encierro.Stop. Os envío la crónica del segundo acto de los sanfermines de este año.Stop. Al primero, el chupinazo, no asistí, estaba tomando seis daiquiris en otro sitio.Stop. E.H."
(...)
"Me encontraba escondido detrás de una columna del bar, esperando ver salir a las fieras de Torre Estrella --hace unos años cornearon de muerte a un compatriota, desde entonces no han vuelto a hacer sangre-- cuando la máquina de barrer ha pasado, con un ruido estruendoso, rozando la fachada del bar.
Al alejarse el sordo ruido del motor, he alcanzado a escuchar a una locutora de la tele pública, que decía, 'valga la redundancia'.
Nena, valga la redundancia, es una herejía ética y estética de la locución. En lugar de usar ese latiguillo nefando, es mejor controlar para no decir cosas redundantes. De nada.
Después de los preliminares, en la pantalla ha aparecido por fin la abigarrada muchedumbre rojiblanca que llena las calles de Pamplona en este día festivo. Observando con atención se podía diferenciar dos grupos de gentes bien distintos. De un lado, los corredores, de aspecto pulcro, parecían bien dormidos, entrenados durante meses para un acto que tiene un componente de prueba atlética, que exige estiramientos y buena forma para evitar caídas inoportunas y percances serios.
Luego está la masa de forasteros que, descontados los que repiten desde hace años y ya forman parte de esta comunidad festiva, incluye variedades muy diversas. Desde los que apestan a vinazo y semen, que vienen a ver lo que pueden pillar y, en muchos casos pillan, no reservan habitación alguna, pasan la noche en la calle, solos o acompañados, con compañía traída o encontrada, y se dejan ver en la madrugada intentado atacar la entrepierna de alguna colega apoyada sobre el muro de una esquina mal iluminada, hasta centenares de periodistas de todo el mundo que han sido enviados para cubrir la información del acontecimiento, desde los siete, o los que sean, continentes.
Aparecen en pantalla, de súbito, los toros bravos de Torre Estrella, con el vaquero detrás, dando varazos a diestro y siniestro, no solo a los morlacos, sino a los curiosos que se acercan demasiado y les impiden hacer bien su trabajo.En el pelaje de los astados dominan los tonos canela y blanco y su comportamiento en el recorrido que ha durado dos minutos parecía ensayado en un plató, tal ha sido la ligereza, limpieza y trayectoria de la manada. He dicho manada, no mamada.
Ni un resbalón en la curva de Estafeta, pocos derrotes visibles, una actitud grupal de la manada obediente a su guía que ha dado como resultado uno de los encierros mas limpios que se recuerdan, y una sorprendente entrada en el ruedo, directos a los chiqueros, sin ningún remoloneo ni distracción.La única cosa que se puede mencionar, al margen de la ordenada y rápida carrera de los toros, ha sido la caída de un manso, que no se levantaba a pesar de los varazos del vaquero, hasta que un corredor se ha puesto delante y ha conseguido que el animal siguiera su camino.
De los corredores hay que decir que su principal dificultad hoy era seguir la endiablada velocidad de los astados, pero como están entrenados para eso, lo han hecho con aparente facilidad, aunque, por mi experiencia personal, no me parece fácil estar delante de un toro.
Ningún herido por asta de toro, solo los consabidos resbalones, caídas y golpes. Alguien habrá salido bien magullado porque, en cierta ocasión, hoy decir a un taurino que basta que una vaquilla te roce con la oreja, para que te haga daño.
En tres palabras. Un encierro limpio. Puesto que no hay nada mas que reseñar, doy por concluida mi crónica del encierro, y cedo la palabra a quien me ha prestado el blog, para que nos hable de sus limitadas experiencias taurinas. E.H."
"Nunca he participado en los sanfermines. Lo mas cerca que he estado ha sido a 356 kilómetros, participando activamente en el Toro Ensogao que sueltan, sin dejar de controlarlo con una maroma, en Teruel, entre otras fechas, en febrero, cuando celebran las fiestas de Isabel de Segura, un invento --afortunado-- de una licenciada en bellas artes, que ni siquiera es de allí, que ha conseguido poner a Teruel en el mapa de las fiestas de invierno, con el atractivo que suponen los mercados callejeros, las gentes vestidas al estilo medieval, los puestos de asados y comidas, los desfiles y la presencia de música antigua que, junto con los halcones y otras rapaces y la arquitectura mudéjar, consiguen recrear con fidelidad el ambiente de la villa en tiempos medievales, epidemias de peste, aparte.
Pero lo mas auténtico de esta fiesta, lo que la enlaza con los sanfermines es el toro. La cultura del toro, tan arraigada en nuestro país, y tan controvertida a la vez por las nuevas generaciones que la ven como una crueldad innecesaria hacia los animales, hasta el punto de que una comunidad, la catalana, se dispone a hacer efectiva la prohibición de casi todos los festejos taurinos, aunque creo que con alguna excepción puntual.
El día que participé en el Toro Ensogao de Teruel, con la plaza del Torico y las calles cercanas atestadas de gente, mi participación consistió en protegerme detrás de una columna de piedra que sostenía uno de los soportales de la plaza, para que, cuando apareciera el toro, no me pillara.
El toro no aparecía, pero las gentes, apenas había salido de los chiqueros de la plaza, antes incluso de que enfilara la estrecha callejuela que había de conducirlo a
nuestro encuentro, gritaban, de tanto en tanto, ¡El toro...! y la muchedumbre de la plaza comenzaba a correr hacia las calles empinadas cercanas, y era un verdadero espectáculo ver moverse esa masa, en circulo, buscando las salidas, y yo los observaba desde detrás de la columna de piedra y pensaba que el auténtico festejo taurino del toro ensogao, éramos nosotros, el público, porque el toro no aparecía por ninguna parte.
Por fin apareció el toro, conducido por quienes, por medio de las sogas que lo sujetaban, controlaban sus desplazamientos. Era un toro negro zaino, no debía pesar seiscientos kilos, pero tenía una alzada y una presencia contundentes. Ante la presencia del astado, se repitieron los movimientos de la muchedumbre en la plaza, esta vez marcados por la cercanía del animal, consentida por quienes sostenían la soga, para dar emoción al espectáculo, pero sin perder nunca el control de sus movimientos, y sus paradas.
Desde detrás de la columna de piedra, vi la presencia muy cercana del animal, en una de sus evoluciones, sentí su respiración, escuché el ruido de sus pezuñas rascando contra el suelo de la plaza, percibí su mirada fija y miope, engolfada en algún cuerpo que se acercaba demasiado, pero en ningún momento tuve la sensación de que asumía riesgos que no había calculado.
Y esa es la historia de mi vida. A base de no asumir demasiados riesgos, solo los que permiten ser calculados, nunca me he permitido una aventura, como supongo que les ocurre a la mayoría de ustedes. Ahora me he hecho mayor y el único riesgo que todavía practico, a diario, es el de aburrir a mis lectores desde el blog. Un riesgo que no solo afecta a mi vida personal, sino a mi incipiente vida pública, si se puede llamar así a escribir en un medio que ha recibido treinta mil visitas en cuatro años, desde ciento veinte lugares geográficos distintos, y del que cinco internautas, a quienes no conozco, se declaran seguidores, lo que, desde aquí, les agradezco."
En fin. Crónica a dos voces. La apócrifa de E.H. sobre el encierro, la del toro ensogao en Teruel. Hay quien de mas?. El toro.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 7-07-11.
(...)
"Me encontraba escondido detrás de una columna del bar, esperando ver salir a las fieras de Torre Estrella --hace unos años cornearon de muerte a un compatriota, desde entonces no han vuelto a hacer sangre-- cuando la máquina de barrer ha pasado, con un ruido estruendoso, rozando la fachada del bar.
Al alejarse el sordo ruido del motor, he alcanzado a escuchar a una locutora de la tele pública, que decía, 'valga la redundancia'.
Nena, valga la redundancia, es una herejía ética y estética de la locución. En lugar de usar ese latiguillo nefando, es mejor controlar para no decir cosas redundantes. De nada.
Después de los preliminares, en la pantalla ha aparecido por fin la abigarrada muchedumbre rojiblanca que llena las calles de Pamplona en este día festivo. Observando con atención se podía diferenciar dos grupos de gentes bien distintos. De un lado, los corredores, de aspecto pulcro, parecían bien dormidos, entrenados durante meses para un acto que tiene un componente de prueba atlética, que exige estiramientos y buena forma para evitar caídas inoportunas y percances serios.
Luego está la masa de forasteros que, descontados los que repiten desde hace años y ya forman parte de esta comunidad festiva, incluye variedades muy diversas. Desde los que apestan a vinazo y semen, que vienen a ver lo que pueden pillar y, en muchos casos pillan, no reservan habitación alguna, pasan la noche en la calle, solos o acompañados, con compañía traída o encontrada, y se dejan ver en la madrugada intentado atacar la entrepierna de alguna colega apoyada sobre el muro de una esquina mal iluminada, hasta centenares de periodistas de todo el mundo que han sido enviados para cubrir la información del acontecimiento, desde los siete, o los que sean, continentes.
Aparecen en pantalla, de súbito, los toros bravos de Torre Estrella, con el vaquero detrás, dando varazos a diestro y siniestro, no solo a los morlacos, sino a los curiosos que se acercan demasiado y les impiden hacer bien su trabajo.En el pelaje de los astados dominan los tonos canela y blanco y su comportamiento en el recorrido que ha durado dos minutos parecía ensayado en un plató, tal ha sido la ligereza, limpieza y trayectoria de la manada. He dicho manada, no mamada.
Ni un resbalón en la curva de Estafeta, pocos derrotes visibles, una actitud grupal de la manada obediente a su guía que ha dado como resultado uno de los encierros mas limpios que se recuerdan, y una sorprendente entrada en el ruedo, directos a los chiqueros, sin ningún remoloneo ni distracción.La única cosa que se puede mencionar, al margen de la ordenada y rápida carrera de los toros, ha sido la caída de un manso, que no se levantaba a pesar de los varazos del vaquero, hasta que un corredor se ha puesto delante y ha conseguido que el animal siguiera su camino.
De los corredores hay que decir que su principal dificultad hoy era seguir la endiablada velocidad de los astados, pero como están entrenados para eso, lo han hecho con aparente facilidad, aunque, por mi experiencia personal, no me parece fácil estar delante de un toro.
Ningún herido por asta de toro, solo los consabidos resbalones, caídas y golpes. Alguien habrá salido bien magullado porque, en cierta ocasión, hoy decir a un taurino que basta que una vaquilla te roce con la oreja, para que te haga daño.
En tres palabras. Un encierro limpio. Puesto que no hay nada mas que reseñar, doy por concluida mi crónica del encierro, y cedo la palabra a quien me ha prestado el blog, para que nos hable de sus limitadas experiencias taurinas. E.H."
"Nunca he participado en los sanfermines. Lo mas cerca que he estado ha sido a 356 kilómetros, participando activamente en el Toro Ensogao que sueltan, sin dejar de controlarlo con una maroma, en Teruel, entre otras fechas, en febrero, cuando celebran las fiestas de Isabel de Segura, un invento --afortunado-- de una licenciada en bellas artes, que ni siquiera es de allí, que ha conseguido poner a Teruel en el mapa de las fiestas de invierno, con el atractivo que suponen los mercados callejeros, las gentes vestidas al estilo medieval, los puestos de asados y comidas, los desfiles y la presencia de música antigua que, junto con los halcones y otras rapaces y la arquitectura mudéjar, consiguen recrear con fidelidad el ambiente de la villa en tiempos medievales, epidemias de peste, aparte.
Pero lo mas auténtico de esta fiesta, lo que la enlaza con los sanfermines es el toro. La cultura del toro, tan arraigada en nuestro país, y tan controvertida a la vez por las nuevas generaciones que la ven como una crueldad innecesaria hacia los animales, hasta el punto de que una comunidad, la catalana, se dispone a hacer efectiva la prohibición de casi todos los festejos taurinos, aunque creo que con alguna excepción puntual.
El día que participé en el Toro Ensogao de Teruel, con la plaza del Torico y las calles cercanas atestadas de gente, mi participación consistió en protegerme detrás de una columna de piedra que sostenía uno de los soportales de la plaza, para que, cuando apareciera el toro, no me pillara.
El toro no aparecía, pero las gentes, apenas había salido de los chiqueros de la plaza, antes incluso de que enfilara la estrecha callejuela que había de conducirlo a
nuestro encuentro, gritaban, de tanto en tanto, ¡El toro...! y la muchedumbre de la plaza comenzaba a correr hacia las calles empinadas cercanas, y era un verdadero espectáculo ver moverse esa masa, en circulo, buscando las salidas, y yo los observaba desde detrás de la columna de piedra y pensaba que el auténtico festejo taurino del toro ensogao, éramos nosotros, el público, porque el toro no aparecía por ninguna parte.
Por fin apareció el toro, conducido por quienes, por medio de las sogas que lo sujetaban, controlaban sus desplazamientos. Era un toro negro zaino, no debía pesar seiscientos kilos, pero tenía una alzada y una presencia contundentes. Ante la presencia del astado, se repitieron los movimientos de la muchedumbre en la plaza, esta vez marcados por la cercanía del animal, consentida por quienes sostenían la soga, para dar emoción al espectáculo, pero sin perder nunca el control de sus movimientos, y sus paradas.
Desde detrás de la columna de piedra, vi la presencia muy cercana del animal, en una de sus evoluciones, sentí su respiración, escuché el ruido de sus pezuñas rascando contra el suelo de la plaza, percibí su mirada fija y miope, engolfada en algún cuerpo que se acercaba demasiado, pero en ningún momento tuve la sensación de que asumía riesgos que no había calculado.
Y esa es la historia de mi vida. A base de no asumir demasiados riesgos, solo los que permiten ser calculados, nunca me he permitido una aventura, como supongo que les ocurre a la mayoría de ustedes. Ahora me he hecho mayor y el único riesgo que todavía practico, a diario, es el de aburrir a mis lectores desde el blog. Un riesgo que no solo afecta a mi vida personal, sino a mi incipiente vida pública, si se puede llamar así a escribir en un medio que ha recibido treinta mil visitas en cuatro años, desde ciento veinte lugares geográficos distintos, y del que cinco internautas, a quienes no conozco, se declaran seguidores, lo que, desde aquí, les agradezco."
En fin. Crónica a dos voces. La apócrifa de E.H. sobre el encierro, la del toro ensogao en Teruel. Hay quien de mas?. El toro.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 7-07-11.
miércoles, 6 de julio de 2011
PRESUPUESTOS
He bajado al Maravillas a una hora muy temprana, porque amanece antes, y el periódico del día todavía no estaba sobre el mostrador. En su lugar, estaba al abasto de la clientela el ejemplar caducado de ayer de 'Levante', con sus noticias muertas y algunas arrugas, como de incunable, en sus páginas, aunque todavía no estaba en estado de descomposición. Paso de noticias caducadas y me voy a centrar en opiniones y ocurrencias, que son mas intemporales, o sea.
(...)
Jesús Civera, el periodista opinante que suele emplear un estilete muy afilado para incidir en la subrealidad de la política, parece que ayer tuvo un lápsus oligofrénico a juzgar por el infantilismo de las preguntas, y las respuestas, que visten sus ocurrencias en al artículo ¿Quien teme a la Fórmula 1?.
Para empezar, Civera habla de 18.000 millones de presupuesto (del gobierno de aquí) y cita los 20 millones de Euros que tiene que dedicar para continuar con el 'evento', horrible palabra.
Civera confunde presupuesto con deuda pública, pues de esta se sabe que asciende a ese montante, considerando, además del endeudamiento de las instituciones públicas, el de las empresas creadas con la intención de ocultar esa deuda. En cambio del montante del presupuesto, no el aprobado en sede parlamentaria, sino el que saldrá después de su ejecución, nada sabemos. La ejecución del presupuesto, pese a que suene a asesinato, es en esta comunidad un asunto de magos, de ilusionistas.
Es probable que Gerardo Camps, el responsable en la pasada legislatura de los asuntos presupuestarios, ahora que tiene mas tiempo, haga una gira por todo el país
con su caja mágica para mostrar al público como se puede hacer desaparecer una partida presupuestaria, sacar otra de la manga como si fuera una paloma y, en fin,
al final del espectáculo mostrar al público un sujeto presupuestario cuya faz, vestimenta y apariencia, nada tiene que ver con el que entró en la caja --mágica-- al principio del ejercicio económico.
Esto, en cuanto al uso inadecuado de las cifras por parte de Civera, pero el meollo del asunto es su pregunta, ¿Es lícito que las administraciones inviertan en los acontecimientos de masas para generar economías externas?. La pregunta esta mal formulada. La pregunta pertinente, en mi opinión, es, puesto que esos acontecimientos generan economías externas, ¿No es mas lícito que sean los beneficiarios de esas economías quienes los financien? Hay precedentes ilustres.
Los amigos del prestigio de nuestra monarquía, sobre todo los mallorquines, se han juntado y no hace mucho pusieron la pasta para comprarle un barco nuevo al Rey.
¿Es nuestra monarquía un acontecimiento de masas? No sé. La presencia del Rey y su barco en Mallorca, todos los veranos, seguro que genera economías externas, y la fórmula mas limpia, liberal y apropiada es que los beneficiarios de esas economías
financien esa inversión 'de prestigio'.
¿Que pasa con nuestros empresarios hoteleros y hosteleros? Si son los beneficiarios de las economías externas del acontecimiento de la Fórmula 1, ya están tardando en constituir una asociación de Amigos de la Fórmula 1, y apoquinar los veinte millones para su continuidad. Si, como no se cansan de repetirnos, los beneficios de la 'Fórmula 1' se cuentan por cientos de millones de Euros, no veo porque no pueden destinar menos de un veinte por cien de esos beneficios del capital privado a esa inversión, 'de prestigio'. El mismo razonamiento sería válido para la inminente visita de Benedicto XVI.
El problema de las inversiones 'de prestigio', demasiado presentes en nuestras administraciones públicas, para eso están las privadas, se deriva, creo yo, de dos
causas. La gran cantidad de asesores de marketing infiltrados en la vida pública --
son como una plaga de micronecta scholtzi,un chinche que,según describía ayer en su columna Pîera, organiza bajo el agua el mismo ruido que una orquesta completa.
De ese ruido sinfónico han surgido cosas tan peregrinas como la marca 'España', y otras muchas, una por cada comunidad civil y política, por no hablar de otros logos o imágenes mercantiles que hacen que las administraciones públicas se comporten como multinacionales, ansiosas de vender su marca, su producto.
Esta actividad incansable de los chinches se aplica a un colectivo de políticos que, en general, carecen de capacidad para dirigir y gestionar una multinacional, por eso están en política y no en la General Motors, y compensan esa frustración con una copia idealizada de la gran empresa, que aplican al gobierno de la cosa pública.
El resultado es sencillo de observar. En Heliópolis se dedican veinte millones a un evento que debiera financiarse con fondos privados. Al mismo tiempo, las mujeres que acuden a la revisión ginecológica para prevenir el cáncer de útero, deberán esperar a partir de ahora tres años para someterse a la nueva revisión. El argumento falaz del papelito que les dan para justificar esa medida es que ese proceso oncológico, en su caso, es de desarrollo lento. Y es que las inversiones públicas, todas, con independencia de su cuantía, tienen un coste de oportunidad. Lo que se gasta en una cosa, deja de gastarse en otra. Seguro que tu lo sabes, Civera.
Dime, Civera, si, a la vista de los hechos, tu ocurrencia de ayer no es un desliz oligofrénico, o quizás algo peor, al confundir deuda con presupuesto.
No es el único desliz que apareció en el periódico de ayer. Izquierda Hundida, como la llama un cura libertario amigo, ha soltado la ocurrencia de que hace falta una Red de Ciudades Bombardeadas, quiere fomentar un itinerario para explicar el papel de Heliópolis durante la guerra civil. De eso ya se ocupan, con mas o menos acierto, los historiadores, pero es que esa iniciativa coincide en el tiempo con su apoyo en Castilla la Mancha, mediante la abstención, a un partido que es heredero, en términos históricos, no políticos, de la derecha que financió aquellos bombardeos.
Tíos, os lo tenéis que mirar.
En fin. Presupuestos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 6-07-11.
(...)
Jesús Civera, el periodista opinante que suele emplear un estilete muy afilado para incidir en la subrealidad de la política, parece que ayer tuvo un lápsus oligofrénico a juzgar por el infantilismo de las preguntas, y las respuestas, que visten sus ocurrencias en al artículo ¿Quien teme a la Fórmula 1?.
Para empezar, Civera habla de 18.000 millones de presupuesto (del gobierno de aquí) y cita los 20 millones de Euros que tiene que dedicar para continuar con el 'evento', horrible palabra.
Civera confunde presupuesto con deuda pública, pues de esta se sabe que asciende a ese montante, considerando, además del endeudamiento de las instituciones públicas, el de las empresas creadas con la intención de ocultar esa deuda. En cambio del montante del presupuesto, no el aprobado en sede parlamentaria, sino el que saldrá después de su ejecución, nada sabemos. La ejecución del presupuesto, pese a que suene a asesinato, es en esta comunidad un asunto de magos, de ilusionistas.
Es probable que Gerardo Camps, el responsable en la pasada legislatura de los asuntos presupuestarios, ahora que tiene mas tiempo, haga una gira por todo el país
con su caja mágica para mostrar al público como se puede hacer desaparecer una partida presupuestaria, sacar otra de la manga como si fuera una paloma y, en fin,
al final del espectáculo mostrar al público un sujeto presupuestario cuya faz, vestimenta y apariencia, nada tiene que ver con el que entró en la caja --mágica-- al principio del ejercicio económico.
Esto, en cuanto al uso inadecuado de las cifras por parte de Civera, pero el meollo del asunto es su pregunta, ¿Es lícito que las administraciones inviertan en los acontecimientos de masas para generar economías externas?. La pregunta esta mal formulada. La pregunta pertinente, en mi opinión, es, puesto que esos acontecimientos generan economías externas, ¿No es mas lícito que sean los beneficiarios de esas economías quienes los financien? Hay precedentes ilustres.
Los amigos del prestigio de nuestra monarquía, sobre todo los mallorquines, se han juntado y no hace mucho pusieron la pasta para comprarle un barco nuevo al Rey.
¿Es nuestra monarquía un acontecimiento de masas? No sé. La presencia del Rey y su barco en Mallorca, todos los veranos, seguro que genera economías externas, y la fórmula mas limpia, liberal y apropiada es que los beneficiarios de esas economías
financien esa inversión 'de prestigio'.
¿Que pasa con nuestros empresarios hoteleros y hosteleros? Si son los beneficiarios de las economías externas del acontecimiento de la Fórmula 1, ya están tardando en constituir una asociación de Amigos de la Fórmula 1, y apoquinar los veinte millones para su continuidad. Si, como no se cansan de repetirnos, los beneficios de la 'Fórmula 1' se cuentan por cientos de millones de Euros, no veo porque no pueden destinar menos de un veinte por cien de esos beneficios del capital privado a esa inversión, 'de prestigio'. El mismo razonamiento sería válido para la inminente visita de Benedicto XVI.
El problema de las inversiones 'de prestigio', demasiado presentes en nuestras administraciones públicas, para eso están las privadas, se deriva, creo yo, de dos
causas. La gran cantidad de asesores de marketing infiltrados en la vida pública --
son como una plaga de micronecta scholtzi,un chinche que,según describía ayer en su columna Pîera, organiza bajo el agua el mismo ruido que una orquesta completa.
De ese ruido sinfónico han surgido cosas tan peregrinas como la marca 'España', y otras muchas, una por cada comunidad civil y política, por no hablar de otros logos o imágenes mercantiles que hacen que las administraciones públicas se comporten como multinacionales, ansiosas de vender su marca, su producto.
Esta actividad incansable de los chinches se aplica a un colectivo de políticos que, en general, carecen de capacidad para dirigir y gestionar una multinacional, por eso están en política y no en la General Motors, y compensan esa frustración con una copia idealizada de la gran empresa, que aplican al gobierno de la cosa pública.
El resultado es sencillo de observar. En Heliópolis se dedican veinte millones a un evento que debiera financiarse con fondos privados. Al mismo tiempo, las mujeres que acuden a la revisión ginecológica para prevenir el cáncer de útero, deberán esperar a partir de ahora tres años para someterse a la nueva revisión. El argumento falaz del papelito que les dan para justificar esa medida es que ese proceso oncológico, en su caso, es de desarrollo lento. Y es que las inversiones públicas, todas, con independencia de su cuantía, tienen un coste de oportunidad. Lo que se gasta en una cosa, deja de gastarse en otra. Seguro que tu lo sabes, Civera.
Dime, Civera, si, a la vista de los hechos, tu ocurrencia de ayer no es un desliz oligofrénico, o quizás algo peor, al confundir deuda con presupuesto.
No es el único desliz que apareció en el periódico de ayer. Izquierda Hundida, como la llama un cura libertario amigo, ha soltado la ocurrencia de que hace falta una Red de Ciudades Bombardeadas, quiere fomentar un itinerario para explicar el papel de Heliópolis durante la guerra civil. De eso ya se ocupan, con mas o menos acierto, los historiadores, pero es que esa iniciativa coincide en el tiempo con su apoyo en Castilla la Mancha, mediante la abstención, a un partido que es heredero, en términos históricos, no políticos, de la derecha que financió aquellos bombardeos.
Tíos, os lo tenéis que mirar.
En fin. Presupuestos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 6-07-11.
martes, 5 de julio de 2011
CICLOS
Los informativos de ayer repitieron, con insistencia machacona, las declaraciones eufóricas casi hasta la histeria de algún/a responsable del ministerio de trabajo que trasladaba a la opinión las cifras estadísticas del desempleo con un triunfalismo desesperado porque, al parecer, hay unos miles de trabajadores mas ocupados y, en términos´acumulados, son doscientos mil los que han encontrado un empleo --temporal-- en los últimos meses.
¿Se imaginan un bar con doscientos mil camareros? Esa es la imagen que percibo al conocer esas estadísticas, pues, aunque me duele coincidir con la derecha en mi percepción, no puedo dejar de percibir esa mejora en nuestro mercado de trabajo como un fenómeno estacional ligado a la temporada alta del turismo en nuestro país, es decir, se trataría de un ciclo corto, marcado por la estacionalidad, inserto en un ciclo mas largo y persistente de posible estancamiento económico.
(...)
Antes de comenzar esta entrada he tratado de documentarme sobre el concepto de ciclo en mi viejo diccionario enciclopédico, pero mi Espasa, tal vez por ser una edición pre democrática, dedica página y media a describir todas las acepciones posibles del término, se extiende sobre su significado en física y química, alude al ciclo anovular --que nada tiene que ver con cuestiones de sexo anal, para nada-- aquel en que no se realiza la ovulación en la mujer, pero guarda un ominoso silencio sobre los ciclos económicos, tal vez porque el estudioso que mayor fama alcanzó en el estudio de esos ciclos económicos tenía un apellido marcadamente soviético, Kondratieff, y esos orígenes intelectuales debían estar proscritos para los redactores del diccionario.
Al menos, podían haberse referido a los antecedentes bíblicos de los ciclos económicos, ya saben lo de los siete años de vacas gordas, y siete años de vacas flacas, que ahora nos sería de utilidad pues, si las políticas públicas y las actitudes de los empresarios privados permanecen invariables y, como sostengo en alguna página del blog, nos pueden llevar a una década de estancamiento, dado que han transcurrido los tres primeros años, nos quedarían aún siete años de vacas flacas.
Pero lo de los ciclos de siete años alternativos de prosperidad y adversidad, parece tener su origen mas en las crecidas del rio Nilo que en las oscilaciones de nuestra economía, por lo que no hay que tomarlo en serio.
Kondratieff dedicó sus esfuerzos intelectuales al estudio de los ciclos largos, de cincuenta años, llamados ciclos de Kondratieff, y esa perspectiva histórica tiene la ventaja de que, en lugar de enmerdarte con la burbuja inmobiliaria, y mirar solo a los últimos quince años, esa mirada larga te permite entender mejor los cambios en las relaciones laborales, por ejemplo, y las actitudes de los monopolistas que, ahora, sin la competencia del socialismo real en los mercados laborales europeos, hacen de su capa un sayo e imponen sus políticas, radicalmente diferentes de las que prevalecieron en la Europa de los equilibrios políticos en la segunda mitad del siglo XX.
La segunda mitad del siglo XX, en sus inicios, se caracterizó por dos factores históricos muy visibles, la necesidad de la reconstrucción europea después de la II Guerra Mundial, y la competencia entre sistemas, en la que surgió la idea de la Economía social de Mercado.
La política económica keynesiana, simplificando, la puesta en marcha de la máquina de hacer billetes para financiar grandes inversiones con dinero público con el fin de reconstruir una economía depauperada por la guerra, obtuvo resultados en muy poco tiempo y la economía de los sesenta era ya generadora de puestos de trabajo, crecimiento y riqueza suficiente para permitir el nacimiento y consolidación de la Unión Europea.
Al mismo tiempo, la necesidad de competir con un sistema social distinto, el socialismo real, llevó, por medio de la aplicación de la Economía social de Mercado, en Alemania, y por la influencia de la social democracia en los países vecinos del gran adversario, a una distribución de la renta que produjo un aumento espectacular de los niveles de vida y atención social de la población laboral europea, con lo que el objetivo esencial del capitalismo europeo en aquel tiempo, demostrar la superioridad del capitalismo liberal occidental sobre las economías planificadas, quedó ampliamente superado.
Si Kondratieff estuviera ahora entre nosotros, constataría con satisfacción que su teoría de los ciclos largos, de aproximadamente medio siglo, 1.945-1.995, en este
caso marcado por la caída del muro de Berlín unos años antes, en 1.989, y por la reunificación de Alemania, es de oportuna aplicación a los sucesos económicos de ese medio siglo.
Kondratieff veía los ciclos mas cortos, marcados por disfunciones en la producción y el consumo, con sus consecuencias financieras, como episodios inscritos en la larga onda de los ciclos largos de la economía, una perspectiva que se ha perdido, a partir del momento en que el capitalismo neoliberal se ha desprendido de sus adherencias sociales, dado que ya no hay adversario, no hay competidor, y sus postulados se han reducido al máximo beneficio, sin considerar las necesidades sociales, ni siquiera la conservación del sistema.
Es en este contexto en el que se comprende muy bien el ataque indiscriminado a las relaciones laborales, el predominio de la temporalidad, la brutalidad de los despidos masivos, convirtiendo el desempleo en una fórmula para que el Estado subsidiario del capital apechugue con el mayor coste de la crisis.
La singularidad de esta crisis es que, así como en los ciclos cortos de Kondratieff
las crisis se originaban por variaciones temporales en la producción y el consumo, en este caso es la especulación financiera quien la ha desatado. Al mismo tiempo, la incapacidad financiera de los Estados para hacer frente a los brutales costes del desempleo, está desencadenando unas políticas de austeridad que son un ejemplo de la política mas errónea que cabe imaginar para reactivar la demanda.
No se ve, por ahora, ningún signo de que esas políticas vayan a cambiar. Si todo permanece como está, mi intuición, compartida por gentes muy notables, como Paul Krugman, Stigler, y otros ilustres economistas, es que podemos estar en el inicio de una década de estancamiento, de la que la única fórmula conocida para salir es la política keynesiana, es decir una política de gasto e inversión de los Estados que permita sustituir a la inversión privada, ahora oculta en sus madrigueras, y que solo saldrá a través del impulso del Estado. Es cierto que una política así es inflacionista, pero Krugman no cesa de repetir que una tasa moderada de inflación es menos mala que un desempleo galopante.
Con esta mirada cíclica sobre la realidad, el cómico y patético esfuerzo de nuestros gobernantes, que han llegado a decir que estamos saliendo de la crisis, solo porque se ha producido una mejora estacional en el desempleo, revela un desconocimiento absoluto del funcionamiento de las economías, o , si no es el caso, constituye un lamentable intento de tomadura de pelo a todos los ciudadanos.
En fin. Ciclos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 5-07-11.
¿Se imaginan un bar con doscientos mil camareros? Esa es la imagen que percibo al conocer esas estadísticas, pues, aunque me duele coincidir con la derecha en mi percepción, no puedo dejar de percibir esa mejora en nuestro mercado de trabajo como un fenómeno estacional ligado a la temporada alta del turismo en nuestro país, es decir, se trataría de un ciclo corto, marcado por la estacionalidad, inserto en un ciclo mas largo y persistente de posible estancamiento económico.
(...)
Antes de comenzar esta entrada he tratado de documentarme sobre el concepto de ciclo en mi viejo diccionario enciclopédico, pero mi Espasa, tal vez por ser una edición pre democrática, dedica página y media a describir todas las acepciones posibles del término, se extiende sobre su significado en física y química, alude al ciclo anovular --que nada tiene que ver con cuestiones de sexo anal, para nada-- aquel en que no se realiza la ovulación en la mujer, pero guarda un ominoso silencio sobre los ciclos económicos, tal vez porque el estudioso que mayor fama alcanzó en el estudio de esos ciclos económicos tenía un apellido marcadamente soviético, Kondratieff, y esos orígenes intelectuales debían estar proscritos para los redactores del diccionario.
Al menos, podían haberse referido a los antecedentes bíblicos de los ciclos económicos, ya saben lo de los siete años de vacas gordas, y siete años de vacas flacas, que ahora nos sería de utilidad pues, si las políticas públicas y las actitudes de los empresarios privados permanecen invariables y, como sostengo en alguna página del blog, nos pueden llevar a una década de estancamiento, dado que han transcurrido los tres primeros años, nos quedarían aún siete años de vacas flacas.
Pero lo de los ciclos de siete años alternativos de prosperidad y adversidad, parece tener su origen mas en las crecidas del rio Nilo que en las oscilaciones de nuestra economía, por lo que no hay que tomarlo en serio.
Kondratieff dedicó sus esfuerzos intelectuales al estudio de los ciclos largos, de cincuenta años, llamados ciclos de Kondratieff, y esa perspectiva histórica tiene la ventaja de que, en lugar de enmerdarte con la burbuja inmobiliaria, y mirar solo a los últimos quince años, esa mirada larga te permite entender mejor los cambios en las relaciones laborales, por ejemplo, y las actitudes de los monopolistas que, ahora, sin la competencia del socialismo real en los mercados laborales europeos, hacen de su capa un sayo e imponen sus políticas, radicalmente diferentes de las que prevalecieron en la Europa de los equilibrios políticos en la segunda mitad del siglo XX.
La segunda mitad del siglo XX, en sus inicios, se caracterizó por dos factores históricos muy visibles, la necesidad de la reconstrucción europea después de la II Guerra Mundial, y la competencia entre sistemas, en la que surgió la idea de la Economía social de Mercado.
La política económica keynesiana, simplificando, la puesta en marcha de la máquina de hacer billetes para financiar grandes inversiones con dinero público con el fin de reconstruir una economía depauperada por la guerra, obtuvo resultados en muy poco tiempo y la economía de los sesenta era ya generadora de puestos de trabajo, crecimiento y riqueza suficiente para permitir el nacimiento y consolidación de la Unión Europea.
Al mismo tiempo, la necesidad de competir con un sistema social distinto, el socialismo real, llevó, por medio de la aplicación de la Economía social de Mercado, en Alemania, y por la influencia de la social democracia en los países vecinos del gran adversario, a una distribución de la renta que produjo un aumento espectacular de los niveles de vida y atención social de la población laboral europea, con lo que el objetivo esencial del capitalismo europeo en aquel tiempo, demostrar la superioridad del capitalismo liberal occidental sobre las economías planificadas, quedó ampliamente superado.
Si Kondratieff estuviera ahora entre nosotros, constataría con satisfacción que su teoría de los ciclos largos, de aproximadamente medio siglo, 1.945-1.995, en este
caso marcado por la caída del muro de Berlín unos años antes, en 1.989, y por la reunificación de Alemania, es de oportuna aplicación a los sucesos económicos de ese medio siglo.
Kondratieff veía los ciclos mas cortos, marcados por disfunciones en la producción y el consumo, con sus consecuencias financieras, como episodios inscritos en la larga onda de los ciclos largos de la economía, una perspectiva que se ha perdido, a partir del momento en que el capitalismo neoliberal se ha desprendido de sus adherencias sociales, dado que ya no hay adversario, no hay competidor, y sus postulados se han reducido al máximo beneficio, sin considerar las necesidades sociales, ni siquiera la conservación del sistema.
Es en este contexto en el que se comprende muy bien el ataque indiscriminado a las relaciones laborales, el predominio de la temporalidad, la brutalidad de los despidos masivos, convirtiendo el desempleo en una fórmula para que el Estado subsidiario del capital apechugue con el mayor coste de la crisis.
La singularidad de esta crisis es que, así como en los ciclos cortos de Kondratieff
las crisis se originaban por variaciones temporales en la producción y el consumo, en este caso es la especulación financiera quien la ha desatado. Al mismo tiempo, la incapacidad financiera de los Estados para hacer frente a los brutales costes del desempleo, está desencadenando unas políticas de austeridad que son un ejemplo de la política mas errónea que cabe imaginar para reactivar la demanda.
No se ve, por ahora, ningún signo de que esas políticas vayan a cambiar. Si todo permanece como está, mi intuición, compartida por gentes muy notables, como Paul Krugman, Stigler, y otros ilustres economistas, es que podemos estar en el inicio de una década de estancamiento, de la que la única fórmula conocida para salir es la política keynesiana, es decir una política de gasto e inversión de los Estados que permita sustituir a la inversión privada, ahora oculta en sus madrigueras, y que solo saldrá a través del impulso del Estado. Es cierto que una política así es inflacionista, pero Krugman no cesa de repetir que una tasa moderada de inflación es menos mala que un desempleo galopante.
Con esta mirada cíclica sobre la realidad, el cómico y patético esfuerzo de nuestros gobernantes, que han llegado a decir que estamos saliendo de la crisis, solo porque se ha producido una mejora estacional en el desempleo, revela un desconocimiento absoluto del funcionamiento de las economías, o , si no es el caso, constituye un lamentable intento de tomadura de pelo a todos los ciudadanos.
En fin. Ciclos.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 5-07-11.
lunes, 4 de julio de 2011
LA TORMENTA
"He pasado el fin de semana en la casa de la sierra, con un tiempo algo variable, propio de la altitud a la que nos encontrábamos, rodeados por algunos picos que alcanzan algo mas de mil metros de altura, en lo alto de una colina que no llega a los novecientos. El primer día sopló un fuerte viento del sureste con rachas algo violentas. Un viento cálido que molestaba fuera de la casa. Al atardecer del segundo día se desató una tormenta que pudimos contemplar durante el largo rato que duró su aparición, su actividad, su desarrollo y su tránsito hacia otros lugares.
(...)
Una masa de nubes negras entró lentamente desde el sureste hasta ocupar todo el horizonte visible desde debajo del pórtico donde habíamos visto ponerse el sol unos minutos antes. Debían ser poco mas de las nueve. Una desgarradura de las nubes de tormenta dejaba ver un trozo de luna, como una tajada de melón, que aparecía y desaparecía, alternativamente, siguiendo los caprichos del viento que dibujaba entre la masa de nubes espacios de luz.
Era difícil calcular la distancia a la que se encontraba la tormenta hasta que comenzó su actividad eléctrica. Al principio, solo era visible,pero apenas audible, el estruendo de los estampidos tardaba en llegar hasta nosotros mas de un minuto, así que calculamos, a ojo, que el centro de la perturbación se encontraba por lo menos a doce kilómetros del lugar desde donde observábamos.
Poco a poco, el tiempo transcurrido entre la aparición de los relámpagos y la percepción de su sonido, se acortaba, así que parecía que se acercaba hacia nosotros. La espectacularidad de la actividad tormentosa, aumentó.
En la radio, sonaba la música emitida por Radio Clásica. Una sonata. Música barroca francesa, me pareció. El contraste entre aquellos compases, salidos de una cabeza cartesiana, obstinada en que sonase con una exactitud previsible y minuciosa, con un control absoluto del tempo, de la musicalidad, como si de un ejercicio matemático se tratara, y la visión de la tormenta, de las fuerzas naturales desatadas sin ningún control humano, me chocó.
No se porqué, pensé en los hombres del neolítico, para los que, tal vez, ver a las fuerzas naturales manifestarse como ahora las vemos, sin disponer todavía de una base racional para interpretar y entender los fenómenos naturales, debió ser una experiencia radicalmente distinta de la nuestra ante el mismo fenómeno.
Por fuerza tuvo que ser la suya una interpretación mítica, marcada por un respeto sagrado a la naturaleza, mientras que los hombres contemporáneos, los de las civilizaciones urbanas, raras veces adoptan una actitud contemplativa de los fenómenos naturales, entre otras cosas porque las configuraciones urbanas no permiten contemplarlos con una perspectiva completa.
En ese sentido, es un privilegio tener acceso a un punto de observación en la montaña, ver la tormenta como un fenómeno en movimiento, completo, verla acercarse,
reconocer su sombra en los montes cercanos, comprobar como reconfigura el paisaje,
a través de las luces y sombras que proyecta, y percibir lo imprevisible de su ruta
pues, cuando crees que se acerca en tu dirección, los vientos caprichosos se la llevan y desaparece, lentamente, del horizonte, tal como apareció, sin que puedas predecir si su marcha es definitiva, o solo da un giro para volver a aparecer.
La sonata dejó de escucharse en la radio, pero la tormenta tardó algo mas en desaparecer del todo. Cuando lo hizo, la luna con forma de raja de melón desaparecía hundiéndose por el horizonte, y todo quedó en silencio.
Solo se escuchó, a lo lejos, el remoto eco de la tormenta que se dirigía hacia otro lado."
En fin. La Tormenta.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 4-07-11.
(...)
Una masa de nubes negras entró lentamente desde el sureste hasta ocupar todo el horizonte visible desde debajo del pórtico donde habíamos visto ponerse el sol unos minutos antes. Debían ser poco mas de las nueve. Una desgarradura de las nubes de tormenta dejaba ver un trozo de luna, como una tajada de melón, que aparecía y desaparecía, alternativamente, siguiendo los caprichos del viento que dibujaba entre la masa de nubes espacios de luz.
Era difícil calcular la distancia a la que se encontraba la tormenta hasta que comenzó su actividad eléctrica. Al principio, solo era visible,pero apenas audible, el estruendo de los estampidos tardaba en llegar hasta nosotros mas de un minuto, así que calculamos, a ojo, que el centro de la perturbación se encontraba por lo menos a doce kilómetros del lugar desde donde observábamos.
Poco a poco, el tiempo transcurrido entre la aparición de los relámpagos y la percepción de su sonido, se acortaba, así que parecía que se acercaba hacia nosotros. La espectacularidad de la actividad tormentosa, aumentó.
En la radio, sonaba la música emitida por Radio Clásica. Una sonata. Música barroca francesa, me pareció. El contraste entre aquellos compases, salidos de una cabeza cartesiana, obstinada en que sonase con una exactitud previsible y minuciosa, con un control absoluto del tempo, de la musicalidad, como si de un ejercicio matemático se tratara, y la visión de la tormenta, de las fuerzas naturales desatadas sin ningún control humano, me chocó.
No se porqué, pensé en los hombres del neolítico, para los que, tal vez, ver a las fuerzas naturales manifestarse como ahora las vemos, sin disponer todavía de una base racional para interpretar y entender los fenómenos naturales, debió ser una experiencia radicalmente distinta de la nuestra ante el mismo fenómeno.
Por fuerza tuvo que ser la suya una interpretación mítica, marcada por un respeto sagrado a la naturaleza, mientras que los hombres contemporáneos, los de las civilizaciones urbanas, raras veces adoptan una actitud contemplativa de los fenómenos naturales, entre otras cosas porque las configuraciones urbanas no permiten contemplarlos con una perspectiva completa.
En ese sentido, es un privilegio tener acceso a un punto de observación en la montaña, ver la tormenta como un fenómeno en movimiento, completo, verla acercarse,
reconocer su sombra en los montes cercanos, comprobar como reconfigura el paisaje,
a través de las luces y sombras que proyecta, y percibir lo imprevisible de su ruta
pues, cuando crees que se acerca en tu dirección, los vientos caprichosos se la llevan y desaparece, lentamente, del horizonte, tal como apareció, sin que puedas predecir si su marcha es definitiva, o solo da un giro para volver a aparecer.
La sonata dejó de escucharse en la radio, pero la tormenta tardó algo mas en desaparecer del todo. Cuando lo hizo, la luna con forma de raja de melón desaparecía hundiéndose por el horizonte, y todo quedó en silencio.
Solo se escuchó, a lo lejos, el remoto eco de la tormenta que se dirigía hacia otro lado."
En fin. La Tormenta.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 4-07-11.
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