martes, 11 de diciembre de 2012

ANTISISTEMA

Estamos inmersos en un engaño que los mas poderosos intentan perpetrar cada día por medio de la manipulación del lenguaje. Las jerarquías llaman antisistema a quienes tratan de oponerse a ese engaño, como si viviéramos en un sistema, algo ordenado, con interacciones lógicas y un propósito, el bien común, cuando en realidad, para quienes observamos con algún sentido crítico, lo que se ve es un periodo de caos.

Un indicio que confirma lo que digo es la reacción de El País, que puso su editorial ayer en primera página, como respuesta al pánico que le produjo la noticia de la vuelta a la política de Berlusconi, la sombra que proyectó esa noticia en los mercados y, probablemente, en las propias finanzas del grupo Prisa, esa nueva andanada de incertidumbre mientras Guindos sigue con su actitud de no tomar decisiones respecto al rescate financiero, consciente de que toda decisión puede acarrear nuevos problemas que no se siente capaz de controlar. Estoy en ello, creo que ha dicho, les suena?.

(...)
Nos quieren hacer creer que vivimos en un sistema, algo ordenado y lógico, que tiene sus orígenes en la Teoría de Sistemas, un modelo sofisticado que estuvo de moda en las universidades de hace décadas, cuando no podías participar en ningún sarao intelectual sin conocer las tripas de esa teoría, porque podías parecer un gañán, ignorante y agraz, lo que parece ahora Guindos, si, pero, en el periodo caótico que estamos viviendo ahora, hay otros conceptos que parecen mas útiles que el de sistema para observar la realidad.

Jerarquía, depredador, presa, amenaza, alimento, supervivencia, son conceptos mas propios para elaborar una nueva teoría, la Teoría de la Jungla, que podría ser mas ajustada a los momentos que estamos viviendo. 

Todo intento de análisis de la realidad que pretende superar conceptos obsoletos, como el de sistema en este momento, tiene la debilidad de que ese reflejo de superación de lo viejo, suele tener antecedentes todavía mas antiguos, en este caso, les sonará, el adagio de Hobbes, basado a su vez en otro mas antiguo, 'el hombre es un lobo para el hombre'.

Siempre me he resistido a compartir esa sentencia, porque me ha parecido que los hombres, en general, son algo mas que bestias, y ahí está el arte para demostrarlo, pero ahora tengo la sensación de que los hombres que circulan por la pirámide del poder, al menos los que mas ruido hacen, ofrecen un comportamiento, en su lucha por su supervivencia como grupo de poder, mas cercano a las bestias, que al comportamiento humano. Me ahorro citar ejemplos que la prensa, el último baluarte democrático que todavía funciona, cita casi cada día. 

La Teoría de la Jungla, pues, que sugiero, sería de utilidad, sobre todo, para los depredadores del poder, por lo que no voy a caer en la candidez de desarrollarla, aunque podría hacerlo. Su enunciación responde al solo propósito de avisar a las presas de como se las gastan los defensores del 'sistema', que mientras siguen un discurso falsario, merodean entre la fronda buscando saciar su apetito bestial, sin ningún freno ético o moral pues, desde que se han convertido en lobos que deambulan por las estepas de la crisis buscando las presas mas débiles, han perdido toda capacidad de razón lógica, sistemática, y ya no queda ningún vestigio en su comportamiento que nos permita creer que vivimos en un 'sistema'. 

Si se encuentran con alguno de estos depredadores en su camino, ensayen el ataque, si no sirve, prueben con la inhibición, si tampoco funciona, prueban con la huida. Son tres comportamientos típicos de respuesta animal, apropiados al caos que vivimos. Sr. Rajoy y los demás lobos de su manada, dimitan, vuelvan a sus cuevas en las cumbres remotas, y no regresen.

En fin. Antisistema.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 11-12-12.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios