lunes, 29 de noviembre de 2010

CERTEZAS

En tiempo de dudas, la certeza se cotiza como si fuera una trufa negra, un Rembrandt aparecido en el desván de algún museo por su atribución inicial a un pintor menor, un huevo de oro como los que creaba el orfebre del zar, o un inédito de Borges encontrado en el cajón de una mesa de roble del vetusto despacho de alguna fundación.

La Economía de toda la vida explica este fenómeno por medio de la escasez. Cuando un bien es notoriamente escaso, su precio aumenta vertiginosamente. Esto, que parece cierto, convive sin embargo con otra certeza. La de que el precio que se exige pagar a la mayoría de los ciudadanos, por las dudas de otros que empujan hacia el abismo las cotizaciones de bolsa, los presupuestos de los gobiernos, el gasto social y las expectativas de bienestar, sumado, es notablemente mayor que el valor que puede alcanzar en una subasta la mas apreciada de las certezas tan ansiadas por los inversores.

De dudas y certezas es de lo que va la entrada de hoy, ya que el toque experimental de la última, solo ha merecido el interés de cuatro visitas. En fin.

(...)
El tiempo que vivimos es mas pródigo en dudas que en certezas. Almunia, el comisario europeo, insta a Zapatero a que despeje las dudas sobre la voluntad política del gobierno para aplicar de inmediato las medidas prometidas para recuperar un mayor grado de confianza en la situación del país.

El gobernador del Banco de España pide a los bancos mayor transparencia sobre el valor de los activos inmobiliarios en su poder, para contestar las dudas de los inversores que hacen caer las bolsas.

Zapatero se ve obligado a desmentir rotundamente las dudas sobre un hipotético rescate financiero de España. Merkel, por si acaso, dice que Alemania ya no va a poner un duro más, que se rasquen el bolsillo --si llegara el caso-- los bancos.

A las dudas financieras, se añaden las políticas, por el resultado de las elecciones en Catalunya. ¿Que hará Mas con su mayoría relativa?

Para que no sean solo dudas financieras o institucionales, añadamos un par de dudas, digamos, mas domésticas.

¿Hay otra vida después de la muerte?

¿Nos alcanzará para comprar el turrón en Navidad?

Ya se ve que son mas las preguntas que las respuestas, las dudas que las certezas, sin embargo aventuraré, yo, que soy mas partidario de la duda, un par de certezas.

Respecto a la actitud de Mas una vez alcanzada la mayoría, me aventuro a suponer como cierto que lo que hará es tratar de conservarla, el mayor tiempo posible, a toda costa. Las decisiones que sean compatibles con esa prioridad absoluta, serán tomadas, las que sean contrarias, no. Apoya esta certeza una ley invisible de la termodinámica que indica que la razón de ser de cualquier poder político, es su propia supervivencia.

La segunda gran certeza es que todos hemos de morir algún día, pero contra esa certeza, se opone la tremenda duda de cual será ese día para cada uno de nosotros.
Algunos partidarios de la certeza absoluta se oponen a vivir con la zozobra de esa duda. El hermano de un amigo ha intentado cinco veces fijar el mismo la fecha de su muerte, pero el azar se lo ha impedido, lo que me mueve a pensar que la duda es resistente a la certeza, hasta el final.

Yo, la verdad, prefiero la duda a la certeza. Visualizo la duda como una bifurcación en la que tenemos la libertad de optar por un camino u otro, y eso me parece mas aventurero, mas ameno, que transitar por una senda única, determinada, donde la certeza de lo que va a ocurrir está rodeada por el mismo paisaje, un paisaje único, que nos niega la oportunidad de la novedad, del cambio, de la participación activa para ser parte de un paisaje nuevo, reinventado, diferente.

Pero así como el precio de las certezas es elevadísimo en tiempo de dudas, el precio que nos quieren hacer pagar otros por sus dudas, en su dimensión colectiva, es tan oneroso, que comprendo que haga desear a la mucha gente que se siente aplastada por esas dudas, un poco de certeza.

En cuanto a lo del turrón, ni me lo planteo, hace años que no lo pruebo, ni siquiera en Navidad.

En fin. Certezas.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN.COM) 29-11-10.

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