“Conrado es un tipo corriente, bajito, medio calvo y algo soñador que comparte una vivienda con su mujer, que pesa unos ciento cuarenta kilos, aunque el único vínculo que los une es la hipoteca, de la que no se pueden separar.
Trabajó de camarero y cuando se quedó en el paro vivía una vida resignada, porque no encontraba motivos que le animaran a salir de su resignación, hasta que conoció a una chica colombiana que le cambió la vida. Cincuentón y poco atractivo para las mujeres, Conrado no se preguntó que veía en el aquella chica dulce y educada, cuya entonación al hablar tenía una cadencia que evocaba los sonidos del puerto fluvial de Barranquilla, donde María Guadalupe se había criado, después de que su padre, procedente del departamento de Antioquía, se trasladó allí para instalarse en un modesto negocio de suministros para los buques que fondeaban en ese puerto.
Conrado nada sabía de Colombia, solo le sonaba su producción de café por su condición de camarero, pero ilusionado como estaba por el amor sobrevenido con la muchacha colombiana, comenzó a elaborar una fantasía sobre ese país, no cesó de preguntar cosas a la muchacha sobre su tierra para saber mas, y juntos comenzaron a elaborar un difuso proyecto que les incluía a los dos y al lugar mágico que Conrado comenzaba a descubrir a través de sus ilusiones, pero no se extendía a la mujer de ciento cuarenta kilos que compartía hipoteca con el.
Estimulado por ese proyecto y por la compañía física de la muchacha que le sacó de su resignación, Conrado comenzó a moverse mas activamente para salir de sus limitaciones económicas.Consiguió gracias a las influencias buscadas entre amigos y vecinos, un trabajo en la planta de basuras de Heliópolis, estabilizó su situación económica y, cuando el proyecto difuso que ambos, la chica colombiana y el, habían acariciado, comenzó a tomar la forma de un viaje a Colombia sin retorno, los dos juntos, para instalarse allí, Conrado acordó con la empresa donde trabajaba su prejubilación, lo que suponía una entrada de dinero en efectivo por la indemnización que ya tenía su destino prefijado.
Una vez prejubilado, Conrado mandó por delante a María Guadalupe a Colombia, con la suma de dinero que había conseguido al extinguir su contrato, con el encargo de que comprara una casa allí donde se instalarían ambos, una vez el hubiera terminado todos los trámites y actuaciones que su nuevo estado de casi jubilado le demandaba.
Conrado no volvió a saber mas de la chica, una vez esta tomó el avión con destino a su país con el bolso bien forrado de pasta. En realidad, no encuentro mala fe ni premeditación en la conducta de la chica colombiana, por lo que he sabido, fueron las fantasías de Conrado las que empujaron con vehemencia a consentir en aquel plan a aquella chica, quien, seguramente, nunca buscó un matrimonio de conveniencia, que por otra parte no se produjo, sino que se vio finalmente con la posesión de una suma de dinero relativamente importante y libre de las ataduras con el majara de Conrado, sin haberlo planeado.
Conrado se encontró en una situación semejante a la que tenía antes de conocer a María Guadalupe.
La pensión que recibía no era mayor que la prestación de desempleo que cobraba antes y apenas le daba para vivir. Volvió al domicilio familiar, donde le esperaban su hipoteca y su mujer y como entre ambos, apenas podían con aquella carga, aunque estaba jubilado, se las arregló para conseguir un trabajo extra como guardia de seguridad en un local nocturno.
Esta mañana, al terminar el turno de noche, ha aparecido por el Maravillas y contaba, a quien quisiera oírle, su historia con María Guadalupe. Afirmaba, muy seguro, que los tres meses que pasó con ella fueron los mejores de su vida, que no se arrepentía de nada, y que de encontrarse en la misma situación, volvería a hacer exactamente lo mismo que hizo. Valió la pena, dijo”
Oyes una historia como esta, en la que no estás implicado con el protagonista por ningún vínculo y piensas, este tío es gilipollas. ¿O será un soñador? No me quedó claro, después de escuchar la historia de Conrado y María Guadalupe, que matrimonios de conveniencia son los mas numerosos, si los de las personas de distinta nacionalidad en los que una de las partes busca obtener alguna ventaja, o aquellos otros en los que los cónyuges siguen juntos solo porque tienen que pagar una hipoteca común.
LOHENGRIN. (CIBERLOHENGRIN.COM) 12-03-09.
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