jueves, 13 de diciembre de 2018

MÓVILES

"He bajado al Café Maravas protegido bajo el paraguas, porque llovía, aunque una lluvia fina. He tomado un café bien cortado y tres vasos de agua del grifo, con una corteza de limón, para no pasarme del presupuesto de un euro diario para mis distracciones de bar, pero como seguía lloviendo, y el ambiente en el interior del bar era algo fresco, he tomado un ron quemado, contraviniendo el acuerdo conyugal.

Como mi mujer nunca lée las páginas del blog, prefiere, con buen criterio, la literatura impresa, espero que no se entere de mi transgresión.

Cuando he salido del Maravas, ya no llovía, he comprado 'Levante' en el quiosco, me ha llamado la atención el titular de primera: 'El Botánic pretende que bares y restaurantes sirvan gratis agua del grifo'.

En el Maravas hace por lo menos diez años que tomo agua del grifo, con su corteza de limón, gratis, sin necesidad de ninguna iniciativa de los políticos, que harían bien, creo yo, en ocuparse en necesidades más perentorias de los gobernados, antes que de esta chorrada.

Pero yo quiero hablar hoy de Móviles. No de los móviles criminales que cuenta la sexta en su programa equipo de investigación, sino de los teléfonos móviles, concretamente, de tres o cuatro de ellos.

Al parecer el número de móviles usados en España, excede de su número de habitantes. En algunos medios se han ocupado del mal uso entre niños y muy jóvenes de los teléfonos móviles, sin embargo, en mi opinión, en general, la telefonía móvil es un gran avance tecnológico que permite una gran fluidez en la comunicación familiar, amistosa, o profesional, aunque en este último caso algunos se quejan de su parecido con los instrumentos de tortura. Cuando funcionan.

El antiguo móvil de mi mujer ha estado sin funcionar una semana. Hasta que la chica de Jordi le ha traído un móvil usado para reponer el averiado, y dos de mis hijos han dedicado sesiones de mas de una hora para que funcione, porque el nuevo/viejo móvil era de otra compañía, ha habido que liberarlo, y no te cuento las múltiples conversaciones con robots que ha tenido Jordi con la compañía vieja, para poder usarlo de nuevo.

Tremendo, ha sido tremendo, pero mi mujer ya tiene, de nuevo, teléfono, y se pasa las horas mandando guasaps, o como se llame, a sus contactos, para que con sus respuestas su lista de contactos vuelva a donde debía.

La tensión nerviosa que he observado en mi mujer hasta ver restablecidas sus comunicaciones, nunca la había visto en la época de los fijos.

Mi móvil, un Nokia del año de la pera, que no tiene internet, falleció anoche. Lo puse a cargar y luego se quedó todo negro. No funciona. No pasa nada. No recibo llamadas. No llamo a nadie. Eso si, siempre lo llevaba encima para, en caso de riesgo de muerte, llamar al 112.

Cuando vengan los chavales el sábado a la comida familiar, ya lo resucitarán. Algo que me ha llamado la atención de la telefonía móvil, son las conversaciones íntimas, ajenas, que se suelen percibir en los buses urbanos o interurbanos.

Recuerdo un viaje en el que tomamos un autobús para visitar un pueblo. Por el camino un desconocido ligaba de un modo muy sonoro desde su móvil, sin ningún reparo por la audiencia que tenía.

Ha sido esta mañana, mientras fumaba en el umbral del Maravas, cuando un usuario de móvil se ha despachado a gusto, sin considerar la presencia de extraños. Una mujer de unos treinta años se expresaba así, con su móvil, a mi lado "Fíjate que (fulanito) le dió a mi hija, de seis años, para jugar, un corazón de heroína...si, ya tengo la custodia de la niña, pero no tengo trabajo, ni dinero....he solicitado la Renta de Inclusión..he oído que para enero me darán 800 euros. de momento, me apaño con el banco de alimentos...sí, tengo una denuncia preparada para ponerla en el juzgado, pero de momento no voy a hacer nada...estoy liada con otras cosas..."

Tremendo, no? un corazón con polvo de heroína para una niña de seis años.

Cuando he vuelto a casa, pensaba escribir unas líneas en homenaje a la película que vimos ayer en uno de los cines de un centro comercial, 'Rapsodia Bohemia', pero lo que he escuchado de alguien hablando por un móvil, me ha dejado helado y he cambiado de tema.

La peli, musical pero también una traza biográfica de Fredy Mercury, y los chicos de Queen's, nos gustó tanto, que recomiendo que no se la pierdan. No tenía ni idea de que Mercury procediera de una familia de origen Parsi, seguidora de Zoroastro.

La peli muestra, desde los inicios de Mercury, cuando de chaval va a un club, ve tocar a los de Queen's y se lía con ellos como cantante --al parecer, su voz tenía una octava más que los de su gremio-- hasta el fabuloso evento musical en un gran estadio, con fines benéficos --según los guionistas de la película en ese evento se recaudó más de un millón, no me enteré muy bien si de libras o dólares. Además de Mercury participaron los Beatles, Elton Jhon, los Rollins, entre otras estrellas de la música del momento, y la escena, reconstruída, supongo, en la que Mercury vuelve loco al público, con su capacidad innata, irrepetible, para dirigir a las masas, me pareció algo memorable."

Termino, ya he perdido tres veces el texto de esta página, antes de publicarlo.

Chao, pibes.

En fin. Móviles.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 13 12 18.

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