viernes, 2 de noviembre de 2018

EL SALMÓN

"He bajado al Maravas abrigado con el chaquetón de invierno. Sí, ya sé que no estamos en invierno, ¿o sí?. Me ha reconfortado el café cortado calentito y luego el zumo de naranja fresquito. Después de sacar un paquete de Ducados Rubio largo de la máquina --esto no es publicidad de John Players-- he pegado la hebra con Tony.

 --¿Vas a ir a pescar hoy?

 --Aun no lo sé. Últimamente no pescamos nada...

 --¿Porqué no hablas con el alcalde? Que reconvierta esta zona arbolada en un lago para pesca deportiva. Con lo que se ahorra en mantenimiento y tala, ha tenido dos camiones durante dos semanas metiendo ruido con la tala, bastaria para la reconversión. En mi última estancia en la serranía de Cuenca pude comprobar el éxito de una instalación así. Si consigues convencerlo, al alcalde, el Maravas entraría en una nueva dimensión de la hostelería, y si no lo convences, te puedes presentar a uno de esos concursos de la tele adonde van ahora los emprendedores para financiar sus proyectos.

--Tú, ¿que has tomado antes de venir aquí?, que dices tantas chorradas...

 --¿Y sabes qué? ese lago reconvertido se podría repoblar con salmones..

 --¿Salmones?,porqué salmones....

 --El último que comí estaba seco como un estropajo..

--Eso es que lo pasarías de fuego...

 --Yo creo que no, sería de piscifactoría...¿de donde son los salmones de Roig?...

 --De donde van a ser, de Noruega..

--Ah.. Hay otra cosa..

 --Sí...

 --El otro día vi un documental en la 2 sobre el salmón que me dejó impresionado..

 --¿Sí?...

 --Me asombró ver a toda una comunidad de salmones navegar contra corriente en busca de sus orígenes y, cómo, cuando el nivel de las aguas del río esta bajo, esperan pacientemente sin renunciar a su aventura, aunque casi no les quedan grasas, como a mí, para resistir las acometidas del clima...

--¿No estás exagerando...?

 --Es que me fascina la memoria biológica del salmón que lo impulsa a regresar adonde ha nacido..

--Ah....

--De hecho, me identifico tanto con el deseo de emular esa energía que pienso, por un momento, que soy un salmón y codirigo ese viaje a los orígenes de cada uno...me veo regresado al bajo de la calle Arizo, luego le cambiaron el nombre por el de Romeu de Corbera, más caballeresco, como esa peli de los Monty Python que ridiculiza al Rey Arturo, en el barrio de Russafa, cerca del mercado, donde transcurrió mi infancia.

Mi primera imágen es de cuando tenía dos o tres años, asomado al umbral del corral, habitado por multitud de aves, palomos, gallinas, con el suelo blanqueado por los detritus de las aves, y unos años después, ya más crecido, con mis manos en el grifo de la fuente pública, delante de casa, dirigiendo el agua para regar la calzada, donde mis colegas, armados con cañas obtenidas en la cercana huerta, hacían una masacre con las libélulas, para luego decapitarlas y ofrecer sus cabezas en la farmacia en busca de una recompensa que resultó inexistente.

A cualquiera que visite este lugar de Russafa ahora, cualquier noche en fin de semana, saturado con las terrazas de los bares y restaurantes, le resultará increíble que en una sola generación, una vecindad granjera por necesidad, se haya transformado en una potencia turística, pero no estoy inventando nada, en esa calle citada, en el número 3, permanece el bajo que estuvo junto a un refugio antiaéreo, desaparecido, cuya inquilina llamaba a su hijo de esta manera: hosé..hijo puta...ven aquiii.., en cuyo bajo transcurrió mi infancia y adolescencia."

Tonterías..¿no?, pero me siento como un salmón, después de haber alcanzado sus orígenes, luego de luchar contra corriente, ya, setenta y cinco años. No está mal.

En fin. El Salmón.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 2 11 18.

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