LA CAGADA COLECTIVA DE LA HORDA

"Siguiendo la línea escatológica que marca últimamente los contenidos del blog, hoy toca un homenaje a un escritor silesio, Günter Grass, que inmortalizó en su libro El Rodaballo, en los setenta, esta llamativa frase. Como se desprende de su enunciado, se trata de una defecación en grupo, en la Silesia del neolítico, supervisada por un personaje femenino novelesco, el aya tritetuda, sí, con tres tetas, que revisa cuidadosmente los restos fecales de cada individuo de la tribu, con el fín de determinar su estado de salud.

Si lo miras bien, parece inspirado en las mamás de ahora mismo observando las caquitas del bebé, para cuidar de su salud infantil.

Aunque parezca sorprendente, Günter recibió el Premio Nobel de Literatura, por el conjunto de su obra, que incluye El Tambor de Hojalata, aunque su estrella pública comenzó a oscurecerse cuando confesó públicamente su pertenencia al partido nazi, aunque en una fase muy incipiente de su vida.

No tengo claro porqué me ha llamado la atención esta expresión, 'la cagada colectiva de la horda', será porque anoche, después de cenar en un bareto de Russafa con Lola y Antoni, calamares con ajetes, ensalada de Madre Mía,pescadito frito y verduras a la plancha, todo regado con algo más de litro y medio de Mahou, por doce pavos por cabeza, de regreso a casa para jugar una partida de Rummy, que perdí, por no ser más audaz en la trampa al contar mis puntos, le pregunté a Antoni por cómo han instalado ellos la pileta en el baño, decididos como estamos a hacer lo propio.

Entonces, Lola se quejó del tono escatológico de la conversación y lo dejamos. Esta mañana, al salir de la ducha, he creído encontrar la ubicación precisa de la pileta en el baño grande. ¿Estás loco?, me ha reprendido Encarna, tendríamos que destrozar la pared recién reformada para instalarla.

La pileta tiene que ir en el baño pequeño, bastará con quitar el lavabo, que no usamos, y ponerla allí. Encarna tiene un talento natural para la arquitectura de interiores, todo lo que hemos hecho siguiendo su planeamiento, ha salido bien, sí.

Leo en 'Levante' de hoy los adjetivos que dedican algunos comunicadores a los políticos implicados, de uno y otro lado, en el conflicto catalán, y percibo con una lamentable sensación de desánimo que lo que escribió Gúnter Grass en los setenta, podría servir de titular ahora para describir lo que están haciendo unos y otros. 'La cagada colectiva de la horda'.

Puede ser un buen título para la novela que Cercas dice estar pensando en escribir sobre la Barcelona de ahora mismo, la Barcelona politizada, claro, la otra, igual está pescando tranquilamente en la Barceloneta, pero nadie nos lo cuenta."

Sospecho que esta es una de las páginas más raritas del mes que termina hoy. Un mes que se caracteriza por la ausencia de certidumbres, en lo de Catalunya, pero con una clara certidumbre escatológica. La pileta se instalará en el baño pequeño. Encarna, dixit.

En fin. La Cagada Colectiva de la Horda.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 30 09 17.