LA GLÁNDULA SALIVAR

Estoy en Ca' Pepe, en la pedanía de El Saler, tomando una tónica y disfrutando del raro placer intelectual, porque se prodiga poco, de leer a Fernando Delgado, en la 25 de Levante de hoy.

Cuando venía hacia aquí he disfrutado de un cielo pintado, lleno de variados tonos, matices y formas, esos cielos que cuando los ves en algún cuadro de un pintor, piensas, demasiado manierista, no es real. Pues ya ven, es real, aunque poco frecuente.

Fernando hace una página extraordinaria, que titula 'Ustedes Disculpen', porque básicamente la dedica a introducirse en autores muertos, lo que explica en su argumento final, '..para ver España con talento tiene uno que recurrir a sus difuntos'.

Pero lo que a mi mas me ha interesado es su concepto de universalidad citando a Nicolás Estébanez, será porque en mi página 'Pliegues', hablé de universalidad, aunque ahora lo que me interesa es la relación entre universalidad y singularidad.

 ¿Como explicar la relación entre universalidad y singularidad?, hoy quiero hacerlo a través de la anatomía humana, pues una experiencia personal me permite aclarar el tema. Veamos. Una glándula salivar es un componente anatómico del cuerpo humano, de carácter universal.

Si se te hincha,como me ha sucedido a mí estos días festivos, su forma, su volúmen cambian y pasa a tener un aspecto singular que requiere de la opinión médica. He aquí un ejemplo, sencillo, de como lo universal se convierte en singular.

Me ocurrió hace unos días, palpándome la mejilla izquierda encontré un bulto al final de la mandíbula que antes no estaba. ¿Será el turrón de Xixona, pensé yo, que se ha quedado atascado por ahí, dada su enorme densidad?

El doctor me ha sacado de dudas, después de palpar esa mínima protuberancia, --parece la glándula salivar, haremos un hemograma, mientras tenemos los resultados, si se le hincha más, póngase calor. Le duele?

 --No, de hecho creí que deaaparecía justo cuando pedi hora por Internet, pero nada, sigue ahí.

 --En el mostrador le darán fecha para el hemograma. Venga a verme dos días después, para valorar los resultados.

Mientras esperaba que me atendiera el doctor, me he fijado en dos mujeres, sentadas frente a mi. Una de ellas, la que hablaba sin parar, parecía haber dedicado su vida al negocio merchero, y le contaba a la que estaba a su lado, inexpresiva como una esfinge, la historia y milagros de todas las generaciones de su familia.

Al principio, pensé que se conocían, pero en seguida me di cuenta, por la expresión pétrea de la que no escuchaba, que se trataba de dos extrañas. Me pareció muy rara, la incontinencia verbal de una y la indiferencia ausente de la otra.

La escena me recordó otra que cité en la página 'Tango', la viuda del argentino hablando sola en el entorno del bar, sin que nadie atendiera su parlamento.

Esta tarde me incorporo de nuevo al Aula de Teatro, después del período vacacional. Pienso proponerle al profesor que ensayemos una escena así, un actor dice un monólogo recargado de texto, mientras otro, con expresión de esfinge, permanece a su lado, sin hacer ni puto caso de lo que oye. La escena podría llamarse, Incomunicación, como la vida misma, no?.

Ando un poco preocupado con esto de la glándula salivar hipertofríada, a ver si me voy a convertir en un tipo singular, más baboso que antes.

En fin. La Glándula Salivar.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 7 01 16.