sábado, 6 de octubre de 2012

LA PUTA IMAGEN

Estoy un poco hasta los pelos de que las personalidades públicas, generalmente políticos, con voz, de la derecha, cuando han de dar respuesta a un conflicto, lo hagan usando la imagen de España, un concepto, en mi opinión, algo dudoso, pues tanto el territorio, como la población, son conceptos dinámicos, cambiantes, a los que aplicar una foto fija puede dar como resultado una imagen borrosa.

¿A que se refieren, a la España que tenía en sus dominios continentes ajenos enteros al mando de un emperador con sombrero? ¿A la España en crisis recién 'perdidas' Cuba y Filipinas?, ¿A la actual, en la que los pobladores del noreste, al mando de un jugador de poker, se disponen a convertir un partido de fútbol en una justa medieval? Mas que una foto fija, a la vista de las realidades cambiantes que caracterizan a los países, yo me inclinaría por el collage, por no hablar de lo inapropiado que resulta aplicar conceptos de promoción  mercantilistas, propios del marketing comercial o estratégico, a realidades sociales.

Bueno, pues a pesar de eso, los ministros y portavoces insisten una y otra vez en lo de la imagen de España, incluso aunque no venga a cuento. Me ocuparé, solo, de tres ejemplos recientes.

(...)
'Levante', hoy, La Ley de Costas amnistía 2000 casas ilegales (El país cita 10.000). Arias Cañete lo justifica en la imagen de España que ofrecerían los derribos. De modo que, el ministro de un tercio del ambiente, justifica el incumplimiento de la ley con el argumento de la vieja, hipócrita y carcomida sociedad española que el representa, 'el que dirán', que se refiere, claro, a las apariencias, nunca a la realidad. 

Ahora comprendo porqué Montoro, el de Hacienda, en lugar de perseguir a los defraudadores fiscales, los premió con una amnistía. Fue por 'el que dirán', para proteger la imagen de España. Nunca una imagen, ni siquiera la de Mahoma, ha sido tan profanada por los propios sacerdotes encargados de su custodia. 

Claro, se ve que los laboratorios de manipulación de la opinión que quizás habitan en las trastiendas de los gabinetes de prensa de los ministerios, han encontrado un chollo con esto de la imagen de España que les permite una respuesta unánime y simple a cualquier conflicto, sin calentarse la cabeza en pensar una para cada caso.

Que los manifestantes se cabrean, los ingenieros de comunicación le dicen al ministro del Interior que diga lo de la imagen de España, y listo. Es preocupante que algún portavoz y desde tres ministerios repitan como aves exóticas el mismo canto, y mas aún, que el partido entero en el gobierno este frente a un espejo, pendiente de la imagen, en lugar de estar ocupado resolviendo los muchos y diversos problemas que plantea la realidad del país.

Esto de la imagen de España, es un invento de cara al exterior, claro, pero quizás no considera que los medios mas influyentes del periodismo internacional tienen aquí sus corresponsales, que hacen sus propias fotos, y luego se publican en los medios dando su propia versión de la realidad española. 

Al parecer, en el debate para las elecciones presidenciales USA, el candidato republicano ha dado un dato --un dato-- sobre el peso del gasto público en el PIB de este país. Nuestro ministro de Exteriores se ha quejado, ¿adivinan con que argumento? que ese dato empleado por el candidato daña 'la imagen de España'. 

Va siendo hora de que los políticos que gobiernan este país, de momento, para nuestra desdicha, en lugar de estar tan preocupados por la imagen de España, se ocupen mas de actuar de un modo eficiente sobre la realidad, para que luego salgamos mas favorecidos en las fotos que hacen otros. 

 En fin. La puta imagen.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 6-09-12.

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