CUANDO TODO ES RECUERDO...

"La entrada del verano meteorológico me pilla inmerso en un charco de nostalgia que ya se manifestó en la página de ayer en la que rememoré mis vivencias en la casa de la sierra. También me enmerdé un poco con los titulares de prensa y las imágenes televisivas --el relato de la realidad-- y mira por donde, al comprar hoy 'Levante' al volver del Maravas el titular de primera confirma mis sospechas de ayer. 'El Consell se encara al Gobierno por el envío de náufragos al CIE" (Centro de Internamiento de Extranjeros, o sea, la cárcel).

No me apetece enmerdarme otra vez con los titulares de prensa, así que centraré la página de hoy en eso que he llamado, 'Cuando todo es recuerdo..', algo parecido a aquella columna de un periodista ilustre, Xavier Domingo...'Cuando solo nos queda la comida'.

Los percebes de Malpica, la merluza de Alfredin, en la Coruña de los setenta, el rabo de toro con chocolate en un restaurante cordobés, los erizos de mar en Las Rotas de Denia, cada uno de noviembre, los huevos rotos en Madrid, cada verano cuando vamos al Thyssen, al Reina Sofía, el farinato en Salamanca, el precio del buey de Kobe en Cambrils, el suquet de pescado en Ametllá de Mar, el fish and chips en las calles de Londres, el salmorejo cordobés, las torradas de cordero en el monte Algarbe aragonés, el bacalao dourado en Lisboa, me pasé y me tuvo un día entero con diarrea sin poder salir del hotel y, claro, las sopas de ajo caseras con ancas de rana en mi infancia, ya tan lejana."

Una catarata de recuerdos, cuanto más lejanos, más frescos, cuando más próximos, más lejanos, cosas de la edad tan transitada ya, pero ahora he de dejarlo, voy a Pinedo, con el 25, para ver a mi nieto jugar al fútbol, así que, de momento, me despido hasta luego..

......

(continuará)

"La verdad, no sé por donde continuar, me he tomado una cerveza en Pinedo en 'La Mar de Bonica' que está en el pueblo, porque en el bar de la playa estaba todo pillado, reservado, y otra media al llegar a casa, así que no estoy muy claro, la verdad.

Se me ocurre, ya que he mencionado la playa, hacer un homenaje tardío aquí al barracón de madera que tuvo El Boniquet, en la ya desaparecida playa de Natzaret. Aquellas bandejas con salsa de tomate, gambas y rebollones, que probé en mi infancia. El Boniquet desapareció, también aquella playa.

Comentaré la comida del grupo de teatro que tuvo lugar el jueves pasado en La Pascuala. Nunca había estado en La Pascuala, aunque muchas veces ví un gentío en su puerta, esperando para entrar, cuando estaban en Eugenia Viñes.

Ahora siguen con su actividad hostelera, iniciada nada menos que en 1.919, como acredita la extensa colección de fotos que cuelga de sus paredes,al final de Dr. LLuch, en un local más amplio que el antiguo, y la experiencia de probar su paella de marisco, su dorada con espárragos y otras verduritas, su postre de nata y chocolate, con barra libre de bebidas, cerveza, sangría, vinos, café, todo por diez euros por persona, incluyendo el cubierto del profe de teatro, me pareció muy satisfactoria."

Cuando ya habíamos dado buena cuenta del menú, una compañera de teatro pidió dos botellas de cava, con las que brindamos por su compleaños. O sea, todo perfecto,sí.

Concluyo con la reflexión de que no solo hay que vivir de recuerdos, sino buscando nuevas experiencias.

En fin. Cuando todo es recuerdo.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 16 06 18.