ALARMA

He bajado al bar de los locos dispuesto a comprar El País, pero cuando he pasado al quiosco anexo he visto colgado entre pinzas el ejemplar de hoy que llevaba un titular tan alarmista que me ha tirado para atrás. Hay otra razón, lo confieso. Babelia, el supuesto suplemento literario de los sábados es cada vez un ladrillo mas indigesto, una cosa aburrida, plomiza , que apenas disimula que se trata de una separata publicitaria al servicio de editoras afines. Me he refugiado en la prensa local, qué acierto, porque la última de 'Levante' ha hecho que me descojone de risa.
(...)
El caso es que, después de mirar el titular terrorífico de 'El País', 'Alerta en Europa ante una salida turbulenta de Grecia..', algo así, he buscado el digital y, sorpresa, el titular alarmista no aparecía por ningún lado, en su lugar aparecía algo mas moderado, 'Europa contiene el aliento ante los resultados de las elecciones en Grecia'.

Convendrán conmigo en que contener el aliento es algo infinitamente menos peligroso que estar en situación de alerta, que es un término de resonancias guerreras. No sabía yo, hasta hoy, que el sensacionalismo lo reservan algunos editores de periódicos para las ediciones impresas --que mal deben estar sus finanzas-- mientras que en la Red, que tiene mas mala fama, se muestran mas moderados.

Decía que me he descojonado con la última de 'Levante', ya digo porqué. Casi toda la página va dedicada a la efigie y la entrevista a una de las personalidades mas pedantes que han pasado por la vida nacional. César Antonio Molina, que fue ministro de cultura y ahora dirige, nada menos, que 'La casa del lector', no sabía yo que existiera tal cosa. Desde esa condición, supongo, declara, 'Espero que Zapatero tenga ahora tiempo para leer'.

Aquí hay un malentendido, si se supone que la actividad lectora es, en si misma, productiva, positiva, sin matizar lo que se lee. Si tu lees, como parece evidente que hizo César Antonio Molina, a autores igual o mas pedantes que tu, solo conseguirás que crezca tu pedantería. Ignoro si San Francisco de Asís dejó una obra escrita relevante, pero sus hagiografos seguro que destacaron la virtud de la humildad en la vida pública, aunque muchos no se han enterado.

Por otro lado, es un error de apreciación suponer que Zapatero no leyó. Seguro que leyó mucha Teoría del Estado, que es de lo único que sabía, de teoría, pero ese bagaje lector le sirvió para alcanzar un estatus incluso mas peligroso para los ciudadanos que el de ministro pedante, el de presidente despistado. Una evidencia de lo peligrosa que puede ser la lectura, cuando no se eligen los autores adecuados.

Me he descojonado de risa con la columna de Isabel Vicente, 'Algo visceral',que va de las relaciones políticas y personales entre algunas figuras de la política francesa, que fueron pareja y ahora son 'ex'. La visceralidad es algo que no debería ser noticia, digo yo, pues al fin y al cabo ¿que somos, sino un paquete de visceras envuelto en la apariencia de la racionalidad?

Ocurre que las apariencias engañan, yo me metí el otro día con la escritura piadosa y falsamente crítica de de la Guardia y hoy un artículo suyo radicalmente feroz, como si hubiera leído mi ácida sátira, me desmiente, aunque se mete, eso si, ¡con los catalanes!, jo, que risa.

Estos días he tenido la percepción de que el mundo de la comunicación tiene cosas raras, no se si se trata de sinergias, de simples plagios, o de la existencia de una nube comunicacional en la que vivimos todos y, por azar, falta de imaginación o lo que sea, tomamos de la nube cosas que luego resultan ser coincidentes.

Me explico. Después de citar en una de mis páginas que hablamos del tiempo como en las conversaciones de ascensor, un meteorólogo usa idéntica expresión en la tele. Rábago, después de publicar yo la página Cela, pone en 'Levante' una cosa suya de ese autor del que ya nadie se acuerda, y por último, la visceralidad de de la Guardia en su artículo de hoy, no parece desconectada de mi critica del otro día a su escritura, no al escritor.

Deseo que esta casual coincidencia comunicacional se deba a las sinergias que yo siempre he defendido entre la comunicación impresa y la Red, aunque me parece mas plausible que se deba a la existencia de una nube en la que vivimos todos y que nos influye en lo que escribimos a través del puro azar. De lo que tengo serias dudas es de si hacer caso al titular de 'El País' de la edición impresa, o al de su expresión digital.

Creo que me voy a decantar por el de la digital, porque esta tarde hemos quedado con Antonio y Lola para tomar un mojito en el Marítimo, y es mejor contener el aliento, por si al final nos suben el IVA del mojito,o a ellos, que son trabajadores del sector público, les bajan otra vez el sueldo, que pensar que estamos en una situación de alerta, o sea, de guerra.

Digo esto porque ayer vi medio documental de la BBC sobre la guerra de Las Malvinas, y me pareció patético oír a mandos veteranos de las tropas galesas que aquello fue un caos, en el que muchos soldados perdieron la vida, a causa de las órdenes contradictorias del alto mando, hasta cinco veces dieron la voz de alerta para que se prepararan para desembarcar, pero las lanchas para el desembarco nunca aparecieron, dando lugar a que la aviación argentina hiciera una masacre, como la que los propios argentinos sufrieron cuando uno de sus barcos fue hundido.

Da miedo, ¿no?, que un periódico de ámbito nacional de la voz de alerta, conociendo la incompetencia de nuestros mandos para organizar la retirada.

Nosotros nos vamos al Marítimo esta tarde a tomar los mojitos, y no pensamos hacer ni puto caso de las órdenes del alto mando, por si acaso.

En fin. Alarma.

LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 16-06-12.