EL MOSCARDÓN

."Ahora, vamos a salir.....luego les cuento... ......

Hola, ya estoy aquí, un poco tarde porque hemos tenido un día algo ajetreado. Hemos pasado la mañana en la Pedanía del Saler, por cuestiones familiares. Hemos vuelto a casa justo a la hora de comer. Hemos comido sin el protocolo de la siesta porque a las cuatro teníamos Cine Forum en el Aula de Teatro de Malvarrosa.

Ahora que ya estoy en casa, me da pereza ponerme a terminar la página. Vamos a ver en la tele tres concursos casi a la vez, Ahora Caigo, Boom y Pasapalabra, estamos algo cansados y nos apetece un poco de sillón.

Estimo que sobre las once o por ahí ya tendré ganas de acometer la página prometida en el enunciado. Hasta luego, otra vez....

 "Hemos llegado a la Pedanía del Saler a las 10,30h. Como es Encarna la que sabe de plancha, se ha quedado a planchar en casa de nuestra hija, que está currando y no tiene tiempo. Me he acercado al quiosco a por la prensa. He comprado 'Levante', he leído las tres primeras páginas, las demás no me interesan, excepto las últimas, nunca me pierdo la columna de Cipriano Torres, crítico --ácido--de televisión, en cuanto a la columna del Meteo, siempre, antes de leerla, compruebo que no la firma Montón, un tipo presuntamente vendido a las eléctricas, por su presuntamente perverso negacionismo del cambio climático, aunque hace tiempo que ya no sale.

Suelo poner en estas páginas citas literales de los artículos que considero interesantes, pero hoy no va a poder ser porque he hecho una tontería, cuando tenía el periódico a medio leer, he ido a dar un paseo hasta la playa, como me molestaba llevar el periódico en la mano, lo he dejado, de camino, en una papelera, pensando...aquí no hay ni un alma, al regreso lo recogeré.

Después de alcanzar la orilla de la playa, contemplar el mar en calma y la media docena de buques que se ven en lontananza, un par de ellos esperan su entrada en el puerto, los demás se quedan en alta mar para no pagar las estadías en los muelles, al regresar, cuando faltaban unos metros para alcanzar la papelera donde dejé el periódico, un tipo venía con mi periódico en la mano abierto por las páginas de deportes, así que me he dicho, ..Enrique, que imbécil eres.

Total que solo puedo aludir a la primera, que trataba de la violencia de género, y citaba a un autor teatral inglés que dijo algo así, 'Cuando hablamos de cualquier cosa, siempre tocamos el tema del sexo, pero cuando hablamos de sexo, no hablamos para nada de eso, de sexo'. Luego, en la dos, iba un artículo sobre, ¿lo adivinan? el conflicto catalán, para variar, también he leído a un columnista habitual mas creativo, cuyo nombre no puedo citar por mi imbecilidad de dejar el periódico en la papelera, pensando que podría recuperarlo, imbécil.

Al finalizar el paseo --aquí viene el núcleo de la entrada-- me he sentado junto a  una mesa al sol en Ca' Pepe. Al aproximarme al bar, mi cabeza decía, pide un bitter sin alcohol, pero mi boca ha dicho, una porción de tortilla de patatas y una caña.

Cuando he pedido eso, no era consciente de que iba a participar en una batalla épica con un enorme moscardón que cuando el camarero ha depositado la porción, que más parecía un farallón, de tortilla, en la mesa, se ha lanzado a picotearla con una furia sin mesura.

El moscardón picaba, yo también, a ver quien puede más, al final he optado por una estrategia pasiva, he dejado que el enorme insecto se llenara el buche de tortilla y cuando se ha ido con un vuelo vacilante por el peso de su estómago, me he comido tranquilamente la parte que me ha dejado, menos mal que no se ha bebido, además, la cerveza.

Hemos vuelto a casa a tiempo para comer y luego hemos tomado el bus 18, luego el 19, y a las cuatro menos diez estábamos en el Aula de Teatro, para asistir a la sesión de Cine Fórum, donde se proyectaba 'Un Mónstruo viene a verme' dirigida por Bayona y con un excelente reparto internacional.

No he podido evitar unas lágrimas durante la proyección de la película, y no ha sido por no poder salir a fumar, sino por la enorme carga emocional de este film trágico, que trata del dolor de la pérdida cuando muere un ser queriso.

En este caso, el protagonista es un niño de doce años, que pierde a su madre enferma de cáncer, y no conecta bien con su padre, separado, ni con su abuela, muy estricta. La peli tiene un componente fantástico resuelto con mucho arte en la figura de un árbol monstruoso, un tejo, que se aparece al niño en sus pesadillas y, tangencialmente, pero en el contexto de crisis emocional del niño, también se trata el acoso escolar.

Un drama, pero, a la vez, una magnífica pelìcula, si no la han visto, no se la pierdan.

No hemos participado en el coloquio, porque mi mujer tenía prisa por volver a casa, pues tenía sueño por no haber hecho la siesta, pero, antes de irnos, he dado una opinión, si no la doy reviento.

"Hemos visto una historia sobre el dolor de la pérdida, pero imaginenla al revés, que fuera la madre la que ve morir a su hijo. Una vecina de mi barrio, perdió a su hijo hace quince años, y nunca se ha recuperado de esa pérdida"

No tengo nada más que añadir, son más de las once, así que, plego.

En fin. El Moscardón.

LOhENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 28 11 17