Hoy he madrugado, he bajado al bar de los locos, que está anexo al quiosco, he sacado un paquete de Lucky, del caro, del barato no quedaba, y he tomado un café en la barra. La prensa no había llegado, me da igual porque el lunes no la compro, todo es fútbol.
He pegado la hebra con Mari, la quiosquera, mientras fumaba unos cigarrillos por el puro placer de la transgresión impune, dejan fumar y tienen la máquina de tabaco siempre abierta, son así, no hacen ni caso de la Ley del tabaco, desde que se promulgó.
(...)
Estaba diciendo a Mari, como pasa el tiempo, ya hace casi nueve años que me jubilé, tu sabes la cantidad de pasta que me han dado desde entonces, ahora que vivimos hasta los noventa, yo no se de donde se va a sacar tanta pasta.
Pero, tu has cotizado mas de cuarenta años, no te dan nada que no hayas pagado antes. No sé. En eso que ha entrado un señor mayor, todavía en activo, y ha comentado que el no se piensa jubilar, que va a trabajar hasta que el cuerpo aguante, que le gusta sentirse útil.
Esa es la actitud, si señor, que necesita el país, no las oleadas de jubilaciones anticipadas, Telefónica, Bancos, que han creado en los últimos veinte años una clase ociosa antes de tiempo, que, sumada a los millones de jóvenes que no pueden cotizar a su pesar, porque no trabajan, son las causas del desequilibrio en las cuentas sociales.
Sospecho que ese desequilibrio se va a traducir, muy pronto, en un nuevo palo que nos van a dar, esta vez a los jubilados. Además de la oleada de privatizaciones que tienen el objeto, no de ahorrar en el sector público, como dicen, sino de dejar paso franco a los mercados privados en los públicos, para que se forren a costa nuestra.
¿Sabe usted, le he dicho al parroquiano que ha coincidido conmigo en la barra del bar, que he buscado en el Espasa la palabra privatizar, y no existe?
¿Y...?
Pues, que debe ser una cosa nueva, un invento reciente.
No creo, se llamaría de otra manera, eso, me parece, ya es viejo...
Bueno, si por privatizar entendemos llenar los bolsillos privados, a costa del bolsillo público, ya es viejo, si, pero antes se hacía de otra manera, recuerde las empresas públicas, nacionalizadas, Renfe, Telefónica, fueron las mas emblemáticas.
Cuando fueron empresas nacionalizadas, los capitales privados a través de las empresas de servicios que les facturaban por trabajos de mantenimiento y esas cosas, las vaciaron, les chuparon el tuétano de tal manera, que las hicieron inviables y hubo que desguazarlas, lo hicieron sin privatizarlas, simplemente se las comieron con los dedos hasta dejar solo los huesos. Es solo un ejemplo.
No me parece que eso sea exactamente privatizar, una vez agotado el filón de Renfe, Telefónica, Iberia y tantas otras, privatizar es, ahora, facilitar a los mercados privados el acceso a lo que queda de los mercados públicos,
Sanidad, Educación, Cultura, solo falta que entren también en Defensa, como en Estados Unidos, donde las guerras mas o menos imperialistas se libran ahora con el concurso de empresas privadas. Todo se andará.
En eso ha intervenido Mari, para decir que yo no me debo sentir incómodo por el peso de mi pensión en las arcas públicas, porque hay otros que no han cotizado y perciben ayudas del Estado.
Como mi mujer, he dicho yo, que percibe una pensión no contributiva, pero sucede que ella si trabajó para merecer una pensión contributiva, pero el hijo de puta de su jefe se quedó las cotizaciones, no pagó y ella se ha quedado sin ese derecho merecido por su vida laboral auténtica, no la que figura en los registros.
El cliente que nos acompañaba en la barra, antes de salir, ha comentado, eso era bastante corriente en ciertas épocas,
los que somos bastante mayores hemos visto muchos casos de esos, pero, en fin, yo voy a seguir trabajando mientras pueda, no quiero ser una carga para el Estado, y además, me gusta trabajar, estoy bien así, activo.
Dígaselo al millar de médicos de la sanidad madrileña y valenciana que han echado a la calle por demasiado mayores, dejando desmantelados algunos servicios de la sanidad pública, para facilitar la entrada de los mercados privados.
Privatizar. Un enigma lingüístico, al menos en mi diccionario. Lo busco en Wikipedia. Proceso económico jurídico mediante el cual las actividades empresariales del sector público son transferidas al sector privado.
¿Actividades
empresariales?, aquí falla algo, ¿Se pueden calificar así los servicios de sanidad, educación, o cultura de carácter público?. No me convence la definición. Proceso mediante el cual los mercados privados se apropian de los públicos, con la complicidad necesaria de las clases políticas. Me parece mas preciso, si.
En fin. Privatizar.
LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 27/05/13.
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