TERCIOPELO AZUL

Ahora que Dennis Hopper interpreta su papel mas duro, el de enfermo terminal sin esperanzas de supervivencia, recuerdo la impresión que me causó una de las cuatro decenas de películas que interpretó este actor tan importante, sin contar las que dirigió a lo largo de su dilatada vida en la profesión.

Terciopelo Azul. Dirigida por David Lynch, interpretada por Hooper y por Isabella Rossellini, fue una de esas raras películas que te dejan al visionarla una huella permanente que no se borra con el paso del tiempo, a pesar de que es de hace casi veinticinco años.

Hay cuatro elementos, a mi parecer, que inciden en esa capacidad de permanencia en el recuerdo de esa película tan especial. La música. La presencia de la Rossellini, la dirección de Lynch, y la peculiar presencia en la pantalla de Hooper, cuya respiración forzada a través de una máscara de oxígeno, pone un fondo sonoro inquietante que está presente durante toda la historia.

El tema musical que se repite durante toda la película, es uno de esos hallazgos que combinando de un modo perfecto la repetición con la singularidad melódica, consigue, con su aparente facilidad, el efecto de introducirse en el cerebro del espectador, a través del oído, con vocación de permanencia.

La fuerza erótica de la Rosellini en esta película es de una potencia pocas veces alcanzada en el cine y evoca el perfume de la animalidad mas primitiva, pasada por el filtro de la sofisticación, en cuanto a la dirección de Lynch, deja marcada la misma huella personal que suele ser habitual en cada una de sus películas.

Pero lo que mas conservo en el recuerdo es la presencia en la pantalla de Hooper respirando con dificultad tras la máscara de oxígeno y produciendo ese sonido ronco, asmático, que produce en el espectador un extraño desasosiego, una tensión singular, durante toda la película.

Hooper es un actor muy singular, que ha pasado por etapas muy diferenciadas en su carrera. Una primera etapa que se caracteriza por la interpretación de personajes rebeldes, anti sistema, contra culturales, desde aquel 'Rebelde sin Causa' que compartió con James Dean, pasando por Apocalipsis Now. No me parece que haya sido muy apreciado por el aparato que controla Hollywood. Una parte de su carrera de actor, y sus trabajos como director, están mas vinculados al cine independiente que a las estructuras de las grandes firmas del cine americano.

En las últimas etapas de su carrera intentó deshacerse del cliché de enfant terrible, de tipo problemático siempre dispuesto a sumarse a causas contra el sistema, pero los aficionados han continuado asociándolo a la revolución lisérgica y de costumbres que agitó California en la época de los hippies, antes de que la era del Presidente Ronald Reagan –-otro actor de Hollywood-- impusiera una ola de conservadurismo que barrió los restos de aquel intento de mutación cultural.

Terciopelo Azul. Una película difícil de encontrar, que desapareció de las pantallas hace décadas. No creo que esté disponible en DVD. Ahora que el pobre Dennis está a punto de palmar, es posible que los programadores de las televisiones de cable, y de las filmotecas, rebusquen en los archivos y, cualquier día de estos, nos sorprendan con su reposición.

Lamentablemente, para que eso suceda, tendremos que ver primero en los periódicos la noticia de la desaparición de Dennis Hooper, uno de los actores mas interesantes del último medio siglo, de la misma generación que James Dean, pero mucho mas longevo.

En fin. Terciopelo Azul. Blue Velvet.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 5-05-10.