"He bajado al Café Maravas, a una hora temprana, luego de tomar un café del tiempo y una Pepsi Max, como era pronto, me he acomodado en un banco frente al kiosko. Cuando han abierto, he comprado un ejemplar de 'Levante', hoy, uno cincuenta. Su titular gordo de primera lleva una expresión pugilística: 'Sánchez tumba a Rajoy'. Aunque, en el bar, me ha parecido percibir que el personal está mas interesado en la dimisión de Zidán, que en el revolcón a Rajoy.
No es el boxeo lo que me interesa hoy, sino los mercados, porque ayer escuché una afirmación falsa en la tele, a la ex-vice?, que imputaba, con su habitual estilo reptiliano, pérdidas en los mercados --lo cuantificó, la tía, 30.000 millones de euros-- a causa de la Moción de Censura presentada contra su gobierno, silenciando que los vaivenes en las bolsas europeas se deben a la inestabilidad política en Italia, y a la voluntad de salir del Euro de la Liga Norte.
Hay otro aspecto de los mercados que me interesa. No porque hace cuatro décadas me licenciara en Economía General y obtuviera un máster en Auditoria Financiera. Con la perspectiva del tiempo, creo que lo hice sin vocación, por una cuestión meramente utilitaria. Tal vez debí entregarme más a la literatura y ahora el blog tendría mayor empaque. Lo cierto es que hoy, uno de junio, lo de los mercados me interesa por una cuestión utilitaria, otra vez.
El BBVA me ha puesto un correo electrónico para que contacte con el apoderado que lleva lo de nuestros modestos ahorros conyugales. Dentro de unos días se cumple un año de nuestra última inversión financiera, conservadora, como siempre, un simple depósito a plazo fijo, pero, al consultar los papeles, observo que la última vez nos metieron una cosa mixta, que parece exenta de riesgo, pero no lo está, porque el depósito es una alambicada combinación de lo de siempre y alguna novedad en la letra pequeña, en realidad un tocho de diez páginas, imposible de entender en su integridad, por lo que sospecho que, sea a causa de los italianos, o no, la integridad de nuestra inversión, si la tocamos ahora, peligra, así que lo sensato parece ser esperar a que pase la tormenta romana, o termine el combate doméstico, y luego ya veremos.
Lo mejor de los mercados no está en la bolsa, en el Ibex 35, en los Bancos Centrales, todo eso,lo mejor de los mercados está en esos establecimientos centenarios que se conservan en las grandes ciudades, el Central en València, la Boquería en Barcelona, el mercado de pescado en Venecia, los mercados norteños, en Bilbao, San Sebastián, el de Salamanca, con le peculiaridad de su Farinato,los madrileños, reconvertidos en atracción turística, como el de San Antón, el del barrio de Chueca.
Todos esos mercados, solo nos dan satisfacciones, de los otros, los de la especulación por su control en manos minoritarias, que hacen lo que les de la gana con ellos, generando en ocasiones pérdidas millonarias que congregan a miles de engañados ante los juzgados para reclamar lo suyo, es mejor huir, abstenerse de visitarlos, si se puede.
Querría extenderme más sobre esto de los mercados, pero he de ir con mi mujer al de Russafa, a comprar unos filetes de raya, unas clotxinas valencianas, unas coles de Bruselas, unos espárragos, y hasta una botella de cava para celebrar el resultado del combate de boxeo en el que Rajoy ha resultado noqueado, pese a las mentiras de la ex vice imputando a ese resultado una inestabilidad bursátil que tiene, claramente, otros motivos."
Vivan los mercados, de pescado, de verduras y otros productos. A los otros mercados, si se puede, ni caso.
En fin. Los Mercados.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN)1 06 18.
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