martes, 7 de abril de 2009

CLASE MEDIA

Está cayendo un diluvio de mucho cuidado. En lugar de salir al cine, voy a dedicar la tarde a la reflexión en voz alta sobre un asunto que ha llamado mi atención esta mañana, mientras leía en el Maravillas una columna de Alberto Moncada, Presidente de Sociólogos sin fronteras. Moncada habla de las clases medias y deja entrever su preocupación por si la deriva de la crisis económica lleva a esos segmentos de la sociedad a favorecer sistemas autoritarios, como ya sucedió en el pasado en la Alemania de la República de Weimar.

Empezaré por el principio. Otras veces empiezo por el final, como en la página Marismas del Sur, pero el asunto de hoy, la clase media, exige un enfoque mas analítico que literario.¿Que es eso de la clase media? A primera vista, parece un espacio social que se atribuye a quienes no son lo bastante ricos, ni lo bastante pobres, sin embargo, el propio Moncada se incluye entre los pobres, con lo que la cosa se complica.

El estudio de las relaciones económicas de producción condujo a Marx a una descripción de la sociedad de su tiempo en un escenario de clases antagónicas, la clase proletaria, que nada tenía, salvo sus manos para trabajar, la clase burguesa, propietaria de los medios de producción, y supongo que en el medio estarían los pequeños propietarios, los campesinos con algo de tierra, los tenderos, leguleyos y demás, esos que, andando el tiempo, fueron el caldo de cultivo del que bebió la Alemania nazi, y que parecen preocupar al sociólogo citado.

Aún no tengo claro que es lo que se puede entender hoy por clase media. Mi viejo Espasa, con sus lomos doloridos por tanta consulta, tal vez pueda arrojar algo de luz. “Clase Social. Cada una de las categorías en que se considera dividida la sociedad por razones de profesión o posición económica.”
Ya me voy aclarando. De acuerdo con esta definición, Moncada sería, por su profesión, clase media, pero por su posicionamiento político podría calificarse, tal vez, de desclasado, alguien que niega pertenecer a su clase social, por defender a los mas débiles que pertenecen a otra, sin que se le pueda considerar del todo integrado en una u otra. En cierta medida, un outsider, alguien que se posiciona en la periferia del sistema, o de la clase que le es propia.

Pero no personalicemos, vamos al núcleo del asunto. “Clase obrera. Nombre que recibe el conjunto de los obreros.” Joder, con el Espasa, que laconismo. “Clase Media. Categoría social que, con arreglo a sus posibilidades económicas, principalmente, se hallaba entre los nobles y ricos y la de quienes vivían del jornal o salario, clase proletaria. Estaba constituida por quienes ejercían profesiones liberales, comerciantes, pequeños rentistas (…) con el aumento del nivel de vida de la clase asalariada, el incremento creciente del factor económico en la vida social (…) la clase media va perdiendo significación”

En 1.964, Herbert Marcuse publica “El Hombre Unidimensional” y su temprana intuición de la sociedad de consumo anticipa, treinta años antes de que viviéramos plenamente esa realidad en España, un nuevo tipo de sociedad donde ya no es la condición del hombre, su quehacer de obrero o profesional, de agricultor o pequeño comerciante, su pertenencia a una u otra “clase social” y las relaciones entre esas clases lo que determina la dirección de esa sociedad, que es una dirección única, no alterada, ni cuestionada por sus miembros, cualquiera que sea el lugar que les corresponda en ella con arreglo a la vieja división marxiana, y que está conducida por el conglomerado financiero y empresarial que hemos dado en llamar sistema.

La preocupación de Moncada por la deriva de las clases medias que podría favorecer sistemas autoritarios a causa de la profundidad de la crisis que ha hecho saltar por los aires el modelo consumista, se sustenta, creo yo, en un análisis de Marx que, quien lo diría, está de plena actualidad,
“El infraconsumo de las clases obreras traerá la ruina de la economía capitalista, porque elimina la mano de obra y crea el ejército(..) del paro”

Pero ni el mundo actual es la República de Weimar, aunque su grado de autoritarismo emboscado en los sistemas de democracia formal ya es considerable, ni las clases sociales se comportan como entonces. A mi me parece que una de las consecuencias mas probables de la crisis actual y de su eventual desenlace, es que el conglomerado financiero y empresarial del que Obama es, en cierta medida, portavoz y garante, aunque haga gestos de autoridad sobre ellos, no va a permitir la ruina de “su” capitalismo, es decir, que van a exportar a terceros países las consecuencias de la crisis, para tratar de mantener un cierto nivel de estabilidad en las economías occidentales.

En consecuencia, es posible que sea en esos países donde aparezca inestabilidad, devaluaciones monetarias y conflictos sociales agudos .En ese sentido, es previsible que todas las organizaciones que añaden al enunciado que las nombra la expresión “sin fronteras”, tengan mas trabajo allí del que sería deseable. Por el momento, con la información disponible, yo lo veo así.

Para terminar, hablando de clases, ya expliqué en la página ARISTÓCRATAS, porqué me considero un aristócrata, nada de clase media. Mi abuelo era tipógrafo. Sabía leer. Pertenecía a una élite social, la de los proletarios que sabían leer, que estaban informados. Mi padre fue estibador, toda su vida, también sabía leer. Personifico la tercera generación de trabajadores ilustrados. Ahora que lo pienso, después de la reflexión hecha a costa del sociólogo Moncada, me reconozco, no como aristócrata, sino como un desclasado. El hecho de haber cursado estudios universitarios me ha convertido en un desclasado, alguien que está en la periferia del sistema o de una clase social, sin que conserve todos los atributos que le relacionan con sus orígenes.

Es el precio que se paga cuando se opta por el conocimiento como un medio de progreso humano.
Por cierto, cuantas mas personas se apunten al conocimiento, a la información, al pensamiento libre y crítico, todos estaremos en mejores condiciones de enfrentarnos a las amenazas totalitarias, se deriven o no de una situación de crisis económica. Es una opinión.

LOHENGRIN. (CIBERLOHENGRIN.COM) 7-04-09.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios