(...) “Una lluvia fina golpeaba suavemente, con un ritmo casi musical, el canalón que pasaba junto a la ventana de su dormitorio. Ese suave sonido rítmico despertó a Pau a las ocho de la mañana. Sintió que había pasado una mala noche, pero no recordó lo que había soñado. Cuando se hubo aseado, puso en el fuego un cacharro metálico con un resto de café sobrado y un poco de leche.
Sacó de la nevera un tarro de cristal con crema de queso fundido y extendió un poco de crema sobre un trozo de pan tostado. Se tomó el café con leche, se comió la tostada y se asomó a la ventana.
Llovía, pero no con la intensidad suficiente para hacerle desistir de sus planes para esa mañana. Su amigo Vázquez, el pintor, de quien hacía mucho tiempo que no sabía nada, le había llamado para recomendarle una visita a las esculturas expuestas al aire libre en el campus de la Universidad Politécnica.
Se vistió, cogió la chaqueta, puso un par de ciruelas en el bolsillo y escogió un paraguas negro, plegable, de los varios que había en un cacharro de loza, en el vestíbulo. Fué andando hasta la plaza del Ayuntamiento y allí tomó un autobús que le condujo al campus de Tarongers”
--”¿Tu crees que el arte abstracto y la física cuántica están relacionados...?
--No sé. La física cuántica postula la existencia de múltiples realidades y la neurociencia nos enseña que nuestra percepción de una única realidad está lastrada y filtrada por nuestras estructuras cerebrales....
--Y...?
--Si suponemos que los artistas abstractos estaban y están al corriente de los avances de las ciencias, la abstracción en las artes plásticas podría ser el intento de trascender la representación de una única realidad, que es lo que hacen los figurativos, buscando expresar la multirealidad por medio de formas que no están presentes en el entorno, elaboradas por el propio artista, que se distancia del mundo objetual en ese intento....
--De ahí la dificultad que muestra el observador para interpretarlas, al carecer de referencias objetivas para reconocer esas formas...
--Algo así......
--¿Y no será una mera cuestión semántica? ¿El uso de dos lenguajes, abstracto y figurativo, para representar la misma realidad? ¿No nos estarán confundiendo las palabras? ¿No sería mas preciso hablar de arte objetivo y subjetivo? La abstracción no es mas que el resultado de la elaboración mental del sujeto y está igualmente lastrada y filtrada por la naturaleza de sus estructuras cerebrales.
--Si eso es así, implicaría el reconocimiento del fracaso de mas de un siglo de intentos por trascender las limitaciones del arte en la percepción de la realidad.
--¿Y que?. No veo nada negativo en el reconocimiento de las propias limitaciones. Además, es posible que las primeras vanguardias fueran ajenas a la conceptualización del arte, que en nuestros días ha generado tantas chorradas. Los cubistas debieron estar muy ocupados deconstruyendo la figura y los expresionistas, pobres, pillados en medio de la barbarie de las guerras en Europa, solo parecen expresar el desgarro que les producía ese dolor. Algo tan irracional y doloroso, tuvo que estar alejado de cualquier noción de concepto.
--¿Entonces...?
--Esta bien que las teorías del arte evolucionen con el tiempo y jueguen con las palabras. Es divertido. Pero las gentes, en general, quienes lo observamos, lo contemplanos o, simplemente, pasamos junto a el, no deberíamos reverenciarlo como algo sagrado, sino apreciar sus cualidades de forma, color o representación, desde nuestro personal sentido de la percepción, el gusto y el criterio.
Conviene recordar que, desde los primeros homínidos que dejaron la huella de su mano con un pigmento de arcilla sobre la bóveda de la cueva que habitaron, hasta algunos escultores contemporáneos que firman su obra de la misma manera, cada obra es el resultado del genio y de las limitaciones de las personas que nos devuelven, interpretada por ellos mismos, la única realidad que son capaces de percibir, lastrada y filtrada por sus estructuras cerebrales. Aunque la física cuántica sostiene que hay otras realidades, por ahora no parecen estar a nuestro alcance.
--¿ Y el arte conceptual?
--Tuve un amigo pintor que sostenía algo muy sencillo. El arte es una actitud ante la vida. La obra de arte es solo el resultado de esa actitud. A mi, como concepto, me parece suficiente.”
Pau escuchó este diálogo a dos desconocidas, mientras se comía dos ciruelas sentado en un banco del campus, antes de iniciar la visita a las esculturas allí instaladas. Como no era un experto en nada, no alcanzó a comprender lo que había escuchado, como tampoco entendió demasiado las explicaciones de la visita guiada que siguió después.
Si reconoció, en cambio, las sensaciones muy vivas que sintió al mezclarse en el campus con hordas de jóvenes que expandían su energía por todas partes, en las escaleras que comunicaban las diversas dependencias, en la cafetería, donde algunos devoraban, ensimismados, sus apuntes, mientras otros permanecían ociosos, y en los caminos ligeramente mojados por la lluvia, por donde transitaban de una facultad a otra.
Estas vibraciones fueron como un choque energético que penetró el cuerpo sexagenario de Pau. La mañana fresca y el aire libre contribuyeron a acentuar la sensación de fuerza que lo invadía, y cuando se detuvo junto al toro de bronce modelado por Ripollés, comprendió de donde saca su energía el viejo contumaz que es el pintor de Castellón, con su barba floreada y su aire iconoclasta.
La saca de la vida, y esa visita a las esculturas del campus del Politécnico, la percibió Pau como un baño de esa sustancia vitalista en estado puro que impregna la creación artística, aunque a menudo se nos escape su sentido.” (...)
(Fragmento de "Después de Praga", libro inacabado sobre fantasmas y un congreso en Nottingham. Texto revisado en 2.008)
LOHENGRIN. (CIBERLOHENGRIN.COM) 20-12-08.
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