"Ayer por la tarde, a las 7,30, sonó el timbre de la puerta. Eran Lola y Antoni, que nos recogieron en su Chevrolet coolor naranja, para ir, juntos, a un acto cultural en Bombas Gens. Se trata de un espacio acondicionado para actividades culturales que antes fué una fábrica de bombas, no de las que se utilizan por Arabia Saudí en Yemen, sino de las que estuvieron de moda para extraer agua de los pozos, cuando València era una mixtura rural y urbana.
Tomamos la ruta de Peris y Valero para salir al río, allí, bordeando el cauce alcanzamos la entrada de la Avenida de Burjasot, donde se ubica el magnífico recinto restaurado, con grandes salas muy bien iluminadas, excepto la más pequeña, que permanece en la oscuridad, porque un panel iluminado en el suelo muestra el movimiento del mar mientras un sistema de sonido recrea el rumor de la marea.
Antes de entrar en las salas, Lola estacionó el coche en la calle Reus, donde vimos un bareto, 'Bocabadat' al que luego
fuimos a cenar antes de volver a casa. Al entrar en Bombas Gens, vimos en el vestíbulo un árbol rodeado de plantas florales, muy coloristas, y enseguida entramos en las cuatro salas, en dos de las cuales se expone la obra de Anna-Eva
Bergman (Estocolmo 1909-Grasse, Francia, 1987), cuya exposición, 'De Norte a Sur.Ritmos', junto con el concierto que iba a acompañar la visita, era nuestro objetivo en esta ocasión.
Antes de entrar en mis comentarios personales sobre le experiencia de ayer, aprovecho que 'Levante' de hoy dedica dos páginas al mismo evento, creo que de un modo más profesional que yo.
"De modélica se puede calificar la restauración y reonstrucción de esa nave industrial art-decó que renació de sus cenizas para navegar con firmeza y solvencia envidiables...(Bergman nació en Estocolmo)...La potencia de la naturaleza en esas latitudes a buen seguro forjó trempanamente la sensibilidad de esta gran artista. Parte de su formidable trabajo se muestra ahora con generoso rigor en dos grandes salas que acogen una cuidada selección de obras realizadas entre 1.962 y 1.971.
...Residente en España primero en los años 30, y después en los 60, el paisaje de Carboneras (luego estuvo en Menorca)
parece que actuó como un contrapunto de su norte natal, pero..la fuerza de su trabajo brota de lo más profundo de su ser"
Bien, comentarios profesionales aparte, lo cierto es que al entrar en las cuatro salas que exponian, dos de ellas, lo de
Bergman, las otras, básicamente fotografías, lo primero que cabe destacar es la perfecta dispòsición de las salas, su magnífica iluminación, lo curioso de algunas de las fotografías históricas que allí se muestran, y la auténtica calidad,
las magníficas texturas de las obras de Bergman, en las que se utilizan los metales, la plata, y otros metales dorados
para el acabado de sus cuadros, de unas dimensiones muy notables.
Recurro, de nuevo, al artículo de 'Levante'
"A Bergman no le gustaba para sus obras el calificativo de abstractas, prefería referirse al proceso de abstraer, de buscar lo fundamental, de reducir aquello que realmente le interesaba a su mínima esencia o noción"
Lo cierto es que en esa visita de ayer, antes de que intervinieran los músicos en el concierto, ya habíamos visitado las cuatro salas, cuyo contenido nos pàreció digno de aquel lugar tan extraordinario. Por eso, cuando se repitió la visita,
ya con el sonido de los músicos acompañando la expresión pictórica de la exposición, solo nos quedamos a las dos primeras piezas del concierto.
Todo resultó muy interesante, tanto la obra pictórica como la música que la acompañó, pero se hicieron más de las nueve y nos fuimos a cenar. Al salir del recinto vimos el Restaurante de Ricard Camarena, 200 pavos el menú. Fuimos al
Bar Bocabadat, en la calle Reus. Una fritura de pescado, chipirones a la plancha, calamares a la romana, seis cervezas
Estrella de Galicia, 15 euros por pareja. Bien"
Al regresar a casa, jugamos un par de partidas al Rummy. Perdí, como casi siempre.
Un saludo cibernauta.
En fin. El concierto de Bombas Gens.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 8 12 18.
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