LOS POSOS DEL CAFÉ

"He pasado por el Maravas, a mi regreso del ambulatorio, después de tomar un café y una tónica Schweppes, le he preguntado a Tony, --¿Viene alguien a recoger los posos de la cafetera? --¿Que dices?, claro que no, los tiro a la basura. --Lo digo porque ayer vi en la tele a unos jóvenes emprendedores que van recogiendo por ahí, en bares y restaurantes, los posos del café --dicen que muy ricos en nutrientes-- los tratan, les añaden simientes y alguna otra cosilla y cultivan setas en su laboratorio alimentario.

--¿Setas? ¿qué setas? --No sé, colmenillas o algo así. De hecho venden en cajitas el embrión de ese cultivo, y las setas afloran en casa del cliente...raro, no?

 --Raro, de cojones, no sé a que sabrán esas setas, yo prefiero las silvestres. --Bueno, pero no me negarás que eso es el colmo del reciclaje..

Como Encarna está en la pelu, al salir del Maravas he pasado por La Fuente. Mientras tomaba un descafeinado he visto en la tele, en los desayunos de la uno, a Angel Garrido, nuevo presidente de la comunidad de Madrid, después del descalabro de Cifuentes --está de moda descalabrar a presidentes/presidentas-- jactarse de la economía madrileña, de las rebajas de impuestos que ha sido su primera medida neoliberal, al tiempo que le preguntaban por los 8 millones de euros desaparecidos del Canal de Isabel II, algo, al parecer, también muy neoliberal.

Luego he comprado 'Levante' en el quiosco, cuyo primer titular tiene que ver, creo yo, con los posos del café. 'Jarro de agua fría de Sánchez a la financiación autonómica' 'El presidente descarta aprobar un nuevo modelo (de financiación autonómica) en esta legislatura'.

Digo yo que no hacía falta consultar los posos del café para adivinar lo que iba a hacer o no hacer, un presidente sobrevenido, con un presupuesto heredado.

Pero yo quiero hablar sobre todo de los posos del café, no del relato periodístico de la realidad.

Ustedes habrán oído hablar de la existencia de videntes y sabios que adivinan nuestro futuro observando los posos del café, aunque ahora ha surgido una especialidad nueva, la de los artistas que dibujan cosas, figuras, rostros, en la espuma de las tazas de café antes de ingerirlo.

Es una cuestión del libre albedrio de cada uno, creer o no en que hay señales que marcan nuestro futuro. Yo no me creo lo de los posos del café, pero si creo, por experiencia personal, en los diagnósticos médicos que pueden condicionar nuestro futuro de por vida.

Hace más de cuarenta años, Agustín Domingo, responsable del pabellón de judiciales del psiquiátrico de Bétera, me atendió en su consulta de València, leyó los posos del café y determinó que, para no salirme de madre, debía tomar una dósis diaria de carbonato de litio --un metal-- de por vida.

Es cierto que gracias a aquella lectura de los posos del café, he llevado una vida normal, plena, en lo profesional, en lo familiar, pero no es menos cierto que desde entonces he debido someterme con frecuencia, como esta mañana en el ambulatorio, a litemias, porque es cierto que el litio es un estabilizador del ánimo, pero en dosis superiores a un miligramo, te puede matar."

 --¿Su nombre?, ha dicho la enfermera..

 --Enrique Arnal Catalá....perdón, por lo de Catalá.. Me puede pinchar en la mano...las venas del brazo están más ocultas..

 --Ya está, ¿le he hecho daño?..sujete el apósito durante dos minutos por lo menos..

 --Muchas gracias, sois estupendos...

En fin. Los Posos del Café.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 20 06 18.