SOBRECOGIDOS

Estar, o sentirse, sobrecogidos, según mi inmersión en Wikipedia, es estar suspensos, atónitos, pasmados, estupefactos, o sentirse de una pieza, en plan coloquial. En cambio mi viejo Espasa, mas lacónico en sus definiciones, alude a que sobrecoger es coger de repente y desprevenido. Esta última definición es la que mejor corresponde a la entrada de hoy, que va de aquellos a quienes han cogido con las manos en el sobre, así de pronto.

Sin embargo, a juzgar por lo que publica 'Levante' en la 5, a lo que luego me referiré, ni todas las manos son iguales, ni los contenidos de los sobres, tampoco. Las generalizaciones no suelen ser exactas, en este caso de los sobres, tampoco, pero lo que mas me ha molestado de algunas generalizaciones es lo que declaró el Sr. Roig --Mercadona-- a propósito de las causas de la crisis económica y financiera que padecemos, en el sentido de que 47 millones de españoles somos responsables de ella -lo dijo antes de que los emigrantes retornaran a sus países y los nuestros comenzaran a emigrar, o sea que, para empezar, ese dato demográfico ya ha variado.

Imputar a la población en su totalidad los excesos cometidos por otros es, además de injusto, mentiroso. Tengo pruebas de lo que digo. Ni todos los españoles pidieron hipotecas, ni mucho menos vivieron por encima de sus posibilidades. No hay mas que entretenerse en el catastro, o con las estadísticas de renta personal, o mirar uno mismo sus propias cuentas de los últimos diez años, para refutar al Sr. Roig sus declaraciones exageradas, o directamente mentirosas.
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Del mismo modo, cuando Andrés H. de Sá afirma en un recuadro de la 2, que la situación actual 'no es mas que un reflejo de aquellos días de vino y rosas', habría que pedirle que señale quien se bebió el vino, y quien cortó las rosas, para no caer, de nuevo, en la generalización inexacta, aunque hay que decir que en su recuadro señala a Domingo Parra, ex responsable financiero valenciano, ahora imputado, como el principal repartidor del vino y las rosas. 

Vuelvo a los sobrecogidos, o sobres cogidos, para citar las explicaciones de 'Levante', página 5, en relación con los 500.000 Euros repartidos por el PP a parlamentarios de las Corts, y lo hago, en aras de evitar una generalización, que se atribuya a esas retribuciones la misma condición de ilegalidad que se presume a las de los políticos del gobierno central, pues, según 'Levante', no es el caso. 

Afirma 'Levante' que estos pagos bajo mano, se nutren de fondos legales, pero al mismo tiempo se dice que el responsable de esos pagos ha comenzado la reducción de las asignaciones. O sea, que el origen de las cantidades pagadas, es legal, pero su destino, o la forma de instrumentar esos pagos, no parece muy legal, de otro modo no se estarían reduciendo.

Conclusión, así como los sobres cogidos en Madrid, parecen ilegales por partida doble, por el origen y por el destino, los pluses de aquí, parece que transferidos a los perceptores, no en sobres, serían mitad legales, mitad ilegales, si es que tal cosa puede existir. Habrá que consultar a algún experto legal.

A estas alturas ya se ve que para entender los embrollos en que andan metidos nuestros políticos, del gobierno central, o de los autonómicos, necesitamos un doctor en sobres cogidos. 

Yo creía que tal cosa no existía, hasta que he quedado sobrecogido al leer, en la 4, que 'El primer diploma en corrupción política de España arranca en la Universitat de València'.

Esa lectura, no solo me ha dejado sobrecogido,sino también suspenso, atónito, pasmado y estupefacto, vamos, de una pieza, pues si elevamos la corrupción a la categoría de materia universitaria, está claro que las perspectivas de que algún día se reduzca, ya que no parece que pueda desaparecer del todo, son nimias, ya se encargarán sus catedráticos de darle bombo, para defender su cátedra. Algunos catedráticos, quiero decir, no quisiera caer yo mismo en el vicio de la generalización. 

En fin. Sobrecogidos. 


LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 2/02/13.