DE CASTORES Y TOPOS

He bajado al Maravillas, a un hora temprana, y le he preguntado a Tony, el hombre bar, conocedor de su afición a la avifauna y a la pesca con caña, por los castores. La pregunta tiene su origen en mi memoria de los titulares de periódico que tratan, de vez en cuando, el Proyecto Cástor. Lo pongo así, con tilde, porque es como suena aunque supongo que se refiere al castor americano.

Yo creía que el castor hacía túneles, por eso le pusieron ese nombre al proyecto que ha consistido en fracturar el fondo marino, hacer agujeros e inyectar gas, en busca de energía, aunque es del dominio público que lo que han conseguido es activar una falla tectónica no conocida,lo dicen los informes técnicos que prueban la relación entre esa actividad y los movimientos sísmicos habidos en el área de Vinaroz y alrededores, que ha determinado la suspensión de la actividad, pero no su cancelación, pues el contrato blindado de su concesión incluye una indemnización de 1800 millones del ala.

Pues no, el castor no hace túneles, me ha dicho Tony, sino que construye diques en ríos y arroyos. Son los topos, animales subterráneos, tambien americanos, los que excavan galerías que llegan a alcanzar hasta 150 metros de longitud. Y...porqué le habrán llamado proyecto Cástor, en lugar de proyecto Topo... Yo que sé...habrá sido para despistar...
.....
Ignoro porqué me ha venido a la mente esta historia de Castores y Topos. Repaso las precipitadas notas que he tomado en una hoja de libreta tamaño octavo que me ha facilitado Tony, después de leer la prensa, y creo adivinar la asociación que quería mostrar. 

Si tomamos en cuenta el deterioro de la cohesión social en este país, manifestada en las encuestas que reflejan una desafección mayoritaria hacia la clase política que nos representa, y el descontento social callejero y en las redes sociales de quienes rechazan unas políticas que identifican como contrarias a los intereses de la mayoría, el castor sería el intento de poner diques a esa protesta, y los topos serían los efectos de esa política que destrozan el subsuelo que sostiene un sistema democrático que, si bien ha prestado grandes servicios al país durante décadas, necesita una profunda revisión que ningún partido mayoritario lleva en sus programas.

Este es, en mi opinión, el telón de fondo, el marco de referencia, en el que han aparecido estos días multitud de declaraciones desafortunadas, con motivo del asesinato de León. He sentido un cierto asco al ver en las pantallas mensajes inapropiados sobre el suceso, también por los discursos de La Razón, ABC, el TDT Party, y algunos miembros destacados del PP, donde sin duda militan personas sensatas, junto a otras que no se desprenden de tics autoritarios y trasnochado nacional catolicismo. 

Escribir que, quien siembra vientos recoge tempestades, se veía venir, o, aquello tan viejo, algo habrá hecho, son expresiones que se pueden asociar a otras, mas antiguas, le está bien empleado, por rojo. En todos los casos, descargan el peso de la culpa en la víctima, no en los victimarios. 

Todo esto produce cierto asco, pero no menor que los discursos oportunistas que atribuyen estos excesos, a los escraches, al clima de protesta generado por un uso injusto de las medidas políticas en perjuicio de las mayorías y en beneficio de unos pocos, cuando no en perjuicio de los propios sistemas que se dice proteger

O no es asqueroso el caso de un enfermo cardiaco que por falta de recursos para atender el copago de los fármacos prescritos, deja de tomarlos, y cae en una crisis que ha costado a la Seguridad Social 12.000 euros, y a el, por poco, le cuesta la vida.

El cirujano entrevistado ayer en la Sexta, puntualizó que los experimentos de ahorro en la sanidad USA han supuesto, al final, un montón de miles de millones de sobrecostes. Es solo un ejemplo de la torpeza política de la que los ciudadanos comienzan a estar hartos. 

Cómo reaccionan ante esta situación el aparato mediático de la derecha, y dos de los mas conspícuos representantes del autoritarismo y los resabios nacional católicos del Partido Popular. Los editoriales y comentarios están ahí, disponibles, Rita y el Ministro del Interior, ante las protestas, mas autoridad, en lugar de mas racionalidad en la gestión, ante los desmanes en la Red, mas control de la libertad de expresión.

Nadie habla de revisar nuestro ya frágil y caduco sistema democrático.

Alguien reconoce que en otros países hay otros sistemas democráticos mas maduros y avanzados, hacia los que hemos de transitar, en los que los representantes políticos reciben en sus despachos a comisiones ciudadanas que les marcan la pauta a seguir en determinados asuntos, y si no la siguen, ya pueden despedirse de su voto. Si, a nivel teórico, los estudiosos y los especialistas lo hacen, nuestros políticos no se dan por enterados. Dónde se ha visto que la democracia consista en dar un voto por la cara, sin exigir nada a cambio.

Los diques, el autoritarismo que pretende frenar la expresión de las libertades ciudadanas, en el parlamento o fuera de el, y el efecto topo de las medidas gubernamentales que están socavando la cohesión social, están en la base de los excesos verbales que hemos visto estos días, si bien son responsables los que los han proferido, no lo son menos quienes los propician con su torpeza, interesada o no, en su actuación política profesional. 

En fin. De castores y topos. 

LOHENGRIN )CIBERLOHENGRIN) 15 05 14.