TANGENTÓPOLIS

Hoy no he bajado al Maravillas. Estoy tomando café en Ca Pepe, en la Pedanía de El Saler, porque estamos ocupándonos de mi nieto menor, que tiene fiebre y hoy no va al cole. He comprado El País, una rareza en mis hábitos lectores y he encontrado en la página 26 algo que coincide con lo que pensaba escribir hoy.

Tangentópolis, ya saben que fue un extendido episodio de corrupción en Italia que, cuando afloró al conocimiento público condicionó las elecciones en aquel país, allá por 1.992, algo similar a lo que está sucediendo ahora en la vida pública española.

Mi punto de vista sobre la corrupción, hoy, tratará de rebasar el cabreo y la indignación populares, por otra parte perfectamente comprensibles, y lanzar una mirada sobre otros aspectos de ese fenómeno político y social, que he visto menos destacados por quienes lo tratan desde los medios. El artículo que glosaré trata, precisamente, sobre medidas anti corrupción.

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Al parecer, el secretario de organización del PSOE ha dicho 'Cómo vamos a firmar un acuerdo anticorrupción con el PP que es el partido de la corrupción'. En mi opinión, tal vez debiera haber dicho 'que es el primer partido de la corrupción' aunque no sé si sería correcto, porque no he visto aún ningún ranking que clasifique a los grandes partidos, que sé yo, por el número de sus imputados, o por los millones de Euros robados por cada uno de ellos. 

Lo cierto es que, después de esa afirmación, César Luena, enumera las medidas anti corrupción que su partido se propone someter al debate parlamentario. Antes de transcribir y comentar esas medidas, haré algunas reflexiones personales sobre el tema de la corrupción.

Cuando la corrupción masiva se destapa en un país, lo que parece el caso de España ahora mismo, la destapan jueces y fiscales, como resultado de investigaciones solventes previas, la imágen y los nombres de los corruptos aparecen en la prensa, y eso es un signo, en mi opinión, de que aún se vive en una sociedad abierta, con una prensa libre, no en un sistema opaco y autoritario, donde esas conductas se sustancian en secreto y se usan en beneficio de unos u otros grupos de poder.

En mi opinión, sin perjuicio de alarmarnos por esos hechos que salen cada día a la luz pública e indican una disfunción grave de los compromisos inherentes al contrato social entre administradores y administrados, algo que nos acerca al escenario de Tangentópolis del título, debemos felicitarnos por la capacidad de nuestras instituciones para dar una respuesta a esas disfunciones de modo independiente.

En particular, la prensa, aunque en algún caso esté sujeta a intereses que la inclinan a dar más énfasis a unas noticias que a otras, en general se está comportando en esta crisis de credibilidad de la acción política, como un vehículo informativo que está cumpliendo su papel en una sociedad abierta y, ahora, mas transparente.

Hay corrupción, sí, una docena de casos gordos, por lo menos, pero se está aireando muy bien, que es la primera condición para poder afrontarla. Hay que felicitarse por ello. En cuanto a las medidas para afontarla, retomo la palabra de Luena.

 "Inclusión en el Código Penal del delito de financión ilegal de los partidos políticos"

 "Propuestas éticas para los altos cargos...prohibición de recibir regalos o tener tarjetas de libre disposición"

 "Endurecimiento de las incompatibilidades entre cargos públicos y 'enchufes' privados"

 "Elección parlamentaria por mayoría reforzada de determinados cargos, entre ellos, la presidencia de RTVE"

 "No absoluto a los indultos para condenados por corrupción"

 "Acotamiento (reducción del número) de los aforados."

 ....y supongo que alguna medida mas que no se cita en el artículo, por cierto, de Anabel Diez, pero yo lo que planteo ante este listado de medidas es otra cosa. 

Puesto que el PSOE ha renunciado a un pacto con el PP en este asunto, y puesto que el artículo dice que solo alguna de estas medidas es compartida por el PP, dado que el PP tiene mayoría parlamentaria, que eficacia tendrá esta dialéctica anti corrupoción, si la mayoría de sus propuestas no saldrán adelante...Pues, eso, ninguna. 

En mi opinión, para ver aplicadas auténticas medidas anticorrupción, tendremos que esperar a las próximas elecciones, para que, cuando los partidos que lideran el ranking de corruptos sean relegados a una presencia testimonial en el parlamento, este sea ocupado por los que están limpios que, en mi opinión, es la medida anticorrupción por excelencia.

En fin. Tangentópolis. 

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 28 10 14.