sábado, 14 de enero de 2012

SASKIA

He bajado al Maravillas con un ejemplar de 'El País' bajo el brazo. No suelo comprarlo, pero hoy me ha dado por ahí. Luego, mientras tomaba un cortado sin cafeína, he dado un vistazo rápido a algunas páginas de 'Levante', de modo que ya adivinarán que la entrada de hoy la dedico a compartir con los usuarios del blog las cosas que me han llamado la atención de lo que nos cuentan que está pasando por ahí, ya que de lo que realmente está pasando, no sabemos nada.
(...)
En la última de 'El País' me ha llamado la atención la foto de Saskia. Rubia. De mas que mediana edad, Saskia Sassen es Socióloga y experta en globalización, (eso dice la entradilla) en el titular afirma que 'Los movimientos callejeros están haciendo historia' y en la entrevista que le hace la periodista Milena Fernández, Saskia da algunas pistas desde su observación de la realidad.

'Mi padre tenía una biblioteca enorme: unos 3.000 libros..'. Hombre, comparados con los ochenta mil que se atribuye haber leído Antoni Alemany el periodista imputado por sus relaciones espúreas? con Jaume Matas, pues, no sé...'Un día cogí 'La Rebelión de las Masas' de Ortega y Gasset' dice Saskia.... el libro marcó mi visión de lo social. Bueno... Ortega fue un liberal, no un rebelde, y dijo un montón de tonterías, pero en fin...

Pero, vamos a lo sustancial, 'existen varias (globalizaciones) ..son una serie de tendencias, de geografías que se conectan. De ahí surgen posibilidades tanto para el capital como para los que luchan por la justicia social.. Saskia es muy crítica contra la corrupción política y el sistema bancario tradicional (ha sido amenazada de muerte en Twitter)... 'la calle es espacio ideal para promover el cambio social' 'LOS MANIFESTANTES ESTÁN DANDO INFORMACIÓN A UNA CLASE MEDIA INVISIBLE QUE, CONSERVADORA O NO, COMIENZA A CUESTIONAR EL SISTEMA FINANCIERO', esta es la parte mas interesante, por eso la destaco con mayúsculas.

Saskia termina afirmando que 'No se siente en grado de hacer pronósticos, pero asegura que los movimientos callejeros ' se han convertido en espacios para hacer política y están haciendo historia'. Comparto la primera parte de esta afirmación, el uso político de la calle, pero no veo como esos movimientos se pueden consolidar históricamente, sin el nudo organizativo, el que fuere, que les falta. Luego volveré sobre el asunto.

La frase destacada en mayúsculas dos párrafos mas arriba, 'LOS MANIFESTANTES...' tiene su reflejo en nuestra realidad inmediata. ¿Que tienen en común un doctor en medicina, un músico contemporáneo, un cámara de televisión, el propietario de un centro católico de enseñanza subvencionado, un sindicalista, un profesor de secundaria en la enseñanza pública, un librero, un farmacéutico, un usuario de transporte público...

En principio, tienen cosas en común, claro, participan de una misma biología, todos pertenecen a la misma especie. Desde el punto de vista cultural y social, ya es otra cosa. Tienen distinta formación, distintas aptitudes y preferencias, distintos niveles de vida y, seguro, distintas simpatías ideológicas. Pero hay algo que, en este momento, da una pátina homogénea a colectivos tan distintos. Su actitud de protesta, que manifiestan de diversas maneras, ante el modo de hacer política del gobierno presidido por el señor Fabra bis.

Podemos percibir esa gradación de la protesta observando la calle y los contenidos de los medios de comunicación. El Jueves pude ver, atónito, 'la toma del palacio de invierno' por un grupo de sindicalistas que ocuparon un edifico del gobierno. Luego he leído en la prensa que los médicos han puesto una querella al Conseller Vela, a quien le imputan el despilfarro público que ahora culmina con el decreto que recorta sus salarios, y piden a los facultativos con cargos en la Generalitat que se nieguen a aplicar el decreto, o que dimitan. En la televisión autonómica comienzan a manifestarse la primeras protestas por el Expediente de Regulación de Empleo que se aproxima, amenazando muchos puestos de trabajo.

Las protestas de Farmacéuticos, Libreros y Centros de enseñanza católicos parecen estar mas vinculadas con sus problemas financieros que con desacuerdos políticos, pero se suman a las demás,y el clamor es cada vez mas general y mas sonoro.

En este marco, ¿Cual es la situación política del gobierno valenciano?. Dicen los enterados que el partido popular de aquí se encuentra en una cierta situación de fractura, que el presidente Fabra no cuenta con el apoyo de todo el partido, que hay distintas facciones enfrentadas, y lo que es mas grave, que las medidas políticas de Fabra que han desatado una protesta generalizada, que me atrevo a suponer que solo hará que crecer y alcanzará su máximo la próxima primavera, han sido dictadas por un grupo de notables, caciques, o empresarios provincianos, que no ven mas allá de sus narices, y son los que están inspirando las medidas de recortes, sin que el partido en el gobierno haya efectuado un estudio previo y detallado de lo que convenía hacer, o no.

Si esto fuera así, si estamos gobernados, en realidad, por una pandilla de caciques que es la que influye sobre Fabra, porque este todavía no tiene sustento en su partido, el conflicto actual solo puede crecer en intensidad y extensión, dado que los intereses empresariales deben estar legítimamente representados en la política, pero no pueden imponer sus posiciones sin considerar otras fuerzas sociales, salvo con un alto coste de protesta e inestabilidad social que es lo que parece que se acerca velozmente.

LLoréns Barber, nuestro músico contemporáneo y experimentador del sonido, concertista de campanas y hombre muy vinculado a la cultura, en un artículo que publica hoy 'Levante', que lamento no tener ahora delante para citarlo textualmente, muestra hoy la impresión que le causa como valenciano y como hombre de la cultura, el grado de deterioro al que ha llegado la vida social de esta comunidad, liderada durante demasiado tiempo por individuos y grupos que no han sabido merecer la confianza de los ciudadanos.

En cuanto al carácter histórico de las movilizaciones callejeras, si bien la mayoría se han producido en primavera, en los países árabes, la de Praga, mayo del 68, y tantas otras, y las de aquí seguro que crecerán la primavera próxima --no se olvide que con cinco bajo cero no se puede acampar en las calles-- a menos que se consiga elaborar un nudo organizativo que les de continuidad, que las consolide y las conecte con movimientos semejantes, su paso por la historia podría ser fugaz y eso, a mi, personalmente, no me parece que sea bueno para nadie.

Mientras llega la primavera, es bueno aprovechar el sol del invierno. Me voy al paseo marítimo, a tomar una cerveza de cara al mar soleado. Un saludo cibernauta.

En fin. Saskia.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM)14-01-12.

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