martes, 4 de febrero de 2014

JERARQUÍA Y ENTRETENIMIENTO

Antes de ir al poblado de El Saler, donde voy a pasar parte de la mañana leyendo el periódico al sol, escribo estas líneas, un poco precipitadas, para que no se me olvide el tema que terminaré mas tarde. Un titular de la primera de 'Levante' informa de que Camps (el anterior presidente de Heliópolis) descarga en Cacsa y altos cargos toda la responsabilidad de contratar a Urdangarin.

Nadie se cree que en materia de contratación, en nuestro entorno político y económico, los contratos se hayan firmado con la mera voluntad de los jefes o jefecillos pues de todos es sabido que en una organización jerárquico política, no se mueve ni una hoja sin que el verbo del jefe supremo lo autorice.

No solo eso, en este caso concreto es seguro que no solo lo ha autorizado, sino que lo ha sugerido, ordenado, amarrado de tal forma que se contratara con la firma por el deseada y no con otra, sin perjuicio de que algún pez gordo se lo haya sugerido a el.
(...) Las declaraciones de Camps no se las cree ni el juez, pero está obligado a considerarlas por los formalismos jurídicos, porque ya no estamos en una situación revolucionaria. Si Camps hubiera hecho lo que se le imputa durante la revolución francesa, el juez lo habría mandado directamente a la guillotina, no para que lo decapitaran, solo para que le amputaran el brazo con el que jugaba al tenis en su club, hasta que la aparición de una mierda en su taquilla le dió a entender la reprobación de otros miembros de ese club.

Sus subordinados, los que firmaron los contratos, no solo lo hicieron por orden suya, sino que es probable que además le lamieran el culo, pues por las mismas fechas Vicente Sanz el jefe de recursos humanos  de Canal 9 se la meneaba en su despacho y hacía participar del espectáculo a periodistas a sus ordenes.

Así son estos tipos que han mandado por aquí, que no nos cuenten ahora que ellos no sabían nada de lo que pasaba en un escalón inferior.

Las declaraciones del señor Camps al juez en el sumario Urdangarín parecen dirigidas a un colectivo de idiotas, los ciudadanos, pero también el juez. Yo no me habría atrevido a tanto. El poder judicial es una cosa muy seria, y no debe parecer que te burlas de el.

Aunque el juez fuera amiguete, que no creo que sea el caso, hay límites que no conviene sobrepasar. Unas declaraciones no muy comprometidas, pero mas inteligentes, tal vez habrían resultado mejor. Dejar toda la carga de la prueba a los subalternos puede desencadenar una competición, a ver quien cuenta antes todo lo que sabe para salvarse del lío, y si tal cosa sucede, yo no creo que se pueda dormir tranquilo.

El señor Camps debería revisar su estrategia de defensa, no vaya a ser que esté influida por algún enemigo político, aunque, quien va a ser enemigo de un árbol caído, del que estoy haciendo leña ahora mismo, porque hace un frío de la hostia, a ver si por una vez sirve este para algo.

Vuelvo de El Saler, releo la primera parte de la entrada de hoy, y me parece bastante zafia, pero como lo del tenis y lo de Sanz se de fuente fiable que es auténtico, pues no toco ni una coma, y me paso a lo del entretenimiento.

La primera de 'Levante' y algunas de las páginas interiores, se ocupan hoy del muñeco ese que cuando el PP de aquí tiene problemas, o se acercan elecciones, saca del cajón como siempre ha hecho, la lengua.

Vamos a ver, lo que se habla en Perú o en Madrid, ¿no es la misma lengua?, eso sin contar con que los madrileños la hablan peor, con anglicismos, localismos castizos, laísmos, imposibilidad de pronunciar un apellido terminado en ll, y demás, o sea, son variantes del mismo idioma, el español, y nadie se plantea que eso sea un conflicto político, que yo sepa.

¿A que viene entonces provocar aquí conflictos artificiales sobre las variantes locales de una misma lengua, si atendemos a criterios filológicos o científicos?. Yo se lo diré, da réditos políticos, ya desde la época en que se le tiraban tomates al alcalde democrático socialista, acosandolo en los actos públicos, incluso antes de que se inventara la palabra escrache.

Los inclítos políticos que iban de centristas por aquí recién estrenada la transición supieron mucho de eso y exhibieron hasta la saciedad la marioneta de la lengua, en beneficio propio, Abril Martorell y demás, manipulando a los blaveros a los que finalmente devoraron políticamente hasta formar las mayorías que ahora nos gobiernan

Ahora un tipo singular vuelve a agitar el mismo estandarte. Curiosamente se llama Serafín, algo angelical, ¿no?, pero se apellida Castellano, una incongruencia manifiesta con su discurso, y tiene un aspecto tan zafio como el contenido de mi página de hoy.

¿Y saben ustedes porque ha echado mano del mismo cajón de siempre, el del supuesto imperalismo del catalán sobre el valenciano?, claro, se acercan las elecciones europeas, la misma razón por la que el PP ha dado un espectáculo en Valladolid, en su convención, manipulando de tal modo la realidad, que ni Kubrick lo superó con su '2001 Odisea del Espacio'.

Estos tipos no nos cuentan mas que mentiras, sea en una declaración judicial, en una convención, o lo que sea, nosotros no nos las creemos pero, entre tanto, nos entretenemos, de eso se trata, al parecer.

Para saber mas de este asunto de la lengua que solo he esbozado, recomiendo la lectura de un artículo publicado hoy en la 4 de 'Levante' por Jesús Civera, 'La Eterna Medicina',que me parece imprescindible

En fin. Jerarquía y Entretenimiento.


LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 4-02-14.

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