VERGARA

He bajado al bar de los locos a una hora temprana, con el día amenazado de bochorno tras unas gotas de lluvia que han dejado perdidos los coches estacionados en la calle, bajo un cielo nuboso y el efecto de la smog fotoquímica (Taulé).

 El ejemplar de 'Levante' que he comprado, recién sacado del paquete, aún estaba calentito, como un arroz con bogavante. En mi vida he visto un bogavante en el mar de aquí, lo que me dificulta entender el concepto de 'cocina valenciana', que usa Antonio Vergara en su Anuario que, cada vez que sale a la venta, es un éxito tras el que hay un esfuerzo de promoción editorial que no tiene ningún otro producto, literario o no. Vergara es un periodista gastronómico de éxito, que lo sabe todo sobre cocina, en cambio yo soy un pobre ignorante incapaz de relacionar el origen de los bogavantes con el arroz.
(...)
Por eso, al ver la efigie de Vergara en la 6 de 'Levante', sin hacer caso del titular, he leído su artículo por si trataba sobre bogavantes, pero no, la cosa iba de 'Bous al carrer'. Este hombre es que lo sabe todo. Yo había vislumbrado, porque lo he leído alguna vez, cual es su actitud sobre cocina, política, cultura y comunicación, que es básicamente la misma, pero hoy, sin  venir a cuento, añade unas líneas que definen claramente su pensamiento sobre el nivel cultural de los demás, los pobres humanos que no han tenido la fortuna de ser Vergara.

En el contexto de la declaración, o no, de bien cultural de los 'Bous al carrer' a que dedica su artículo de hoy,  Vergara, dice, entre otras tonterías, la siguiente ...'Pero el ser o no ser del futuro cultural.. del Antiguo Reino de Valencia ??? , se dirime estos días ...y en el parlamento callejero de la verborrea, sin olvidar ... a los centenares de miles de baldíos homínidos que calientan sus culos siete horas diarias en las redes sociales (¿cuando trabajan o leen?)...'.

Hombre, Antonio, te has pasao, ya ves que leer, leemos, incluso te leemos a ti,  aunque reconozco que desenmascarar a un tipo como tu, a lo que me voy a dedicar enseguida, no da mucho trabajo.

Este humilde homínido lector, --me tiento el culo y aún no está caliente, por lo temprana de la hora-- leyó mucho a otros autores, incluyendo las querencias gastronómicas de Vazquez Montalbán, o a Xavier Domingo, --Cuando solo nos queda la comida-- que publicaba, parece que hace siglos, sus artículos en Cambio 16, y creo recordar que su actitud ante el hecho gastronómico era mas abierta que la de Vergara, que igual que niega el pan y la sal a los internautas con una generalización indecente, cuando se trata de valorar la innovación en la cocina, saca a pasear su instinto reaccionario, muy entrenado ya en la política, la cultura y la comunicación.

¿Cual es el secreto del éxito de este periodista corrupto?. Corrupto, si.  Se ha quedado con el monopolio del periodismo gastronómico y desde ese pedestal reparte, no estoy seguro de si poniendo el cazo, premios y castigos a su antojo, de modo que el que se mueve, no sale en la foto. La responsabilidad de tamaño despropósito no es solo suya, sino de quien se lo consiente.

Reconozco que lo que sé de Vergara, lo sé solo a través de sus artículos. Aunque asisto a una tertulia de periodistas bien informados los viernes, que incluye a un periodista gastronómico, jamas he oído nada en contra, ni a favor, de Antonio Vergara. Hablo, pues, desde mi mas primaria intuición, que me dice que Vergara pone el cazo.

La soberbia de este hombre es casi tan desmesurada como la mía, que ya es decir, por eso, por que soy un tipo soberbio, no acepto, sin manifestar mi rechazo, que un tipo corrupto como Vergara se permita lanzar opiniones como la que  ha eructado, sin matizar nada,  sobre el mundo de la comunicación cibernauta que, como el de la gastronomía, tiene de todo, tipos creativos y aburridos, eruditos e ignorantes, honestos y estafadores, algo a lo que tu te pareces.

En fin. Vergara.

 LOHENGRIN (CIBERLOHENGRIN) 3-06-12.