lunes, 27 de agosto de 2012

PEDRO SALINAS

Antes de hacer la maleta para irnos a Madrid mañana, hemos ido a la biblioteca a devolver un libro que tenía en préstamo Encarna. Una historia de Matilde Salvador que incluye un personaje femenino, Hipatia, que le sirvió a Amenábar para armar su película Ágora.

De paso he trincado un par de libros, uno, de Pedro Salinas, poeta y editor, 'La voz a ti debida...' lo he abierto, al azar, por la página 109 y aunque supongo que estará en Wikipedia, he decidido divulgar ese texto, aquí, por razones que luego diré. El otro, de Bernardo Atxaga, no lo he abierto aún.
(...)
Lo que me ha llamado la atención del libro de Salinas, aparte del texto al que aludiré, es la información contenida en la lengüeta de papel pegada en la cubierta, de la que se desprende que la última vez que se prestó fue en la fecha del 10 de septiembre de 2007.

Es decir, el libro ha permanecido, digamos en hibernación, o sumergido en los anaqueles de la biblioteca, cinco años, sin que ninguna mano amiga, curiosa o experta, ningún lector letrado, o menos letrado, haya sentido la necesidad de compartir con el una parte de su tiempo.

 Si yo fuera ese libro, me sentiría embargado por una profunda tristeza. Al parecer, estamos tan enmerdados con el menor número de vehículos vendidos, los diez mil puntos perdidos por el Ibex 35, la deuda pública o el hecho de que nuestras decisiones políticas estén en manos de terceros, que hemos perdido la sensibilidad para la belleza. 

Tan grave como que nuestras variables macro económicas indiquen un descenso acelerado desde hace cinco años, me parece a mi, es que un libro permanezca igual periodo de tiempo en una estantería, olvidado, sin que nadie lo reclame.

 El amor, la belleza, la literatura, la poesía o los paisajes, son elementos de la vida que, afortunadamente, no pueden ser privatizados, ni malvendidos, del todo, por los Putin, Merkel, Rajoy, Cameron, y los demás payasos que pululan por la farsa que es ahora el mundo de la política, pero parece que las gentes no son del todo conscientes, ofuscadas como están por los mensajes políticos y económicos, de que esos aspectos de la vida son de su entera propiedad, que están a su disposición, algunos, en particular,en los anaqueles de las bibliotecas.

 Es por esa razón que traigo aquí hoy un texto de Salinas, como homenaje al poeta, y como recordatorio a los lectores de lo que se pierden por no visitar mas a menudo las bibliotecas, cualquiera que sea su situación. 

"No, no dejéis cerradas/las puertas de la noche, /del viento, del relámpago/la de lo nunca visto/Que estén abiertas siempre/ellas, las conocidas/Y todas, las incógnitas,/ las que dan/a los largos caminos/por trazar, en el aire,/a las rutas que están/buscándose su paso/con voluntad oscura/y aún no lo han encontrado/en puntos cardinales/Poned señales altas,/maravillas,luceros,/que se vea muy bien/que es aquí,que está todo/queriendo recibirla./Porque puede venir./Hoy o mañana, o dentro/ de mil años, o el día/penúltimo del mundo/Y todo/tiene que estar tan llano/como la larga espera/Aunque se que es inútil./Que es juego mío, todo,/el esperarla así/como a soplo o a brisa,/temiendo que tropiece./Porque cuando ella venga/ desatada, implacable,/para llegar a mí,/murallas, nombres, tiempos,/se quebrarían todos/ deshechos, traspasados/ irresistiblemente/ por el gran vendaval/ de su amor, / ya presencia." 

'La voz a ti debida..'. Cátedra. Un libro abandonado en una biblioteca. Ahora, recuperado.

 En fin. Pedro Salinas.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN)27-08-12.

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