viernes, 19 de septiembre de 2014

CIENCIA FICCIÓN

Un cielo azul claro, levemente marcado de púrpura, ilumina el entorno urbano del Maravillas, cuando bajo a la calle a las siete y media de la mañana. Me detengo a observar los pájaros que triscan entre los árboles y la sensación visual que percibo es que vivimos en un entorno idílico, hasta que mis oídos perciben el brutal fragor del tráfico en la salida de la ciudad hacia los polígonos industriales, que desmiente esa sensación puramente visual.

Aquellos que leyeron a una edad temprana a Asimov, Bradbury, Wells, Clarke, pensarían, como yo, que el futuro nos depararía el gran progreso de la ciencia aplicada, centenares de inventos cambiarían el paisaje tecnológico de nuestra civilización y muchas de las máquinas y medios de transporte que nos rodeaban serían barridos por la evolución tecnológica.

Cincuenta años después, nuestros vehículos se mueven aún con el motor de explosión, que arcáico, ¿no?, por medio de neumáticos que, a causa de la fricción sobre el asfalto, producen un ruido sordo insoportable que es el telón de fondo consecuencia de la disociación entre progreso tecnológico y voluntad de su aplicación por quienes tienen intereses en la industria del auto desde siempre, desde Henry Ford.

He visto por la tele que en Seseña hay un vertedero con millones de neumáticos usados y no saben que hacer con ellos. En cuanto al combustible que seguimos usando, es un derivado del petróleo, que ya Marco Polo contó que se transportaba en camellos a través del desierto para iluminar las lámparas de Bagdad.

Un combustible fósil, como fosilizados han quedado los avances tecnológicos que auguraba la ciencia ficción, subordinados a intereses económicos, salvo en algún sector, como la electrónica o la telefonía multifunción.
.....
Así, en lugar de hablar de Ciencia Ficción, lo que nos debería interesar es la ficción de la ciencia, porque nos quieren hacer creer que progreso tecnológico es igual a progreso social, pero para que eso suceda,los inventos, las innovaciones, no deberían estar sujetos a intereses económicos que los frenan, o no, según su conveniencia. 

Me parece increible que, a estas alturas, no nos desplacemos con nuestros vehículos sobre un colchón de aire, que no hayamos superado la rueda, que fue un invento sumerio, que aún usemos combustibles fósiles, y que los únicos escritores de ciencia ficción que han acertado en sus proyecciones hayan sido Orwell, (1984/Gran Hermano) o Huxley (Un mundo feliz), precisamente porque basaron sus predicciones en su intuición sobre la evolución de los sistemas sociales, mas que en la tecnología.

Para que no se diga que generalizo, citaré los grandes avances en las ciencias médicas, que han modificado de modo espectacular las tasas de longevidad, y de morbilidad en las enfermedades infecciosas y en otras, aunque les quede mucho por hacer, como antes he reconocido el avance sectorial en electrónica y comunicaciones, pero yo estoy hablando de otra cosa, de como los avances tecnológicos se incorporan o no a los procesos productivos, no siguiendo un criterio puramente científico, sino poniendolos al servicio de intereses determinados, que para nada coinciden con los intereses generales.

Es en ese sentido que hablo de la ficción de la ciencia, y esta mañana he podido comprobarlo, al percibir como un entorno innecesariamente ruidoso ha roto la armonía de un paisaje visualmente idílico.

Al parecer, el domingo, o el lunes, se va a celebrar el día de la movilidad. Con tal motivo se ofrece a los ciudadanos la posibilidad de usar gratis el transporte público. Ni para eso se han puesto de acuerdo los responsables de esos medios, la EMT, la empresa que gestiona los autobuses urbanos, lo hará un día, la que gestiona el tranvía y el metro, lo hará otro día. 

Si para una acción como esta, en beneficio del medio ambiente, no se ponen de acuerdo, cómo podemos esperar que las predicciones de la Ciencia Ficción se cumplan. Es demasiado pedir.

Preveo otros cincuenta años de motor de explosión, neumáticos y combustibles fósiles aunque, claro, no estaré aquí para verlo.

En fin. Ciencia Ficción. 

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 19 09 14.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios